One Shots | Blue Lock |

Nagi Seishiro

Gracias a la insistencia de su novia al notar lo bien que se le daban los videojuegos, Nagi se abrió un canal para hacer streams, claramente no pensó que escalaría tan rápido, pero así fue.

En cuestión de unos meses ya tenía una pequeña-gran comunidad de personas que lo veían jugar o hablar de algunos juegos.

Aquel era uno de esos días en los que decidía charlar un rato con su comunidad acerca de cosas banales, concretamente era una tarde de preguntas.

— ¿Cuál es tú juego favorito?

Fue una de las preguntas que llegó a través de una donación.

— Creo que jamás me he dedicado a buscar un favorito, simplemente juego algunos que parecen interesantes y ya — respondió el peliblanco sin pensarlo mucho.

— ¿Por qué empezaste a hacer streams?

— Mi novia fue la de la idea.

Ante la declaración, el chat de Nagi se volvió un caos al tiempo que empezaban a llegar miles de preguntas acerca de lo dicho.

— ¿Tienes novia?

— Eso es lo que acabo de decir.

— ¿Está en el chat?

— Supongo que si, siempre lo está, desde el inicio ha estado aquí.

— ¿La vas a enseñar?

— Alto ahí, no se pasen — mencionó un tanto enojado.

— ¿Es linda?

— A qué viene esa pregunta.

— ¿Cuánto tiempo llevan juntos?

— Bastante. Ya basta de esas preguntas.

Nagi, al seguir recibiendo ese tipo de preguntas, optó por simplemente terminar la transmisión, fue en ese momento que pudo suspirar con frustración.

Al sentir una vibración cercana, notó la llamada entrante de (N) por lo que contestó de inmediato.

— ¿Estás bien? — fue lo primero que pronunció la voz al otro lado.

— Ahora que te escucho me siento mejor — ante lo dicho, (N) soltó una risa.

— Seisei que coqueto — bromeó la fémina.

— De haber sabido que serían así, mejor no hubiera dicho nada — habló Nagi haciendo referencia a su chat momentos antes.

— Ay, era una broma, no te enojes, sigue diciéndome cosas lindas — (N) pensó que lo dicho anteriormente era dirigido hacia ella.

— Tonta, estoy hablando sobre mi chat — se rió el peliblanco.

— Ah.

(...)

Al día siguiente de aquello, Nagi quiso hacer stream como era habitual, pero no pudo debido a que la confesión de ayer seguía causando revuelo.

Es por eso que se tomó unas mini vacaciones en lo que esperaba se dejara hablar del tema. Aquellas mini vacaciones no fue más que jugar videojuegos y estar con su novia.

— Seisei, ¿no crees que es momento de salir a tocar pasto? — preguntó la fémina tratando de hacerlo salir.

— Linda, está lloviendo.

— Son detalles menores — trató de restarle importancia, fallando rotundamente debido al trueno que cayó justo después de decir aquello.

— ¿Te quedarás a dormir? — preguntó Nagi mientras la abrazaba por la cintura.

— Lo podría pensar — comentó coqueta acercándose a los labios del peliblanco el cual no perdió tiempo y acortó la distancia que quedaba.

— ¿Y ahora? — volvió a preguntar una vez se separaron.

— Está bien, déjame avisar a mi casa.

— No es necesario, ya lo hice yo por ti.

(N) no pudo objetar debido a que el más alto la cargó y se lanzó a la cama, acomodándose dispuesto a dormir escuchando el ruido de la lluvia caer.

(...)

(N) abría los ojos lentamente notando de inmediato que se encontraba sola en la cama. Aquello le extrañó por lo que se sentó en la cama bostezando, giró la mirada y notó al peliblanco ajustando los últimos detalles para empezar su stream.

— ¿Vas a prender stream? — preguntó la fémina con voz ronca.

Ante la pregunta, Nagi se acercó a la adolescente y la abrazó.

— Me dieron ganas de continuar el juego que estaba jugando el stream anterior.

— Oh, ya veo, mucha suerte con ello. Ponte una sudadera, hace frío — lo regañó su novia al notar que el más alto llevaba puesta una camiseta — De paso dame una a mi — pidió (N) cuando Nagi se acercó a su closet a buscar las prendas.

Después de aquello, Seishiro empezó a transmitir mientras que la fémina seguía acostada un rato más. A ratos se quedaba mirando a Nagi, para después seguir jugando en su celular.

Al cabo de lo que suponía fue una hora, la temperatura disminuyó drásticamente. A Nagi aquello parecía no importarle, mientras que a (N) le afectó bastante.

La fémina suspiró antes de levantarse de la cama, el peliblanco disimuladamente la miró salir de la habitación. Pasados unos minutos (N) volvió a entrar a la habitación, pero esta vez portaba una taza en cada mano. Dejó su taza sobre el mueble que había a un lado de la cama mientras que se acercó hacia su novio con la otra taza.

De inmediato Nagi se percató de la fémina por lo que la miró expectante. (N) le entregó la taza para después darle un beso en la frente, ante el tacto de la contraria, el peliblanco se dejó mimar. Mientras sucedía esa linda escena, el chat del streamer era un caos total, desde que apareció en cámara la espalda de la fémina todo se revolucionó, peor fue cuando alguien mencionó que la fémina llevaba puesta la sudadera del contrario.

(N) se devolvió a la cama mientras que Nagi probaba aquel chocolate caliente que le había preparado la contraria, al notar el caos de chat, lejos de aclararlo, el peliblanco miró a la cámara con una sonrisa altanera.