FANFIC ILEMMA [EDITANDO]

CEI

Entro en mi habitación y pienso que puedo tomar un baño en esa Bañera de Ilenko ya que a mi parecer demoran.

Con ese pensamiento, tomo muda de ropa y me dispongo a ir al cuarto, en la entrada como siempre se encuentran dos de los Boyeviki, como soy Esposa no preguntan y uno de ellos me abre la puerta.

La ropa la dejo en la cama y me dispongo a quitarme la que tengo y dejarla alado, tomo una toalla en uno de los cajones y entro al baño.

Comienzo a llenar la bañera, me quito la toalla y cuando creo que tiene más que suficiente me meto en ella.

Cierro los ojos y trato de relajarme un poco.

No se cuanto tiempo estuve aquí, pero caigo en cuenta que me dormí y mientras abro mis ojos, me encuentro con la mirada del mafioso, con esos ojos cargados de ganas y muchas promesas que no necesitan ser dichas, a pocos pasos de mi.

Debería asustarme, debería bajar la mirada cuando me ve así, debería tener un freno con el, pero no puedo.

De hecho... No quiero.

Se acerca lentamente y mis ojos solo pueden permanecer en el, en la manera en la que camina cual León acechando su presa.

Se pasa la mano por la espalda y de esa manera quita la sudadera que tenía, y procede a quitar el botón de el vaquero y bajárselo, dejándolo desnudo.

Desnudo para mi.

—Bebé, mira lo que tu mirada hace —Pasa sus manos por el miembro ya erecto y listo, demostrando lo que le hago. —, Apuesto a que meto mis manos y estarás mojada para mi ¿No es así?

Abro la boca buscando que decir, pero no sale nada y en vez de eso suelto un suspiro y me es inevitable no pasar mis manos por mi estómago e ir bajando sin preámbulo hasta mi sexo, confirmando que siempre estaré lista para el.

𝑺𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝒔𝒖𝒚𝒂.

𝑷𝒂𝒓𝒂 𝒕𝒐𝒎𝒂𝒓..

𝑷𝒂𝒓𝒂 𝒑𝒐𝒔𝒆𝒆𝒓 𝒚 𝒔𝒊𝒆𝒎𝒑𝒓𝒆 𝒂 𝒔𝒖 𝒆𝒏𝒕𝒆𝒓𝒂 𝒅𝒊𝒔𝒑𝒐𝒔𝒊𝒄𝒊𝒐́𝒏.

Veo sus ojos oscurecidos, con esa mirada llena de morbo y se acerca a mientras extiende una de sus manos para que la tome y salga de la bañera, con la otra mano se sigue acariciando dando tirones suaves como si no tuviera prisa, tomándolo con suavidad porque sabe que pronto estará en un lugar acogedor y lleno de calor.

Tomando su mano, salgo y no me suelta más bien me acerca a el haciéndome sentir su dureza en mi estómago y me es inevitable no frotarme sobre el, posar mis mejillas en su pecho mientras me acaricio en el.

—Ved'ma, Sin prisa.—Gruñe y una de sus manos toma mi culo con fuerza restregándonos como críos buscando fricción entre los dos.

Se aleja un poco de mi y me mira —Ven conmigo.

No me seca y así salimos del baño nunca suelta mi mano, caminamos del otro extremo de la cama y me acuesta abriendo automáticamente mis piernas.

Expuesta para el.

Dando un espectáculo total si la puerta del dormitorio se abriera.

Sonríe y no es una sonrisa con motivos tranquilizadores.

Una sonrisa perversa, una que te haría tener miedo de tener la expectativa de lo que podría suceder si sus manos llegan a tocar mi piel.

Se acerca lentamente y pone una de sus rodillas en la cama, mientras la otra queda fuera de ella, toma una de mis piernas, posándolas en su hombro dejándome más abierta para el, a tener acceso a todo de mi.