Hijo de la luna [Christopher Vélez y tu]

Capitulo23: "Mason y Christopher"

Mire a Christopher confundida.

— Entonces si no eres tú, ¿quien es? – pregunté.

Christopher todo los ojos y soltó un suspiro.

— ¡No se nada!, La única que sabe es mi mamá.– comento secamente.— ¡Oh mira! Ahí viene el idiota.– dijo señalando a Mason que venia corriendo.

— ¡Hola, Tn_! – sonrió. — Creo que fue correcto que llegara temprano.

— Si, el chico con el que trabajo me dijo que cerraríamos temprano.– sonreí.

— Ya veo porque, la luna.– señaló la luna llena.

Mason volteo a ver hacia donde estaba Erick.

— ¡Oh disculpa! ¿quien eres? — Christopher lo miro con desagrado.

— Soy Erick Colón.– respondió.— ¿Y tú?

— Mason Cooper, mucho gusto Erick.– le tendió la mano agradablemente en forma de saludo, Christopher miro con repugnancia la mano y le correspondió el saludo.

— Mmm.– Masón dejo de tenerle la mano a Christopher y me miro tratando de que le diera una explicación, yo solo le sonreí y me hice la loca.

— Bueno pues, ¿Nos vamos linda? – dijo Masón.

— Ah cla... – Christopher me interrumpió.

— ¡Si, ya vámonos! – Christopher me tomo del brazo.

— ¿Que? – Mason nos miro confundido.

— Mira niño, tengo que acompañarla.– hablo el ojiverde.— Su papá me pidió que la cuidara, ya vez como es esta situación con mi... – hizo una pequeña pausa. — Digo con la luna, y menos con desconocidos como tú.

Masón le dió una mirada no muy agradable. Por culpa de Christopher, Erick se está ganado enemigos gratis.

— Masón, todo estará bien Erick es un muy bien amigo.– le sonreí.

— Está bien, comprendo que es difícil salir en estos tiempos.

Christopher sonrió falsamente.

— Pues ya caminen.– dijo Christopher.

[...]

Nos encontrábamos en un restaurante de comida mexicana, masón y Christopher se sentaron uno enfrente del otro y yo me encontraba a la orilla del lado derecho de Masón y del lado izquierdo de Christopher, se podría decir que estaba en medio.

Ninguno decía nada, se sentía demasiado la tensión en el aire, mientras veía como Christopher miraba con odio a Masón.

— Oigan... – Masón interrumpió.

— Aún no puedo entender por qué tu papá quiso que tu amigo te acompañará, mejor me hubieras dicho para yo pedirle permiso a tu papá y que no fuera molestia para Erick, ¿verdad?

— ¡De ninguna manera Maisen!

— ¡Es Mason​!  – Christopher todo los ojos.

— Como sea, no me importa.– dijo desinteresadamente.— Creeme no es ninguna molestia, yo por Tn_ lo hago con mucho gusto.

Sonreí falsamente y mire a Christopher.

— Bueno es que como ya sabes, los papás no tienen confianza de algún amigo y sucede esto.– dije y bebí un poco de la bebida que tenía enfrente.

En verdad me estaba resultando bastante incómodo esto.

— Si, lo comprendo y espero que para la siguiente me dejes hablar con tu papá, para que sepa que estás en buenas manos y no se preocupe.– abrí los ojos a más no poder y Christopher comenzó a reír.

— ¿Que es lo gracioso? – pregunto Masón enojado.

— Nada, nada es que niño, en verdad será inútil que hables con su papá, no te tendrá para nada confianza.– dijo Christopher.

— ¡Puedo ganarme su confianza! – dijo Masón a la defensiva.

— ¡Ya basta! — dije ya cansada de todo esto, solté un suspiro de frustración y hablé.— Lo siento mucho Mason pero hablar con mi papá resulta difícil.– Masón me observo con algo de tristeza.— No es porque no quiera, creeme que si quisiera con mucho gusto.– Christopher frunció el ceño y me miro detenidamente.— Mi padre es una persona muy ocupada, casi no lo veo es por eso.– Cambie mi tono de voz a uno más serio y mire a Christopher.— Que Erick me cuida cuando él no está.– Christopher sonrió, que agradezca que le ayudo en su ridícula mentira.

— Entiendo.– suspiro.

— Ya la escuchaste.– dijo Christopher y bebió de su malteada.

Masón lo miro mal.

— Aquí está su orden.– dijo el mesero entregándonos una orden de tacos.

— Gracias.– dijimos al unisonio.

— Ustedes platiquen — dijo Christopher — Hagan de cuenta que no estoy yo.

— Pero antes iré al sanitario.– me levanté de la mesa, tenía que lavarme las manos antes de agarrar la comida.

Me dirigí al baño dejando a Christopher y Masón solos.

Con Christopher.

— ¡Oye Erick! – Christopher miro a Masón. — Te doy todo el dinero que quieras a cambio de que me dejes a solas con ella.

Christopher curvo la comisura de su boca y miro a Masón, era una lástima que no pudiera utilizar sus poderes hipnóticos en este inútil cuerpo humano.

— ¿Así? – Christopher levantó una ceja. — ¿Y cuanto me piensas dar? – estaba más que claro que Christopher no se iría de ahí, así le dieran todo el dinero del mundo.

— Tú dime ¿cuanto quieres?

— Con que niño rico he.– Christopher soltó una risa.

— ¿Entonces que dices? – masón sonrió, Christopher se puso serio ocasionando que él también lo hiciera.

— Puedes meterte el dinero por donde más te quepa y de una vez te advierto, alejate de ella.

— ¿Y quien me lo va a impedir? ¿tú? – comenzó a reír de manera irónica.

— ¡No!, Yo no, pero conozco a un chico que te puede hacer mucho daño.– Christopher sonrió maliciosamente.

En eso llegó Basteri a la mesa.

— ¡Genial!, Veo que ya comienzan a hablar más, ¿de que me perdí? – comento la chica con una sonrisa en su rostro.

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Solo tengo una pregunta...

¿Porque creen Christopher quiere que MASON se aleje de ella?

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