👁️Estrellita ojos de almendra👁️ [Yoonmin/Sope] (-18)

586 25 0
                                    


Hoseok prendió un cigarro mientras hablaba. -hyung- hizo una pequeña pausa en la que terminó de prender el cigarro y le daba una calada. -¿Por qué siempre mira tanto a las estrellas?- largó el humo.

Yoongi le extendió la mano y Hoseok le dió el cigarro. Le dió una calada y luego se lo devolvió. -no veo a todas las estrellas-

-¿No son todas hermosas? ¿Por qué fijarse solo en una? ¿Qué tal que un día no la vea?-

Yoongi sonrió. -no, no todas son tan hermosas- suspiró. -¿Ves aquella de allí?-

Hoseok asintió al ver una estrella un poquito más alejada.

-se llama Almendra-

Hoseok lo miró confundido. -¿Almendra? Nunca oír hablar de ella-

Yoongi negó. -los astrónomos no la conocen... En realidad yo la bauticé así-

-¿Y eso por qué?- rió dando otra calada. -¿A caso compraste una estrella sin decirme?-

-las estrellas no se compran... No esta...- sus ojos se iluminaron. -si estás dispuesto a escuchar, te contaré la historia-

-bien, bien, adelante- se sentó en la reposera que hacía un rato había sacado al balcón con su amigo.

-bueno... Hace algunos años, unos antes de conocerte... Conocí a un chico- sonrió nostálgico. -era un pequeño muy, muy divertido, llamativo y, por sobretodo, dulce... Parecía un verdadero ángel, carita pálida, cabello rubio y rizado, con un aura que te ponía de buen humor con tan solo sentirlo cerca- suspiró. -resulta que este niño era demasiado curioso... Y así fue como él me conoció a mí, por curiosidad... Poco a poco nos acercamos, fue difícil, pero para cuando quise darme cuenta... Él ya tenía un gran y cálido lugar en mi corazón...-

-¿Se enamoraron? ¿Fueron novios?- preguntó curioso.

-sí, lo fuimos... Pero lo nuestro iba más allá de un simple noviazgo juvenil... Éramos opuestos, y aún así nos complementábamos, nos entendíamos mutuamente, conocíamos al otro mejor que nadie más... No siempre estábamos juntos, no necesitábamos estar pegado al otro para sentirlo cerca... Pero cuándo estábamos juntos- suspiró cual enamorado. -ay Hoseok, cuando estábamos juntos... Todo era simplemente mágico, armonioso... Podíamos comunicarnos solo con la mirada... Y cuando me tocaba, dios santo Hoseok, cuando me tocaba era como si el mundo entero desapareciera, me hacía sentir entre nubes con solo una caricia en mi brazo...-

-aún no entiendo qué tiene que ver con la estrella-

-su sonrisa era radiante... Y sus ojitos tenían un color almendra precioso que se iluminaba al ver las estrellas...- sus ojos se aguaron levemente. -era una imágen tan hermosa que no era merecedora de cualquiera...-

-¿Y qué pasó con él? ¿Terminaron?-

Yoongi negó. -un fin de semana él decidió ir a ver a sus abuelitos, yo no pude ir porque debía visitar a mi tía que acababa de tener un bebé... Así que solo nos despedimos y cada uno se fue por su lado... Algo que recuerdo fue que me había dicho "te extrañaré y amaré hasta el día de mi muerte, y cuando eso pase solo necesitarás ver la estrella alejada a tu derecha para sentirme"...- rió melancólicamente. -fui demasiado tonto para comprenderlo, y cuando lo hice ya fue demasiado tarde...-

-¿Él murió?-

Yoongi negó. -sus pulmones dejaron de respirar... Y su corazón de latir... Pero su alma no- sonrió. -Hoseok, tal vez su cuerpo se encuentre inerte, bajó un montón de tierra que daña su bello rostro, pero¿Su alma?... No, eso no... Su alma está tan viva como el mismísimo universo... Su alma sigue brillando como la primera vez que lo ví, puedo sentirlo, es justo como él dijo... "Solo necesitarás ver la estrella a tu derecha para sentirlo"...- suspiró. -por suerte logré recordar esas palabras, una semana después para ser exactos, yo solo miraba las estrellas con tristeza... Entonces lo ví y pude sentirlo... Por eso la llamé "almendra", como sus ojitos que se iluminaba al ver las estrellas-

-tus ojos también se iluminan al ver las estrellas...-

¿En qué momento Hoseok se había puesto a su lado? No lo sabía, pero estaba acostumbrado.

-los de él eran más bonitos...- lo miró.

Hoseok moría de ganas de tomar su mano, pero creía que no era el momento adecuado. Grande fue su sorpresa cuando el mayor se adelantó y colocó su pálida mano sobre la de él.

-¿Sabes? Él también era un chico muy sabio- sonrió. -me hizo prometerle que, al menos en este mundo, si ya no podía estár en este plano terrenal, yo sería feliz el tiempo que me quedara... Aún si eso significaba encontrar otro tipo de amor con otra persona-

-vaya... Él... Él era muy sano...-

-sí, pero yo era muy tonto...- rió. -Hoseok, no entendí esa frase suya... No hasta este momento- el mencionado se sonrojó. -quiero que sepas que él es una parte muy importante en mi vida y nadie jamás logrará ocupar su lugar...-

Hoseok asintió y bajó su cabeza al haber creído confundir las cosas.

-pero no tienes que ocupar su lugar... Mi corazón tiene más que lugar suficiente para ambos- Hoseok lo miró. -una vez leí por ahí que hay dos tipos de amores en la vida de toda persona: el amor de su vida y su alma gemela... Tal vez Jimin haya sido un poquito de ambas... Pero aún estoy dispuesto a darte el otro poquito de cada lugar que me queda...- admitió finalmente. -quizás no pueda darte todo... Pero puedo darte todo de mí, ahora, de quien soy en este momento... Jamás podré olvidar a Jiminie... Pero eso no significa que no pueda amarte sinceramente y con todo lo que tengo...-

-¿E-está diciendo qué...?...-

-sí Hoseok... Estoy diciendo que, si quieres, puedo darme una segunda oportunidad de ser feliz el resto de mi vida contigo-

Hoseok sonrió. -por supuesto que quiero- tomó sus manos y le sonrió con todo lo que podía. -le juro que le daré lo mejor de mí y jamás se arrepentirá de esta decisión, estaré a su lado y lo cuidaré todo lo que pueda... No quiero el amor que Jimin y tú tenían... Quiero que creemos uno nuevo, ni mejor ni peor, solo algo nuevo y diferente-

Yoongi no esperó más. Tomó sus mejillas entre sus manos y lo besó mientras que Hoseok le correspondía y lo abrazaba por la cintura.

Así fue como ambos decidieron aceptar a la estrella ojitos de almendra y mostrarle que el mayor había cumplido su promesa.

Ahora, aquella estrellita que por tantos años había brillado para mantener a su amado a salvo, podía descansar, apareciendo solo para demostrarle al mayor que estaba bien y que aún lo amaba, pero que ahora confiaba en que estaba en buenas y cuidadosas manos.

Pequeñas Historias. Where stories live. Discover now