Mi pasado Anastasia Steele En edición.

Un nuevo comienzo

Mi nombre es Anastasia Steele, tengo 19 años y acabo de ingresar a la universidad de Seattle, tuve que cambiarme de casa porque yo viví en Portland con mi mamá, pero con Kate decidimos que lo mejor era ir a vivir a Seattle, ella es mi mejor amiga, ella esta estudiando la carrera de periodismo y yo de literatura inglesa.

En esta semana comenzamos la mudanza, me gusta viajar, pero como el viaje fue en coche llegamos cansadas y entumidas, al llegar sacamos nuestras maletas de la cejuela y entramos al departamento que le habían comprado a Kate sus papás. Lo bueno es que en los cuartos ya estaban los muebles y con ello las camas, así que llegamos a descansar y decidimos que después desempacaríamos.

Al día siguiente nos levantamos temprano, tomamos un buen desayuno porque la mañana iba a ser larga, nos pusimos a limpiar, desempacar y acomodar todo, a pesar de que no teníamos muchas cosas y que el departamento no era gigantesco terminamos agotadas, decidimos ir a darnos una ducha e ir a comer a una plaza, por suerte faltaban tres días para entrar a la universidad, así que decidimos después de comer explorar un poco.

Por fin mi primer día de clases, estaba emocionada, me levante cinco minutos antes de que sonara el despertador, me bañe y me vestí con unos jeans negros, una blusa blanca con una chamarra y mis convers no podían faltar, una vez que ya estaba arreglada fui a desayunar con Kate, aunque ella se tuve que ir antes porque tenía que apuntarse a unas materias que le faltaban, por suerte yo ya me había inscrito en todas las que necesitaba para poder empezar las clases, así que no necesitaba llegar antes a la universidad.

Cuando salí de casa tome un taxi, pero solo por un tiempo porque estoy ahorrando para comprarme un coche, aunque sea uno muy sencillo, pero debo encontrar un trabajo solo espero que no sea un problema.

Cuando llegue a la universidad pude divisar a lo lejos a Kate con un muchacho más alto que ella y es que ella de por si ya es alta, él tenía el cabello rubio vestía con un un pantalón negro y una camisa azul. Aunque no podía asegurar, porque no me encontraba a una distancia corta, creo que él es más grande, la verdad no me sorprende que le hagan caso porque ella es guapísima y a donde va siempre anda rompiendo corazones, No quise interrumpir su platica que se veía entretenida, así que decidí seguir caminando pero Kate volteo y me hablo para que fuera junto a ella, así que no me quedo otra opción, yo quería pasar desapercibida y al final no resulto.

-Hola Kate

-Hola Ana, mira él es Elliot, Elliot ella es Anastasia, mi mejor amiga.

- Hola Elliot un gusto.

- Hola Anastasia mucho gusto- me extendió la mano y yo la acepte, debo admitir que tiene una sonrisa linda, ahora veo porque a Kate le gusto, no es feo.

- Bueno, me tengo que ir Kate nos vemos en el apartamento, adiós Elliot.

- Claro, pero no sé a qué hora llegue- me dijo Kate

- Vale, adiós.

-Adiós Ana- me respondieron ambos y yo me fui dejándolos solos de nuevo, solo espero que no le rompa el corazón a Kate, no me gustaría verla durante semanas con su pijama de conejitos rosas y comiendo helado en el sofá, es mi mejor amiga y la amo, pero en ese estado es insoportable.

A la hora de mi primer descanso iba de camino a mi casillero para guardar mis libros y sacar el de la siguiente materia, pero iba tan concentrada en mis pensamientos que choque contra alguien haciendo que mis libros terminaran en él suelo, cuando levante la vista vi a un chico guapo sus ojos eran de un color gris, su pelo de color cobrizo y era alto y demasiado guapo, parecía un dios griego y nada más de verlo me sonroje y baje la vista.