UNSTOPPABLE ── wayne/kent

🦸🏻‍♂️ ▋JON

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CAPÍTULO TRECE.
𓄹 ִֶָ ⋆ EQUIPO FORTALECIDO ✦ ֶָ֪ׄ
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   Las semanas fueron eternas mientras veía como emparejaban a Mary con Robin. Esperé con paciencia que a la semana siguiente fuera mí turno de salir a una misión con ella, pero era como si la Liga estuviera en contra de mis sentimientos. Veía a Mary y a Robin irse en varias ocasiones, creí que sería cosa de una sola vez, pero al parecer a Robin no le molestaba la presencia de Mary.

Lo corroboré en este mismo momento cuando bajamos a la sala de entrenamiento y encontramos a Mary junto a Robin practicando movimientos parejos. Admito que me dio celos el ver cómo coordinan a la perfección.

—¿Desde cuándo esos dos son tan cercanos? —murmuró Lian a mi lado, tanto ella como los demás parecían igual de sorprendidos que yo.

—Buenos movimientos —hablé, haciendo que ambos se detuvieran y voltearan a vernos—. No sabía que entrenaban juntos —sonreí levemente, pasando mi mirada de Mary a Robin, quien ni siquiera mostró un gesto amigable al vernos.

Mis palabras parecieron generar tensión en el ambiente, ya que mi mirada no paraba de posarse en la de Robin, intentaba descifrar lo que él tramaba al estar tanto tiempo junto a Mary, pero era difícil saberlo.

—Si, quería aprender un poco de artes marciales y a cambio le enseñé combate tamariano —soltó Mary.

—Genial, tal vez se acoplen más así, ¿no? —Milagro volteó a vernos con una sonrisa, pero al notar nuestros rostros incómodos decidió apartar la mirada.

—Esto está demasiado tenso —Bart se abrió paso y se puso entre medio de todos—. Deberíamos celebrar el que Mary y Robin hayan completado cinco misiones sin complicaciones. ¿Pizza?

—No...

Robin iba a negarse como habitualmente lo hacía a cada invitación, pero decidí intervenir.

—Me parece buena idea —solté firmemente, viendo entre él y Mary. No supe de dónde salió esa actitud o por qué sentí la necesidad de querer humillarlo de alguna manera frente a Mary.

Solo sabía que no quería que Mary me apartara e hiciera a Robin mejor que yo.

—No iré.

Pasó por un costado de nosotros, caminando a paso lentos y dándonos la espalda. Vi un brillo de desilusión en los ojos de Mary y por alguna razón quise soltar:

—Si es porque no confías en nosotros, no creo que sea buena idea el que seas nuestro líder.

—Jon, ¿qué haces? —susurró Lian a mi costado, mirando entre Mary, Robin y yo, ella sabía que estaba haciendo una escena.

No me gustaba ver los ojos de Mary apagarse solo porque Robin no quería pasar tiempo con nosotros.

Él se detuvo y nos miró desinteresado.

—Soy el líder porque soy el mejor de aquí.

Las miradas fulminantes, heridas y desilusionadas se alzaron entre nosotros. Milagro quería calmarnos, se puso entre nosotros y comenzó a decir algo a cerca de que somos compañeros y no sé qué.

—¿Quién determinó eso? ¿Tú? —Lian dio un paso al frente.

Robin dio una mirada de reojo a nuestro amiga pelirroja y volvió a ver a la nada.

—Chicos... —susurró Milagro asustada de que algo se desatara.

—Vamos, amigo, no hay porqué llevarnos mal —Bart se puso al costado de Robin y le dio unas palmaditas en el hombro, mientras sonreía e intentaba ignorar la mirada fría que le daba el chico del antifaz.

—No somos...

Pero si voz se esfumó cuando su mirada chocó con la de alguien que estaba detrás de mí. Volteé interesado y me sorprendí de ver a Mary mirándolo suplicante.

¿Por qué? ¿Por qué quieres que él venga con nosotros?

—Bien —resopló de malhumorado.

¿Así de fácil? Miré a Mary nuevamente, ella le sonreía complacida.

Tanto Bart como Milagro festejaron diciendo el primero algo como "todo el equipo unido es mejor". De cierta manera me entraba curiosidad, quería saber qué veía Mary en Robin como para regalarle una sonrisa o su atención. Pero Lian no parecía muy convencida.

(...)

Y aquí estábamos, en una pizzería, esperando lo que pedimos. Desde que Robin, ahora Damian Wayne, se había quitado el traje, Bart no paraba de preguntarle cosas como "¿Es cierto que hay un satélite con el apellido de tu familia?" o "¿Crees que sea bueno el desarrollar un laboratorio en el futuro con mí nombre?", a lo que Damian solo respondía con si o no.

Por mi lado no dejaba de analizarlo. Bien, tenía un punto, él tenía dinero y yo no, pero yo podía desarrollar mucho dinero si lo quisiera, solo que papá no me dejaría. No, esperen, a Mary no le interesa el dinero, su padre es rico.

Volteé a ver a Mary, ella observaba las calles con interés. ¿Qué veía entonces en Damian?

—¿Te gustan los videojuegos? —prosiguió Bart, quien estaba sentado frente a mí.

Miré de reojo a Damian, él estaba a mí izquierda.

—Prefiero los deportes, pero si.

—¿Te gusta el fútbol? —y para sorpresa de los dos, yo había hablado.

—Si —soltó desconfiado. Sé que había notado que lo estaba investigando.

Noté que lo pasaba en altura casi por una cabeza, vaya que parecía un niño.

—Bien, yo juego en el equipo de la escuela, si quieres puedes tomar las pruebas.

—Lo pensaré.

—Genial —sonreí y él me miró con aún más desconfianza.

Pasamos el mediodía hablando y comiendo, por alguna razón había empezado a hablar con confianza con Damian, sentía que podíamos llegar a entendernos si nos conocíamos mejor. Pero él no parecía muy sociable que digamos así que tenía que poner de mis esfuerzos e intentar que hablara.

Una vez que pasó el tiempo, había entendido. Cuando vi la sonrisa emocionada y felíz de Mary lo supe. La razón por la que le había duplicado a Damian que fuese con nosotros, era la razón por la que ahora sonreía muy feliz.

No solo se había fortalecido el equipo, nosotros comenzamos a darnos cuenta de la persona que teníamos de líder. Una persona que había pasado como una sombra todo el tiempo desde que se unió al equipo.

Mary había logrado que lo notaramos.