¿QUIÉN DEMONIOS ERES TÚ?

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JingYi lo dijo, sospechaba de la joven ama.

"Él nos está ocultando algo"

- ¡Perro desgraciado! ¡Voy a romperte las piernas ahora mismo!

>> "Ellos se han estado viendo" Sizhui masticó un bizarro vinagre que no supo que existía.

Frente a ellos estaba las puertas de la recamara de ritos.

Y varios cultivadores a media transición se les opusieron, ciertamente las reglas Lan dictan que en estos casos se debe utilizar primero la negociación antes que la fuerza bruta.

- ¡QUIEN SE ATREVA A PONERSE FRENTE A MI TERMINARÁ COMO ESE CULTIVADOR MEDIOCRE DE LA ENTRADA!- Rugió el educado y valiente líder Jin mientras le terminaba de destrozar las bolas al segundo cultivador Wang que había intentado detenerlo.

Mientras Jin Ling no tenía una secta y castigos con que lidiar y Sizhui sí, Jin Rulan sacó varios talismanes de sus mangas y los encendió frente a las caras de los guardias que atónitos se desplomaron inmóviles en el suelo mientras eran drenados velozmente de su energía espiritual.

Era una lástima que Hada se hubiera quedado en la posada de Yiling con los Juniors para vigilarlos, de lo contrario, Jin Ling piensa que hubiera disfrutado destrozando y comiendo un poco de carne.

Las madronas que debían vigilar detrás de la cámara para atestiguar que el matrimonio se consumara adecuadamente se negaron a moverse aun cuando no tenían un cultivo significativo.

Y podrían jurar que un niño tan encantador y bonito con un simpático lazo rojo no se atrevería a atacar a dos venerables ancianas.

- ¡VAYANSE TODOS AL INFIERNO!- Gritó a todo pulmón y azotando con el lazo divino de un lado a otro para levantarlas en peso y arrojarlas como grandes sacos de patatas muchas casas más allá; Jin Ling, Hijo del noble Jin ZiXuan y la amorosa Jiang Janli, golpeó a dos ancianas de cabellos canos en el culo y las levantó con las fundas interiores a la vista de todos.

Pudieron jurar que si el lazo divino no brillara dorado sino púrpura...

Con la espalda recta, los brazos engarrotados y la mano diestra enrollando la cuerda dorada del lazo divino como si fuera un látigo de truenos... agitó la soga infundada con una corriente exagerada de su propio qi rojo-dorado contra los muros sellados hasta el amanecer, de la recamara de ritos.


- ¡ESTE TÍO NO VA A SER PROFANADO!


La puerta salió disparada en una lluvia de astillas.

Toda la pared delantera con ventanas y biombos desapareció con el poder imbuido en el lazo divino de Jin RuLan, quien sabe si esto de verdad era solo una cuerda ata ganado, lo importante es que Jin Ling estaba divirtiéndose como nunca, a pesar que la imagen que obtuvo pudo haberlo dejado ciego por los próximos cien años.

Sizhui era el mayor de los cuatro y tuvo que esconderse detrás de Jingyi para no tener que enfrentarse a su Xian Gege fornicando a cuatro patas.

Si no hubiera gritado como una niña, tal vez se habría dado cuenta que, Sí, Wei WuXian estaba desnudo, Sí, había una mujer con los pechos al aire montada encima de él, pero NO.

Ninguno de los dos estaba sudando ni gimiendo desaforadamente como si estuvieran perforando el cielo.

De Igual forma fue una experiencia traumatizante verlo suspirando con los ojos cerrados y disfrutando de los besos traviesos que su mujer le estaba pintando por todo el cuerpo.

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