Capítulo 17

4.8K 533 59
                                    

El trabajo de arte.

Maya.


Odio esto, odio no tener inspiración cuando se supone que debería y tenerla cuando no puedo representarla o anotar la idea para luego no perderla.

Y eso es lo que me está pasando, debo entregar un trabajo libre en dos días, y no he hecho nada hasta ahora porque no he tenido tiempo o he estado demasiado distraída.

El tema de "pintura libre" se trata sobre hacer simples líneas o manchas y luego conectarlas de alguna manera de modo que formen objetos, personas, paisajes, animales o en sí algo que pueda ser considerado arte según mi profesor, aunque es algo contradictorio desde cierto punto teniendo en cuenta que la mayoría de las veces se lo pasa diciendo que el arte no tiene ni forma ni colores.

¿Entonces por qué me obliga a hacer esto? A mí me estresa bastante no tener las cosas planeadas y en cuanto a mis pinturas necesito hacer un boceto del boceto, el boceto que sale del otro boceto y luego el resultado final.

Si, soy muy autoexigente, lo sé.

-¡Mayaa...!- escucho la voz de Jett llamandome desde el baño.

Me levanto del piso de su dormitorio frente a donde se encuentra apoyado el lienzo, ya que no tengo otro lugar para dejarlo y me dirijo hasta el lugar en cuestión.

Cuando entro al baño lo encuentro vestido de cintura para abajo, pero sin remera, con su cabello mojado cayendo sobre su frente y sentado sobre el váter con sus manos sosteniendo una toalla blanca arrugada sobre sus piernas.

-¿Qué pasa?

-No quería molestarte porque estas ocupada pero... estoy un poco mareado...

-¿Un poco?- trato de bromear.

Esto es parte del proceso y no es la primera vez que ocurre.

-Un poco bastante- termina admitiendo.

Me lo imaginé , para que esté sentado ahí sin moverse no debe ser para menos, ya que aún sintiéndose mal ahora se encuentra en la etapa en la que está volviendo a ser el mismo de a poco y que intenta hacer el mayor número de cosas por cuenta propia.

Noto que su cabello se encuentra tan mojado todavía que las gotas de agua caen mojando su cuerpo que ya comenzaba a secarse.

Le quito la toalla de las manos, y la tomó en las mías , él parece bastante confundido por el gesto pero no le doy mucha importancia cuando la subo hasta su cabeza y la apoyo ahí.

Dándose cuenta de lo que intento hacer toma mi muñeca y me detiene.

-No Maya, luego lo hago yo...

-Déjame hacerlo por ti está vez, ¿Si?

Nos quedamos mirando un momento como si estuviéramos compitiendo a través de nuestras miradas hasta que él asiente y aleja sus manos de mis muñecas, ahora colocándolas en mis caderas mientras yo con cuidado comienzo a secarle el cabello.

Extrañaba sus toques, demasiado. Y si bien aún no son tan seguidos como antes me siento completamente feliz con lo que me ofrece.




Minutos más tarde se encuentra casi seco por completo y dejo la toalla colgada en el perchero de la pared mientras él se pasa los dedos por entre medio del cabello para peinarlo y que no se le vengan a la cara los mismos mechones de siempre.

Luego aprovechando que se encuentra menos mareado lo acompaño hasta el cuarto.

Me vuelvo a sentar frente a mi futura "obra de arte" -nótese el sarcasmo- y en cuanto el también posiciona su mirada sobre ella una mueca algo incomprensible se forma en su rostro.

Mi Dosis De Inspiración ✓Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ