FANFIC ILEMMA [EDITANDO]

EL BOSS ESTÁ ENFERMO

- ¿Esta enfermito? ¿Pero esta bien? Yo no quiero que nada malo le pase ¿Y si se va con Vlad?

-Tranquila pequeño saltamontes, el no se ira con Vlad y si ya verás que estará muy bien una vez su princesa mágica le haga compañía. ¿Recuerdas cuanto tu te enfermas por estar mucho tiempo afuera sin un abrigo? -La pequeña rubia asiente-Pues tu papi pasa por un momento similar, lo único que quiere es que te acuestes a su lado, le cantes canciones, le cuentes cosas y duermas un rato con él.

-Esta bien mami-antes de que la pelinegra pueda decir algo más, la rubia ya está corriendo y trepándose sobre la cama- ¡Papi! Ya llegué, hoy seré yo quien te cuide. Veras que te curaras muy rápido.

Riéndose un poco, la pelinegra se va a acostar con ellos mientras acaricia su vientre, teniendo uno de esos momentos en familia que aprecia tanto. Ve la hora y siente que ya es momento de levantarse por lo que los deja juntos y va a la cocina a hacer el desayuno para los tres. A Amelie le hace frutas picadas con un poquito de miel, un batido con proteína con sabor a chocolate y un poquito de huevos revueltos. Para ella y su bebe un tazón de avena con trocitos de fruta mas un batido con proteínas y vitaminas necesarias para el correcto desarrollo de su embarazo. Al ruso le hace un caldo de pollo con uno que otro hueso y en caso de comer algo solido prepara gelatina, unas tostadas y un poco de mango picado.

En el proceso de cocinar se encuentra con su hermana quien no para de hacer preguntas, para rematar aparece su suegra poniendo el ambiente un poquito mas pesado. Por último, aparece la perra de minina quien le esta colmando la paciencia con sus malditos comentarios sarcásticos, pero todo se va por el desagüe cuando la perra trata de tomar SU comida para ella y la de su hija llevarla al BOSS.

De un momento a otro se hace un horrible silencio en la cocina cuando la ninfa menor toma una sartén previamente usada y abofetea con ella a la sumisa Alpha quien grita por el golpe inesperado y claramente el quemón que le genera.

-Que te quede claro, aquí la señora soy yo. Tu eres una maldita prostituta y no estas a mi nivel ni mucho menos eres superior a mí. Si quiero enviarte a hacerle compañía a Agatha y los lazavera lo hago, porque es algo que mi posición me permite-Cuando esta trata de hablar, le hace una seña a los kryshas que están en la cocina, los cuales la sostienen a la espera de una nueva orden-Sácala de aquí, a partir de este momento no debe aparecer donde yo me encuentro. Tu entrada a los lugares donde estoy queda prohibida por lo que si estoy en el palacete no entras a la casa, si estoy en la fortaleza no entras a la casa, si voy a un bar a un club en el que estés sales y te vas porque no te quiero en mi presencia, la próxima vez que te encuentre o trates desafiarme no tendré problema alguno en enseñarte la diferencia entre tu posición y la mía. ¡Ahora largo!

-Usted no puede...ella...no...puede

-Tarde querida, ya lo hice-Los kryshas se la llevan y en poco tiempo la nueva orden es enviada a todos los demás. Ignorando al resto de personas en la cocina la pelinegra acomoda la comida en los platos previamente preparados y los lleva al segundo piso, los pone en uno de esos carritos y lo lleva hasta su habitación. Una vez dentro observa como ambos duermen abrazados uno a otro, el ambiente es cómodo y causa muchísima ternura ala posición, por lo que toma una foto.

-Espero no muestres eso a nadie más ved'ma

-Desde que te despiertas tan rápido y ya hablas tan de seguido es porque te has mejorado un poco-Sonríe mientras se acerca-déjame ver-toma el termómetro, mide su temperatura y nota que efectivamente ya bajo, aunque aún hay un poco de calentura.

- ¿Dónde estabas? -Pregunta en tono serio, agarrando su brazo una vez ella se inclina para darle un beso en la frente

-Haciendo el desayuno celoso-Se retira de su agarre y trae el carrito cerca, pone algunos platos sobre la mesa de noche y decide darle la comida, el ruso ataca la orden silenciosa sin queja alguna. A cambio el le da la comida a ella, es una costumbre que inconscientemente fueron adoptando. Una vez acabado de comer la pelinegra se acomoda entre las piernas del ruso (quien ya se puso un pantalón) y se recuesta en su pecho, ambos acarician el vientre donde su otro bebe se esta formando. Voltea la cabeza ligeramente y conecta miradas con el ruso, así se mantienen observándose durante un largo tiempo.

-Cuéntame un secreto ved'ma-La pequeña ninfa le sonríe y sin dejar de verlo a los ojos le contesta.

-Te amo y soy muy feliz con la vida que tengo ahora. Gracias-Retira la mirada y ve fijamente al frente, obtiene una risa ronca y un beso sobre la coronilla, sonríe feliz. Realmente es bendecida.

FIN