Cap. 25

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Desperté un poco antes de la hora del desayuno descubriendo que Colin no estaba en la habitación.

–Ha ido a hacer algo con urgencia, regresará en poco tiempo –Explicó una sirvienta con su vacía voz robótica.

Nunca me terminaron de gustar las muñecas de sangre... sonaban muertas...

Pero bueno, aguanté solo y dejé que ella fuera la que me diere de desayunar cuando fue la hora.

Colin vendría cuando pudiera.

No echaba de menos estar en un hospital... y la maldita maquina no se callaba.

Estaba deseando estar lo suficientemente bien para poder regresar a casa ya y no escuchar precisamente esa máquina.

–Hola –Saludó Haruo peinado con dos coletas con lazos entrando en la habitación.

Y, para mi sorpresa, entró con Colin... y un montón de flores.

Cuando me quise dar cuenta toda la habitación tenía flores de todo tipo por todos lados.

La única flor que no estaba era la rosa, por motivos obvios dada la especie de Colin.

–Te gusta? –Preguntó Colin ayudando a Haruo a subirse a la cama con unas peonías en la mano.

–Claro que me gusta, gracias –Agradecí sin poder quitarme la sonrisa de la cara.

–Mira, me ha caído el diente cuando me cepillaba los dientes después de desayunar! Va a venir el Ratoncito Pérez! –Comentó Haruo con ilusión dejando las peonías en mi mesilla.

Al final , teniendo todo esto a mi alrededor era imposible que me arrepintiera de haber preferido morir a que le hicieran algo a Haruo.

Con lo feliz que estaba prácticamente se me había olvidado el dolor.

*. *. *. *.

A Lance al final le hizo ilusión que llenara su habitación de flores.

Estaría aquí casi un mes, así que lo mejor es que estuviera lo más feliz posible.

Eso también ayudaría a que se recuperara más rápido.

–Lance Bonnet! –Saltó una voz femenina entrando de golpe en la habitación.

Haruo se teletransportó de golpe por el miedo literalmente a mis brazos y una mujer de pelo liso dorado algo rojizo, igual que el de Lance, fue la que entró seguida de un hombre de pelo castaño muy oscuro algo alborotado y de ojos grises.

–Hola mamá –Saludó Lance sin parecerle ni extraña la entrada de la mujer.

Esa mujer era su madre!?

–Como que "hola"!? Sabes que susto nos has dado!? –Medio le gritó notándose lo histérica que estaba– Y menos mal que ha llamado el hospital! Sino como nos íbamos a enterar de que nuestro hijo casi muere!?

Su pelo era muy largo pasando de sus rodillas y su cuerpo mostraba algunas manchas grandes color rojizo, pero no por un problema de salud, eran las manchas características de una sirena con ese patrón de colores en su forma natural. Y , desde luego, se notaba perfectamente que era una sirena, Lance sacó su belleza de esa mujer.

Quitando las manchas la mayor diferencia que tenía con su madre eran los ojos, ella los tenia azules muy claros y Lance los tenía grises... igual de grises que su padre.

–Tienes que dejar de hacernos esto! No te llegó con la guerra!? Necesitas dejarnos constantemente con miedo a preparar tu funeral!? –Siguió su madre mientras su padre nos miraba a Haruo y a mi.

Solo Tu, Nadie Más (Yaoi/BL)Where stories live. Discover now