Mi lado oscuro | Brangie G¡P (Adaptación) [Terminada]

Capítulo 21

Pov Brisa

-No entiendo como puedes seguir tan molesta por esa estupidez Angie.- Dije hablando lo más calmada posible, pero pongámonos a pensar ¿Cuándo he sido una persona calmada? Voltee a la ventana. Ella no dijo nada.

-Angie, contesta. Sabes que detesto cuando no lo haces.- Angie siguió con la vista al frente y la mandíbula apretada mientras manejaba. -Angie, uno.- Nada. -Angie, dos.-

-¡BASTA BRISA NO ERES MI MADRE!- Gritó mientras le pegaba con una mano al volante, gritó tan fuerte que di un pequeño saltito.

-¡Jamás te he dicho que lo soy!- Hablé igual de golpeado que ella, ella suspiró, sabía que si nos alterábamos no llegaríamos a absolutamente nada.

-Déjame aquí.- Dije, a 5 cuadras antes de mi casa.

-¿Qué?- Volteó a verme confundida.

-Déjame aquí.- Hablé ya en un tono de voz demasiado calmado. -Si me dejas aquí, aún puedes dar vuelta y meterte por esta calle, así no te desvías.- Dije mientras miraba a la ventana. Ella se estacionó.

-¿Como crees? No me importa llevarte a tu casa y lo sabes Brisa.- Me seguía mirando confundida. -Es más, quedamos que comeríamos en tu casa después ¿...O... O ya... Ya no quieres?- Preguntó un poco insegura a la respuesta.

-Quiero descansar un poco.- Dije viendo aún por la ventana.

-Bien, podemos estar en tu cuarto, mientras tú duermes encima de mi, yo veo tele y así pasamos el resto de la tarde ju...-

-Angie, quiero hacerlo sola.- Voltee a verla, su mirada cayó y asintió. Tomó mi mano, con miedo a que la fuera a rechazar.

-Escucha, lo lamento ¿Si? No debí gritarte, solo que estaba enfadada.- Negué con la cabeza.

-Angie. Te llamaré mañana ¿Si? Mañana hablaremos sobre lo demás, estoy cansada, quiero dormir.- Angie asintió. Soltó mi mano y se acomodó en su asiento, se veía triste. Iba a bajar del auto pero ella tomó mi brazo.

-¡No! Espera, te dejo enfrente de tu casa.- Dijo mientras encendía el auto, su mirada al frente todo el tiempo. Fueron las 5 cuadras más largas de mi vida, claro que no tenía sueño, pero Angie no tenía por qué gritarme así, claro, yo tampoco debí haberme burlado de ella por que sé que es demasiado molesto para ella las cosas con Micaela. Llegamos.

-Adiós Bri.-

-Adiós. Angie.- Angie siguió con la mirada al frente y vi como con la parte de su mano se tallaba un ojo ¿Estaba llorando? ¿Ella se sintió muy reemplazada en estos momentos? ¿Era ella tan infantil? ¿No era la chica mala?

-Anshu.- Comencé. -¿Estás...- Fui interrumpida.

-Que descanses Bri.- Volteó a verme, tenía la cara roja, sonrió tímidamente, agachó la cabeza por unos segundos y después volteó al frente. Sabía que ya no tenía nada más que decir, yo había arruinado nuestra tarde. Digo, yo desde un principio fui grosera. Salí del auto y en el momento en que cerré la puerta éste arrancó a una velocidad un poco rápida pero considerable, por lo general ella esperaba a que entrara a mi casa, cuando no salía del auto. Si lo hacia me llevaba hasta la puerta. Creo que ahora si hice mal.

Pov Angie

Enserio, juro que no quería llorar, pero Brisa causa algo en mi, a veces me enoja...

-Basta, ella tuvo la culpa no tuvo por que burlarse.- Dijo Martina, llevaba una hora platicando con ella y Marianela sobre eso y yo no dejaba de pensar en que había exagerado y era mi culpa, pero la verdad no era la primera vez que se burlaba de mi con Barbara, digo, yo defendía a mi novia en vez de burlarme de ella, si, definitivamente era su culpa.

-Si, a lo mejor y se le pasa el coraje y te habla al rato para que hablen, tranquila.- Fue el turno de Marianela de hablar. Asentí.

-Chicas, corrí demasiado. Enserio quiero dormir.-

-Déjame adivinar, ¿Te castigaron, después a Micaela y corrieron como nunca?- Asentí.

-Si, no se como soy la capitana del equipo, si me la vivo castigada.- Dije mientras me ponía una camisa con el estampado de The 1975 y unos pantalones de pijama.

-Te dejaremos dormir, yo saldré con una chica nueva que acabo de conocer.- Dijo Marianela.

-Si, y yo tengo que ir al cuarto de Lu, dice que es una emergencia.- Asentí mientras destendía mi cama.

-Bien niñas. Pásenla bien, ambas.- Dije y me acosté.

-Adiós An.- Dijo Martina agitando la mano como despedida al igual que Marianela.

-Adiós niñas.- Recordé que mi teléfono no tenía batería, así que lo puse a cargar. Cuando prendió vi que no tenía ni mensajes ni llamadas de Brisa así que volví a acostarme. Quedé en un profundo sueño.