-Nunca te pedí que vinieras, llegaste porque se te dio la gana. No te necesito Sam y hace mucho deje en claro que familia ya no somos, así que recoge tus argumentos y creencias de mierda y lárgate, no eres bienvenida en mi vida-La voz de la menor sale fría, muy diferente a la actitud que en otra ocasión seguro tendría-Además, si tanto les importara no andarían promulgando al mundo que estoy muerta o que la única hermana que tienes es Rachel, lárgate y déjame en paz.

-Emma...-Trata la teniente

-NO, la quiero fuera de aquí, así como los quiero a ustedes. No los necesito aquí viniendo a profesar una hipocresía que no creo y tampoco me interesa experimentar, armen su circo en otro lado.

-Emma, soy luisa. Te conozco de pequeña, no debes estar nerviosa o asustada. Nosotros no te haremos daño, vinimos a ayudarte.

-Se quien eres y no estoy asustada, deja de psicoanalizarme y tratarme como si fuera una víctima o una maldita retrasada, porque no lo soy. No te quiero ni te necesito aquí, los quiero a todos lejos de mi presencia

-Luisa por favor...-La nombrada asiente ante lo que trata de decir la teniente y toma del brazo a Sam sacándola de ahí, lo que Emma menos necesita es alterarse más y sobre todo en ese estado.

- ¡Emma James ya basta! Entiendo tu molestia, pero así no te criamos y esa no es la forma de hablar, menos ahora que estamos tratando de ayudarte a salir de esto. Mira se que he fallado mucho como padre, que no he estado ahí para ti cuando mas me necesitabas, pero lo estoy ahora. Vine a decirte que estoy aquí, que estarás bien y si quieres quedarte con ese bebe pues así será, encontraremos la manera cariño. Por favor déjame ayudarte...

-El problema es que yo ya no te necesito

-Emma por favor, cariño se que me equivoque. Pero estoy aquí dispuesto a implorar tu perdón para poder llevarte a casa.

-Reitero no te necesito, no quiero tu ayuda y por si no lo sabes déjame te aclaro, mi nombre no es Emma James es Emma Romanova, esposa de Ilenko Romanov el BOSS de la mafia rusa. Te aseguro que lo que me hicieron hoy lo pagaran caro.

-Emma...

-Largo, quiero que se larguen de una puta vez y me dejen en paz. Ya no los necesito, cuando lo hice nunca estuvieron para mí, cuando grite por ayuda, cuando derrame lagrimas buscando su atención una y otra vez me dejaban de lado porque no era igual de lista o importante como Sam o Rachel, porque no era su motivo de orgullo, no podían presumirme. Así que me cansé de eso y me fui, en el proceso encontrar una familia que de verdad lo vale, que es fiel, leal e incondicional a mí, que no me juzga y que no me hace menos.

-Emma, cariño perdón nosotros no...

-No hay nada que perdonar porque sencillamente ya no me importa, ni me interesa lo que puedan pensar o sentir. Ahora por una ultima vez te pido te largues de mi celda-No insistiendo más, porque sabían que eso era todo lo que conseguirían de su parte ambos decidieron irse, con lo mencionado por la pelinegra dándole vueltas en la cabeza. Ambos seguían pensando que era una idea absurda lo de estar casada con el boss de la mafia rusa, por lo tanto, no le dieron real relevancia. Al salir la pelinegra mayor se refugió en los brazos del coronel.

-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------

Después de la acalorada charla con "su familia", la pelinegra se sentía mucho mas acalorada, el dolor en su vientre se incremento un poco. Se preguntaba en que puto momento ilenko aparecería. Trato de levantarse, pero sus piernas no le daban, tomo un poco de esa voluntad que la caracterizaba y estando sujeta a las barandas de la celda lo sintió, un liquido tibio y algo pegajoso bajando por sus piernas. Estaba a punto de dar a luz.

- ¡Oigan, oigan! ¡daré a luz! ¡Que alguien me ayude! -Grito con desesperación, pero los soldados alrededor la ignoraban. Paso cerca de 15 minutos sufriendo de contracciones fuertes y grito pidiendo ayuda, no quería que su bebe naciera ahí en una sucia y asquerosa celda sin una manta digna de cubrirla.

Cuando ya se estaba dando por vencida y se apoyaba en la parde pensando entre el dolor como posicionarse para dar a luz, escucho a las rejas chocando con gran estrepito. Antes de sentir un cuerpo fuerte tomándola en brazos, se dio cuenta que lentamente perdía el conocimiento. Sus ojos estaban desenfocados todo se veía borroso, pero sintió vagamente que entraban a lo que parecía un ascensor y bajaban, antes de ser entregada a otros brazos, unos que si reconocía y un aroma que se le hacia tan reconfortante.

-Listo, ahí tienes lo tuyo imbécil-Habla el coronel al ruso

-Nos volveremos a encontrar basura-fue todo lo que respondió el ruso, antes de partir con su mujer. Estaba en labor de parto, necesitaba toda la ayuda necesaria para que nada saliera mal. Aquellos que le hicieron daño a su mujer lo pagarían caro, el guarda que la ataco con tal saña ya estaba gritando por clemencia en manos de Vladimir. 

 

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
FANFIC ILEMMA [EDITANDO]Where stories live. Discover now