Reencuentros.

Capítulo 18: No es sano.

Febrero, 2019.

Alex.

Por alguna razón, que no me pienso cuestionar, Liam lleva como dos minutos jugueteando con mi mano distraídamente.

Lo miro sonreír ante algo que dice Josh. Últimamente, con esta rara rutina que hemos adaptado entre los cuatro, ha vuelto a hacerlo con más frecuencia y de manera real.

Mueve mis dedos entre los suyos, antes de tomarlos y entrelazarlos.

No voy a negar que eso me emociona.

Adam me hizo daño, pero... Quizá no estaría mal intentarlo con alguien que sí valga la pena.

Y vaya que Liam la vale.

Sacudo mi cabeza para salir de mis pensamientos cursis, debo preguntar ya lo que necesito saber, ya que tengo que irme a los vestidores para poder avanzarle a mi tarea y en casa dedicarme de lleno a la colección.

Ya tengo la mitad lista. Aunque cada vez mi acidez estomacal es más fuerte, mi espalda me suplica un descanso, y sigo sin tener mi periodo.

Liam parece darse cuenta de lo que estaba haciendo, porque se detiene en seco. Hago como que no noto la mirada vergüenza que me dirige, estando hasta un poco sonrojado, antes de que deje mi mano con suavidad.

Es tan lindo.

—Chloe y Josh ¿Llevarán a alguien al desfile?

Les pregunto a ambos porque Josh acepto ser mi último modelo. Estamos esperando a que termine la orden de Jacob, es el único cliente en el momento y siempre lo atiende ella, por lo que Liam y yo nos relajamos de lo lindo.

—Mis padres definitivamente no... Cuando termine esta orden le marco a una persona y te aviso, Alex.— responde Josh.

—¿Una novia?— pregunto.

Josh resulto ser una persona de lo más linda y amable... Cuando no está peleando con Chloe, claro está.

No dire que ya somos amigos, pues solo lleva un tiempo aquí, pero tampoco nos falta tanto.

—Algo así.—aclara sonriente.

—La compadezco totalmente.—se burla Chloe.

—Oh, rubia, no finjas. Sabemos bien que desearías ser tú.

—Me parece que te proyectas, rubio.

Me apresuro a interferir para no perder más tiempo con una nueva pelea.

—De acuerdo, Josh. ¿Tu Chloe?

Niega con una mueca.

—Aarón no estará ese fin de semana, es decir que no invitaré a nadie.

—¿Qué hay del chico que siempre te viene a ver?—cuestiona Liam y Josh nos mira de reojo sin dejar de cocinar.

—Eres un metiche, nuevo. No puede ir.

Apuesto a que ni siquiera le dijo que podría ir, pero honestamente, yo tampoco lo haría.

—Toma rubia, la orden está lista. No la tires esta vez por favor.— lo menciona porque hace unos días se le cayó una de las hamburguesas y él la tuvo que volver a hacer.

 Como siempre, Jacob pidió mucho, así que ayudo a Chloe con algunas cosas.

La respuesta de Chloe es mostrarle el dedo de en medio. Comienzo a creer que en realidad les gusta pelearse entre ellos, especialmente teniendo en cuenta que cuando ella se da la vuelta, Josh sonríe ampliamente.

La sigo hasta la mesa donde se encuentra una de las personas más detestables que he conocido en la vida. Sé que tampoco la he tenido fácil, pero no es justificación.