¡La vida no es una novela romántica, Kim!

12|Una segunda oportunidad.

Había conseguido apartar mis ojos de los suyos, y en medio de mi confusión por los nervios no pude hacer más que bajar las escaleras a paso rápido como si nada hubiese pasado.

En el momento que pise la primera planta sentí aún más fuerte la mirada pesada de Mina sobre mi, sumado al interrogante de Kai del que no había pasado desapercibido la tensión que había florecido en la habitación desde que la presencia de Mina y la mía se encontraron.

—Entonces... ¿Todo bien? —Pregunto Kai con cautela mientras intercalaba su vista entre Mina y yo.

—Eh si, no te preocupes ya lo encontré—Había planeado no abrir la boca y salir lo más rápido de aquí ya que no quería dejar en descubierto mi nerviosismo al tenerla cerca (y en especial para conservar mi orgullo) pero vamos ¡no podía ser descortés y no responderle! para mi mala suerte, cuando hable se pudo notar la desconfianza  en mi voz, que espero que ninguno haya notado.

—Entonces nos vemos mañana, supongo—Respondió Kai y yo asentí, me apresure hacia la salida. Cuando tome el pomo de la puerta sentí alivio de poder escapar con éxito de Mina y de mis sentimientos por ella, no tendría que pasar por este momento incomodo.

Claro que todo se fue a la basura cuando ella habló.

—¿Sabias que es una falta de respeto no saludar a quienes conoces, Taehyung? —Pregunto irónica detrás mío.

Apreté mi mandíbula conteniéndome a decir una estupidez.

—Honestamente Mina, no pensé que te importaría si lo hacia o no—Me di la vuelta para encararla y la encontré con la sorpresa esparcida en su rostro—Creo que ya lo habías dejado bastante claro—Encogí mis hombros.

Y ahí se fue tu dignidad.

¡Tu no te cansas de aparecer cuando menos te necesito!

No.

—No pensé que fueras tan rencoroso Kim—Se cruzó de brazos dando a entender que no se dejaría intimidar tan fácil por mi, y encontré bastante gracioso como nuestra diferencia de altura la hacia ver jodidamente tierna aunque quisiera parecer lo contrario.

Pero ese no es el tema.

—Okey... ¿Contexto? —Una tercera voz se unió y recordé que Kai seguía ahí, viéndonos aun mas confundido que antes—...Un segundo ¿tu vas a mi Instituto, no? —Me señalo a mi y yo asentí lentamente—Ah claro, supongo que ustedes deben ir en el mismo curso, pero nunca pensé que dos personas tan distintas se conocerían... Y que parecieran odiarse—Lo último lo dijo en un susurro.

Pues el que siente odio aquí no soy yo.

—En realidad eso—Mina se acerco a Kai y en un movimiento rápido le pellizco la nariz—No es asunto tuyo, mocoso.

—¡Noona! Sabe que no me gusta que haga eso— Kai se alejo de Mina cubriendo su nariz mientras ella reía solo como ella sabía.

Se una forma tan delicada que parecía más bien una melodía...

¡Ya reacciona, imbécil!

Ah lo siento, caigo fácil.

Entre ellos se había firmado una discusión amistosa que no quería interrumpir, así que sin más que agregar tome la manilla de la puerta y con la mayor cautela salí de ahí.

Al estar afuera por fin pude relajarme un poco y volver a respirar con normalidad, muy bien ¡Había logrado escapar de el encuentro conveniente entre ambos con éxito! Decidí de inmediato alejarme del local pues no quiero sorpresas, mucho menos hablar con ella hoy.