Sign in Buddha's Palm [ 1 ]

Capítulo 31: Muerte

"Pequeño Monje".

"¿Puedo hacerte una pregunta?"

Después de un rato y la Princesa se calmó un poco, preguntó de repente.

"Adelante."  Su Qin solo respondió casualmente.

"¿Crees que el Imperio Tang se puede salvar?"

La princesa miró a su alrededor para asegurarse de que no hubiera nadie alrededor y luego bajó la voz.

"¿Se puede salvar el Imperio Tang?"  Su Qin miró a la princesa.

Su Qin no esperaba que la princesa hiciera esta pregunta.

Si la princesa preguntó si se puede salvar al emperador Tang, entonces Su Qin puede entenderlo, pero ¿la princesa realmente preguntó sobre el Imperio Tang?

"Depende de la muerte del emperador Tang".

Su Qin lo pensó por un momento y dijo: "Si el emperador Tang aclama a un príncipe heredero y exilia al otro príncipe antes de su muerte, el Imperio Tang podría continuar durante cientos de años".

El tono de Su Qin fue plano.  Como si el tema de exiliar y matar a un príncipe literal fuera lo mismo que comer un plato de arroz al mediodía.

Si otras personas escuchan a Su Qin decir tales cosas, incluso el abad palidecerá de miedo.

Incluso un Gran Gran Maestro de Grado 1 ordinario no se atreve a comentar sobre los príncipes de esta manera.

Competir con ellos, la Princesa realmente pensó en ello con bastante seriedad.  Ella negó con la cabeza y dijo: "Imposible, hay ministros y reyes que respaldan a mis Hermanos Imperiales (los príncipes)".

"Una vez que un príncipe recibe la sentencia de muerte, inevitablemente causará el levantamiento del rey y la confusión de la corte".

"¡Entonces limpia la cancha con él!"  Su Qin dijo lentamente.

La expresión de la princesa cambió ligeramente.

Un rey es independiente y el Imperio no puede controlarlo por completo.  Por lo tanto, si realmente pudieran matar a un rey, definitivamente sería de gran beneficio para el gobierno general del Imperio Tang.

"Pequeño Monk, tu opinión sobre esto es bastante clara".

La pequeña princesa le dio a Su Qin una mirada profunda.

Un mes despues.

El grupo de la emperatriz Li se despidió del abad Hui Wen.

Cuando el abad Hui Wen recibió la noticia de su partida, envió a la emperatriz Li fuera del templo Shaolin junto con los jefes de la corte lo antes posible.

"La emperatriz Li regresará en este momento ... ¿Hay algo mal en el Palacio?"  El Jefe de la Corte de Arhat frunció el ceño y dijo mientras miraba el carruaje que desaparecía.

"Este monje escuchó algunas noticias, acerca de que el Eunuco Zhao parecía haber usado algún medio para prolongar la vida del Emperador por varios años más".

Susurró el Jefe del Tribunal Disciplinario.

Cuando el Jefe de la Corte de Arhat escuchó esto, no pudo evitar exclamar: “El eunuco Zhao es realmente un hombre de talento y competencia.  Sin mencionar que ha alcanzado el grado 1 máximo. ¡Es realmente respetable! "

"Está bien, no hay necesidad de discutir asuntos externos".  El abad Hui Wen miró a los jefes de la corte y dijo solemnemente.

Con la partida del grupo de la emperatriz Li, el Templo Shaolin, una vez más, ha regresado a su vida previamente tranquila.