AMOR VINCIT OMNIA

CAPÍTULO 5

-¿Pero hija, qué es lo que dices?
-Que no iré al colegio, me quedaré contigo, ya podré ir a otro colegio, uno que esté cerca de casa para poder seguir viéndolos.-dijo la pequeña en medio de la lluvia.
-¡No!-dijo la madre de Hermione con voz fuerte y contundente.
-¿Qué? ¿Qué quieres decir con que "no"?-dijo Hermione mirandola con sus ojos rojos de tanto llorar, su madre ya no podía distinguir cuales eran sus lágrimas y cuales eran las lágrimas de aquella lluvia.
-Quiere decir que no, que no dejarás ir una oportunidad tan brillante como esta solo porque tienes miedo.-le dijo su madre ahora con un poco de dulzura, pero también manteniendo su  postura.
-Pero el miedo es por ti y papá, es porque no los quiero dejar solos ni un segundo, solo es por eso mamá.
-Hija, yo sé que te da miedo dejarnos, lo entiendo, pero también entiendo que lo que realmente te da miedo es encontrarte sola, en un lugar que no conoces, más que por lo que nos informaron cuando fueron a casa y por las cosas que leíste en aquellos libros, y creeme mi amor, de verdad lo entiendo, pues apenas tienes 11 años, pero hija, piensa, esta es la mejor oportunidad que tendrás en toda tu vida... y es que mi niña, la aprovechas ahora, o no lo podrás hacer nunca, porque Herms, a veces las buenas oportunidades no se te presentan dos veces en la vida... comienza a tomar riesgos desde ahorita, para que en un futuro nada te detenga...
La pequeña se quedo pensando, en lo que su madre le había dicho y comenzó a llorar más y más, pero ahora su llanto no era de tristeza o de miedo, sino de alivio, de alegría, ya que su madre le había dicho las palabras perfectas, ahora lo único que quería era enfrentarse a ella misma para después poder superar todo lo demás.
Su madre notó que había podido lograr que entrará en razón y cuando ella se iba acercando para darle un gran abrazo, la niña fue la que tomo la iniciativa y se dirigió hacia ella. La abrazó con tanto entusiasmo porque gracias a ella habían comenzado a disiparse las dudas que tenía.
Después de ese momento tan mágico, en aquel lugar tan místico, por fin lograron comprar todas las cosas necesarias para el colegio, la niña pensó que todo aquello era tan especial, tan irreal, y por primera vez en ese día se sintió realmente feliz y extasiada por el viaje que emprendería hacia aquel colegio lleno de oportunidades y metas.
Después de secarse, las dos decidieron ir a la estación del tren para que Hermione fuera a su nuevo colegio, solo que un problema surgio, ya que a los padres de la pequeña les habían hablado de su trabajo y decidieron llevar a su hija más temprano de lo improvisto, cuando se cercioraron de que su hija estaba a salvo en aquel tren tan enigmático decidieron irse.
El padre de Hermione se había adelantado y su madre se quedó observándola un poco más y  solo cuando la vio sentada en aquel lugar por fin se dio cuenta de lo mucho que la extrañaría, de lo mucho que extrañaría ver su menudo cuerpecito sobre su cama devorando cualquier tipo de libro e incluso de lo mucho que extrañaría las pequeñas discusiones que tenían cuando la una a la otra a veces no se prestaban la atención requerida por estar al pendiente de alguna otra cosa...
Sí, sí que la extrañaría, ahora se da cuenta de lo mucho que la extrañara al verla sentada en aquel medio de transporte que la llevara a varias horas lejos de casa, pero sobre todo a un mundo completamente nuevo y tal vez mucho mejor que en el que vivía...
La madre comenzó a sentir terror porque tenía la ligera sospecha de que tal vez su hija comenzaría a amar a aquel mundo en el que ella, su madre no pertenecía... quiso sacarla del tren, llevarla a casa, ahora era ella la que tenía miedo, miedo que su hija ya no quisiera volver, pero la prudencia comenzó a llegar a su mente y comprendió que ese era el destino de su hija y a pesar de que le costo el mundo entero comprender que había gente con magia, con capacidades nunca antes vistas, con poderes e historias inimaginables, también pudo comprender que su hija era parte de ello y que tenía que dejarla ir... en el fondo de su ser sabía que sería lo mejor...