Sempiterno: que durará siempre, que habiendo tenido un principio, no tendrá fin.
Meira Bravo es lo conocido como una Kook, pero lo cierto es que ella no cree pertenecer a ese grupo, a ninguno en realidad. Sin si quiera buscarlo encontrará su lugar...
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"Algún lugar que sólo nosotros conocemos."
- Sarah.- Meira susurró mientras caminaba hacia su casa con ayuda de John B.- El botiquín esta en el baño de arriba.- la rubia asintió y se fue escaleras arriba a toda prisa.
- ¿Alguien sabe curar una herida de bala?- preguntó Pope haciendo que todos lo mirasen.- ¿Por qué me miráis así?
- Si alguien de aquí debería saber hacer algo así eres tu.- contesto Kiara nerviosa.
- Ya estoy aquí.- Sarah llego corriendo hacia ellos.
- ¡Solo desinféctala y cósela!- exclamó JJ.
- ¡Pero no se hacerlo!- dijo el moreno.
- Que lo haga quien sea, pero rápido.- Masculló Meira desde la silla.
- Joder, joder.- Pope abrió el botiquín y sacó algunos botes.- JJ, ve desinfectando la aguja.- le pasó el pequeño trozo metálico al rubio.- Esto va a doler.
Meira agarro la mano de cada una de sus amigas con fuerza cuando sintió el tacto de la gasa contra su herida.
- Ya está.- suspiró Pope mientras limpiaba alguna que otra gota de sudor que caía por su frente.
- Joder.- masculló Meira mirando la herida ya cosida.- Me va a quedar cicatriz.- se lamento.
- Deberías curártela y cambiarte la venda cada tres o cuatro horas.- le advirtió.
- Podéis quedaros a dormir si queréis.- les ofreció.
- Me encantaría, pero después de como me fui del baile si no llego a dormir no me dejaran salir en todo lo que queda de verano.- Pope asintió dándole la razón a Kiara.
- Si mi padre ve que no John B ni yo hemos dormido nos matará.- se lamento Sarah.
- Oh, no pasa nada, puedo apañármelas sola.
- Yo puedo quedarme.- hablo JJ haciendo que Meira se sorprendiera, busco con la mirada a su mejor amiga, quien solo levantó los hombros.
- Genial, si paso cualquier cosa avisadnos.- se despidió John B.
- Puedes quedarte en la habitación de invitados.
- No hace falta tranquila.- se rasco la nuca nerviosa.- Este sofá es más cómodo y grande que mi cama, aquí estaré bien.
- Puedes coger lo que quieras de la cocina.- dijo antes de irse escaleras arriba hacia su habitación.
(...)
-Meira.- susurró JJ entrando en la habitación de la chica.- Meira despierta.- le dio unos pequeños toquecitos.
