Amantes del crimen [KARMAGISA]

II

Por un momento el mundo a mi alrededor se detuvo de golpe, las manecillas del reloj colgando de la pared de aquella oficina dejaron de moverse, marcando las 9:25 de la mañana

Los sonidos de los constantes truenos amenazando la inminente lluvia cesaron

Mi rostro de seguro palideció, porque Hanazaki me miró con ojos de preocupación y mis piernas comenzaron a temblar, era un movimiento casi indescifrable pero que yo podía percibir

Por suerte me encontraba sentado en aquella silla frente al escritorio del director, sino puedo asegurar que mi cuerpo yacería en estos momentos en el frío suelo

Esto es agobiante, siempre he tenido el control total de mis emociones y mi cuerpo. Pero esta vez es inevitable sentir aquel escalofrío que me recorre desde mi cabeza hasta la punta de mis pies

Con la poca fuerza que tengo logro gesticular algunas palabras que salen de mis labios en un delgado hilo de voz

—¿Karma... asesinó a alguien?

El oficial Osamu asintió con esa expresión empática en su rostro que todo el tiempo a tenido

—Eso no es posible— negué rápidamente con la cabeza, mi voz era apenas audible

—Entiendo que puedas estar en un estado de shock por la impresión, pero no podemos darte más detalles por confidencialidad al caso— habló hacia a mi por primera vez aquella mujer rubia de la que había olvidado por completo su presencia

—¡ES MENTIRA!— Me levanté dando un fuerte golpe con ambas manos sobre el escritorio

—¡TODO LO QUE DICEN SON MENTIRAS! ¡KARMA NO SERÍA CAPAZ DE HACER ALGO ASÍ!—Gritando, señalaba a los oficiales que solo permanecían inertes

Todo mi nerviosismo y temor habían desaparecido y en un instante se transformaron en furia y desesperación. Me fue inevitable reaccionar así

Las manos me temblaban, trataba de controlarlas manteniendo la opresión en mis puños que de tanto apretar mis nudillos se volvieron blancos

Tenía que controlarme, sentía que en cualquier momento iba a desquitar mi ira golpeando aquellos policías, arrojando el escritorio por la ventana o con el mismo director

Intento respirar profundo pero cada vez siento más cerca mi sed de sangre surgir y tomar el control

—Tranquilízate Nagisa— pensé que era mi conciencia tratando de calmar mis horribles impulsos, pero la voz provenía del director Hanazaki, él se encontraba a mi lado tomando mi hombro

Ni siquiera me percate en que momento se levantó de su asiento y  llegó hasta mi, pero ese simple roce me hizo sentir más tranquilo

Me transmitió una sensación indescriptible, mejor dicho de nostalgia

Llegó a mi mente el momento dónde estaba apunto de asesinar a Koro-sensei pero con demasiadas emociones entremezcladas

Ira, desesperación, frustración, enojo, tristeza, todo logró resolverlo con un simple toque

Inhale aire profundo y volteé mi mirada hacía Hanazaki, él me sonrió y me indicó que tomara asiento de nuevo. No sé ni en que momento la silla terminó en el suelo

Al menos logró su cometido; tranquilizarme y que dejará de gritar

Desde que salgo con Karma mis emociones están al tope, pero lograba controlarlas o hasta el día de hoy era así

Pero sigo enojado, claro que estoy furioso de que acusen a Karma de algo tan vil como un asesinato

—¿Acaso tienen pruebas?— me dirigí hacia Osamu pero esta vez ambos compartíamos esa expresión fría y un semblante fruncido