Capítulo 10

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Para _______ las dos semanas habían pasado muy rápido, ocupada entre las pruebas de vestuario y maquillaje casi no había tenido tiempo para nada más, eso incluía pensar en que hace tres días Mina había renunciado al puesto de secretaria de Shoto para pasar al que le correspondería de ahora en adelante: La señora Kirishima.  

Si, Eijiro y Mina se iban a casar un mes después de que ella anunciara su compromiso con Shoto. Se sentía muy feliz por la castaña pero no podía evitar que un pequeño pinchazo de envidia pasara por ella cada vez que pensaba en que ese matrimonio sí sería para toda la vida, no como el suyo, que resultaría siendo un engaño, que ya llevaba un mes desde aquella noche en la que sellaron el trato.  

Sin querer pensar más en ello deseó que Ochako entrara por la puerta para hablarle de cualquier estupidez y así distraerla, pero su castaña amiga ya se había marchado hacía unas buenas horas, de modo que solo estaba _______ en el camerino, probándose su último vestuario: Un atrevido conjunto negro que se cubría con una especie de bata sin mangas de velo dorado.  

Se calzó las sandalias y salió del camerino, lo que no esperó es que ahí, sentado al lado del fotógrafo estuviera Shoto, charlando con él.  

- ¿Sho? - preguntó quedándose de pie en el sitio asignado para que todos observaran como le quedaba el traje.  

Él sonrió al verla y sus ojos parecieron dos luceros brillantes.  

- Hola - respondió con su característica calma - Se te ve precioso eso -.  

Ella le sonrió animada mientras contemplaba la bata.  

- Y eso que no has visto el principal, es deslumbrante, pero gracias - esperó a que el fotógrafo acomodara un poco la prenda y se mantuvo firme - ¿Se me hizo tarde? -.

Él dejó que le tomaran dos fotos antes de levantarse.  

- No, solo quise pasar a recogerte, mi madre quiere que le lleve un encargo a casa antes de irme a cenar contigo, así que pensé que era más práctico pasar por ti primero que devolverme después -.  

_______ se rió de su practicidad y lo orgulloso que se sentía de ella.  

- Pues has llegado en el momento justo, este es el último de los trajes, deja me cambio y nos vamos -.  

Él asintió con suavidad y se acercó a ella para besarle la mejilla.  

- Te esperaré entonces -.  

_______ le devolvió el gesto y sonrió.  - Vale, no me tardo, no mueras de aburrimiento -.  

Como una ráfaga se cambió por el vestido que llevaba ese día. No era algo muy formal, solo una prenda de lana rosa oscuro que se entallaba a su cintura con un bonito cinturón café, unos botines de tacón alto y medias del mismo tono que el cinturón.  Tomó su cartera junto a su abrigo  y observó al salir que Shoto se quedaba mirándola con una sonrisa.  

- Tenias frío esta mañana, ¿no?  - comentó con humor.  

_______ se rió suavemente.  

- Tú no te has quedado atrás al respecto, mi amigo - hizo mención a su suéter de lana blanco, los vaqueros negros y las botas nobuk del mismo color, que incluso podía pasar como zapatos de invierno.  

Hasta que llegaron al coche fue que ella se dio cuenta que Shoto también portaba una gabardina negra, lo que hizo que se burlara aún más de él.  

Cuando llegaron a casa de Rei Todoroki, ubicada a las afueras de Tokio, _______ observó que habían varios autos estacionados en el camino del garaje, frente a la casa.  

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