Capítulo 18

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Imaginense estar en la playa con los Sakamaki de vacaciones bajo una sombrilla disfrutando de la vista, con un cóctel de frutas en mano y gafas de sol.

Bueno, ese era Shu porque yo no podía tomarme ese cóctel de frutas y como sabía que lo que él quería hacer era darme envidia decidí ir a molestar a alguien más. No tenía muchas opciones, aunque todos sabían de mi existencia solo Laito, Ayato y Shu podían escucharme.

Antes de ir a molestar a Laito preferí ver que hacian los demás. Reiji estaba sentado en la orilla con unos binoculares al cuello y un chaleco salvavidas al costado, fuera a donde fuese tenía que cuidar a un grupo de irresponsables así que estaba prevenido. Subaru solo descansaba sobre un flotador con forma de dona, era lo bastante grande como para soportar el peso de su cuerpo así que no le sería difícil dormirse allí mismo. En cambio Yui se encontraba con Ayato, se estaban poniendo de acuerdo para pedirle permiso a Reiji de usar un bote de pedales.

-Uy, presiento que va a haber momento romántico.- susurré ya que Ayato podía oirme.

-¿Entonces tú le pides permiso para el bote?- preguntó Yui preocupada.

-Si yo se lo pido me va a decir que no porque pensará que estoy tramando algo... mejor ve tú.

Parecían dos niños pidiendole permiso a mamá para ir al parque a jugar a la pelota. No entendía cual es el miedo que le tenían a Reiji.

Al final decidieron por medio de un piedra, papel y tijeras. La pobre Yui tuvo que ser sacrificada, aunque despues de todo Reiji les dio permiso con la condición de que solo lo usaran una hora.

Como toda acosadora fui detrás de ellos. Estaba acostada sobre la parte trasera del bote como si fuera el equipaje, no me quejo, después de todo ando espiando una cita.

Ambos estuvieron bastante calladitos en la primera media hora, sabía que Yui estaba avergonzada y nerviosa por estar a solas con el Sakamaki pero tampoco decía ni pio para romper el hielo.

Por otro lado, Ayato andaba de caballero, le pidió a la rubia que no se esforzara en pedalear ya que él tenía la fuerza para hacerlo por los dos.

-Yui, tengo... un regalo para ti.- habló repentinamente Ayato.

-¿Un regalo?

-Amm... si...

Comenzó a buscar en sus bolsillos nervioso, al no encontrar nada se puso peor. Se mordió el labio inferior mientras se quejaba de haberlo perdido.

-Uh, lo siento tanto... creo que perdí lo que iba a regalarte.

¿Será un anillo? Pensé. Si hay algo tan pequeño como para perderse fácilmente en la playa debe ser alguna joya. Lo ayudaré a buscarlo más tarde, él tenía que darle ese anillo a Yui si o si.

Pasada la hora en la que debían usar el bote Reiji comenzó a gritarles desde la orilla. Me sorprendió como no se quedó sin voz luego de gritar de esa manera...

-Es hora de almorzar, entren todos.

Como corderitos todos entraron detras de Reiji, tenían hambre luego de estar en la playa tanto tiempo. Se sentaron a la mesa luego de que la comida estuviera lista, como desgraciadamente yo no podía probar bocado me la pasé molestando a Shu mientras los demás reían.

Repentinamente el timbre de la casa sonó, todos estaban extrañados ya que no debía haber nadie por esa zona.

-¿Será algún humano?- se preguntó Kanato.

-Ayato por favor ve a abrir.

-¿Y yo porqué?- al ver que Reiji lo fulminaba con la vista solo tragó saliva.- Bueno ya voy.

Abandonó la mesa con un resoplido, todos continuaron comiendo tranquilamente hasta que el pelirrojo gritó desde el salón.

-¡¿Y tú que haces aquí?!

Ya que soy una chismosa fui flotando rápidamente hasta donde estaba Ayato, la puerta estaba abierta pero aún no podía ver quien había tocado.

-¿Quien es? ¿Un Mukami?

-¡Peor!

-¿Como que pe-? - giré la cabeza al detenerme junto al pelirrojo y lo que vi me asombró a sobremanera.- ¡Azopotamadre!

Los ojos casi se me salen de las cuencas al ver a aquella persona que jamás esperé ver en short veraniego, chanclas y gafas de sol.

-Buenas tardes Ayato, tal parece que viste un fantasma.- habló la visita con una sonrisa ladina.

-¡Es el Daddy- digo, Papamaki!- grité.

-¿Como que Daddy?- preguntó Ayato a punto de reirse.

-Detalles.

-Hola papá.- al decir esas palabras Ayato hizo una mueca de disgusto bastante evidente.

Definitivamente esto se va a poner bueno.
















Hola bbs, ya se que me extrañaron y extrañaron a Yurei.

Este capítulo no es muy sustancioso pero se vienen cosas buenas, como por ejemplo el Ayato x Yui. Yo sé que lo quieren.(͡° ͜ʖ ͡°)

Me despido y aviso que probablemente vuelva a actualizar (^ω^)

El fantasma de una dialover [Diabolik Lovers]Where stories live. Discover now