Enamorada De Mi Mejor Amigo

Mi familia

                   Pov Alex

Estaba en la sala viendo una película, cuando escuché se caía algo en la parte de arriba y luego un vidrio romperse, así que decidí subir para ver si todo estaba bien.

Me paré en la entrada de mi cuarto y ví a Lexie teniendo un ataque de pánico, no era la primera vez que ella se ponía así, por ende me asusté un poco pero ya sabía que hacer.

—Lex solo es un ataque de pánico has tenido miles vas a estar bien, mírame ya va a pasar—me acerqué a ella y la llevé hacia la cama para que se sentara en mis piernas, y comencé a darle cariñitos buscando su tranquilidad.

—No, no puedo Alex, no puedo—mi corazón comenzó a acelerarse, pero yo no podía asustarme no con ella así.

—Estás a salvo Lexie, concéntrate en respirar, respira conmigo, inhala y exhala, todo estará bien—ví como su respiración comenzó a regularizarse y sin darme cuenta la mía también.

Ella se quedó  en blanco un segundo, y cuando creí que ya había pasado comenzó llorar, hacía mucho que no la veía llorar con esa intensidad y comencé a asustarme, mi mente pasó por miles de situaciones y ya no podía más.

—Pequeña dime que pasa me estás asustando—ella salió de su trance y dejó de llorar.

Me miró con su carita que estaba completamente roja y me dio un besito en los labios, se paró de mis piernas y se sentó a mi lado para tomar mi mano.

—Perdoname mi cielo, no quería asustarte primero que nada quiero que sepas que no pasa nada malo, solo me sobre cargué de emociones, obviamente que esta no es la manera en la que quería decírtelo, pero supongo que no me queda de otra, cariño vas a ser papá, estoy embarazada—sus palabras calentaron mi corazón, los ojos se me llenaron de lágrimas y no pude evitar preguntar.

—¿Lo puedes repetir por favor?—ella soltó una risita y colocó mi mano en su pancita.

—Vamos a tener otro hijo mi cielo, vas a ser papá de nuevo— las lágrimas que había retenido corrieron por mis mejillas pero ella las limpió

La tomé de los hombros y la abracé con fuerza, le llené la cara de besos y acaricié su vientre, iba a ser papá por segunda vez, mi hermosa familia iba a estar completa.

Entonces caí en cuenta, Lex se debía sentir agotada, con las hormonas del embarazo invadiendo su cuerpo y el ataque de pánico que tuvo hace rato debía estar cansada.

—¿Cómo te sientes pequeña? Debes estar agotada—mi instinto protector hacía ella era aún más grande.

—Tranquilo mi amor, yo estoy bien, ¿Tú cómo te sientes?—ella siempre piensa el mí y eso me ilumina la existencia.

La tomé y la acosté entre las cobijas, después hice lo mismo conmigo para poder abrazarla y claro acariciar su abdomen.

—Me asusté Lex, no sabía que pasaba y eso me asustó, y después de eso, lo que acabas de decirme, es algo hermoso princesa, no solo porque me dijeras que estás embarazada sino también porque siempre cuentas a Izan como tu hijo, no te voy a negar que tengo miedo, supongo que es algo normal después de todo un bebé no es un juguete, y ahora tendremos el doble de responsabilidades, pero vamos a estar bien—le conté como me sentía realmente, enterarte de que serás papá es una gran noticia, perdón también es abrumador.

Ella se quedó pensando un rato y yo le di su espacio, después de todo si esto era un shock para mí no me podía imaginar como se sentía ella.

—Vamos a estar bien, tenemos que hablar sobre miles de cosas, pero por hoy solo quiero descansar, disfrutar de la noticia y...—ella se puso roja y se veía adorable