¿Destinados? [Completa✓]

Capitulo I

"Me gustaría parecer fuerte
pero ne derrumbo por todas partes."

La mecánica del corazón.

Levana

Despierto con el sonido del móvil retumbándome los tímpanos. No lo entiendo, ¿quién tiene tanta insistencia a esta hora?

Recordándome que tengo mala suerte me levanto de la cama y caigo de bruces al suelo y la insistente melodía del móvil continúa.

-¡Joder! Ya voy- expreso como si pudieran escucharme.

Finalmente tomo el móvil, y en la pantalla salta en nombre de mi mejor amiga.

-¿Si sabes que son las seis de la mañana, verdad?- respondo molesta, odio que me levante demasiado temprano.

-Si lo sé, y la verdad no me importa importa- ruedo los ojos- te llamaba para recordarte que prometiste desayunar conmigo y consolarme por mi reciente rompimiento.

Si, ahora que lo recordaba, Olive, quien es mi mejor amiga -y la única ahora que lo pienso- rompió con su novia de hace un año -¿o eran dos?- y me dijo que necesitaba desahogarse con alguien y pues siendo su única amiga, tenía que hacerlo.

-Sí, lo recuerdo Olive, no tengo la memoria de Dory como tú- suelta una carcajada- aunque vagamente recuerdo que dije a las nueve de la mañana, aún no entiendo el tener que madrugar.

-¡Te conozco! Lo ibas a olvidar o simplemente me ibas a ignorar hasta que pasara un tiempo y yo lo olvidara- no respondo nada simplemente por que es cierto-. Siempre es así y no entiendo por que siempre tengo que rogarte para ir a algún lugar.

Hay tantas cosas que Olive no sabe y no es que no confíe en el ella, lo hago, es solo que no me gusta que los demás sepan como me siento y así atribuirse mi dolor y cargarlo cuando la única que debe hacerlo soy yo.

Se que algún día le diré todo lo que he callado desde hace algún tiempo, pero por ahora debo dejar todo tal cual está.

-¡LEVANA!- salgo de mis pensamiento con el grito a través de la vocina- odio cuando haces eso, te quedas en blanco como si no estuvieras aquí.

-Si, perdón, oye tengo que terminar unos pendientes de la universidad, me arreglo y te veo el la cafetería de allí, para desayunar, ¿ok?- ella suelta un suspiro y gruñe un sí - bueno, adiós.

-Adiós- se despide.

El resto del tiempo luego de la llamada con Olive, como dije, lo utilicé para terminar unas tareas pendientes de la facultad, luego de terminar fui a tomar una ducha y me estaba terminando de arreglar en estos momentos.

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Aunque la verdad no era la gran cosa arreglarme, ya que, el "arreglarme" para mí, era tomar siempre la ropa más holgada que encontrara y así no mostrar nada.

Y no podían faltar mis siempre confiables converse que amaba y cuando digo que los amo es enserio, los uso para toda ocasión, y es que son realmente cómodos.

Una vez lista me dirigí a la puerta, no sin antes pasar por el espejo de cuerpo entero que tenía cerca del recibidor, y no, no me malentiendas, yo no soy muy partidaria a los espejos.

De hecho los odias.

Me recordó mi consciencia y es cierto, no me gusta ver mi reflejo en esas cosas, mi mente a veces distorsiona las cosas y por eso prefiero tenerlos lo más lejos de mí, pero este lo tengo solo porque fue un regalo de mi madre ya que me dijo: "que clase de jovencita no le gustaría tener un espejo en el cual mirarse todos los días".