『 ↳✧・゚ 𝐘𝐄𝐎𝐍𝐉𝐔𝐍 ; 』

2.1K 91 13
                                    

Desearía que este verano hubiera durado para siempre, pero se pasó en un abrir y cerrar de ojos. Quería salir más tiempo con mis amigos, disfrutar de mis últimas semanas acá y más que nada decirle todos los días a mi novio, Yeonjun, lo mucho que lo amo. Sigo sin saber que mierda haré sin el, en otro país del otro lado del mundo.

Quería abrazarlo todas las noches, escucharlo decirme los buenos días y que me acompañara todas las mañanas camino a la universidad. Aún recuerdo que me dijo que conseguiría su licencia de conducir para llevarme a la universidad, pero nunca contamos con que me iría lejos de él. Por supuesto, estaba orgulloso de mi, pero también estaba decepcionado porque no seguí los planes que teníamos.

- Amor, tienes que comer antes de irte. - dijo recargándose en el marco de mi puerta.

Lo vi y su semblante estaba completamente apagado. Deje la maleta a un lado y me senté en la orilla del colchón.

- Junnie. - dije para que el levantara la mirada y me viera. - Ven. - dije abriendo mis brazos.

El camino y metió sus manos en sus jeans, yo lo abracé pero el no a mi.

- Me estás haciendo sentir peor de lo que ya me siento. - le dije aún agarrando su cintura.
- ¿Qué quieres que haga? ¿Qué este feliz?

Me separé de él y lo vi, pero el no quería verme.

- Me dijiste que estabas orgulloso de mi.
- Si lo estoy, pero no estoy feliz. - dijo caminando para salir de la habitación.

Todas las noches había estado llorando para evitar llorar frente a él, pero esto definitivamente iba a hacerme pasar un mal rato en frente de Yeonjun. Después de un tiempo, baje a la cocina y vi a Yeonjun en el celular con un plato de comida a su lado.

Camine hacia el y sin mirarme apuntó al plato.

- Lo hice para ti, cómelo todo.

Odiaba ver a Yeonjun así.

Me senté y empecé a comer, supe que se había esforzado tanto por lo bueno que estaba. Y fue ahí donde me di cuenta que su esfuerzo fue porque era la última comida que el podría hacerme hasta dentro de mucho tiempo. Las lágrimas empezaron a salir de mis ojos sin darme cuenta, el dejo su teléfono y acarició mi mejilla.

- No te había visto llorar hace mucho. - dijo limpiando mi mejilla con el pulgar.
- No lo hacía en frente de ti. Esto está muy rico. - dije riendo para tratar de no hacer el asunto tan triste.
- Tenia que hacerlo mejor que otras veces para que recuerdes mi último platillo.

Lo vi y el sonreía, pero se desvaneció justo después de que yo llevara mis manos a mi cara para llorar más fuerte.

- Yeonjun, no va a ser el último. - dije negando con la cabeza.
- Espero. - dijo levantándose de su silla y abrazándome.
- ¿Por qué esperas? Dije que no será el último y punto.
- Porque espero que cuando tenga la oportunidad de volverte a cocinar algo me sigas amando.

Recordé el gran miedo que ambos tenemos de que por estar tan lejos perdamos interés en los dos. Ambos estamos nerviosos porque el otro encuentre a alguien más. ¿Pero a quien más puedo encontrar si ya estoy con el?

- No habrá nadie más que tú. - lo tome de las mejillas. - Eso puedo asegurártelo.

El sonrió y dejó un beso en mis labios.

- Luego hablamos de eso nena, come y te ayudo con tus últimas cosas.

Acabe rápido para ir con el al cuarto de regreso. Cuando entre, lo vi viendo la caja que llevaba en mi maleta con todas las cartas, fotos y recuerdos que el me había dado. Me vio y se sonrojó. Quería demostrarle que estaba segura que esto funcionaría.

txt - one shots ·˚ ༘Where stories live. Discover now