Una última oportunidad parte 3~•

125 20 12
                                    

La pareja salió del hospital sin decir una palabra, y mientras hacían el recorrido acordado por Marín, tampoco se dirigían la palabra, algo de lo ocurrido antes había dejado sin habla a Aioria, pero en cambio Marín no es que no quisiera hablar, si no es que ella no le gustaba hablar en lugares donde había gente ajena a ellos, y prefería un lugar más íntimo para hablar, por lo que prefería regresar a Grecia, a casa, y hablar con Aioria.

Después de un tiempo, los dos llegaron a Grecia y se apresuraron a llegar a la casa de Marín.
Ella abrió la puerta con cuidado, siempre había sido tosca al realizar esta acción; de inmediato entro y espero a que Aioria entrara.

Ya dentro, Marín se lanzo a la cama y se quitó los zapatos, hundió la cara en la almohada y exhaló profundamente. No espero ni un momento a Aioria, pero escucho como se sentó a un lado de ella.

- Marín

Dijo Aioria acostándose con cuidado de no molestarla.

- ¿Si?

- ¿Puedo preguntar unas cosas?

Ella levanto la mirada y asíntio con la cabeza.

- Te escucho

El la miro con sus hermosos ojos verdes con mucho Interés.

- ¿Por qué crees que estemos enamorados?

Ella de inmediato se acostó boca abajo para quedar cerca de Aioria y poder pasar sus manos por su pelo y su rostro.

- Tal vez porque - ella guardo un momento de silencio y después pudo seguir - porque nos apoyamos entre nosotros y tenemos cosas en común, además de que me siento muy bien cuando estás conmigo

El sonrió y le dió un beso en la frente

- Yo pensé algo similar pero hay una cosa más. Puede ser porque tú eres mi alma gemela

Marín se rió y luego junto su nariz con la de el.

- sabes, creo que estoy de acuerdo con eso – ella inhaló y volvio a acostarse en la cama boca arriba – ¿Qué pregunta sigue?

Pregunto con curiosidad

— ¿Qué es lo que te atrajo de mí? ¿Qué es lo que más te gusta o atrae más de mi?

Ella sonrió y lo miro con cuidado.

— Pues, siempre creí que eras muy atractivo, amable, curioso, amoroso, inteligente – ella suspiro dramáticamente y prosiguió – pero honestamente me encantan tus ojos; los miraría por horas

El se acercó a ella y se puso a pestañear varias veces seguidas.

— Te doy permiso de verlos

Menciono mientras le lanzaba miradas seductoras. Marín le dió un golpecito en el brazo y se sonrojó ligeramente.

— ¿Qué otra pregunta tienes?

— Pues. . . .¿A qué renunciarías en la vida por amor?

Ella junto sus manos y se pensó bien la respuesta. Parecía algo fácil de responder, eso si diera una respuesta al aire, pero quería ser honesta con el.

— Yo no tenía presente el amor en mi vida, pero ahora creo que. . . .si fuera por el amor que siento hacia ti: renunciaría incluso a mi puesto de caballero de Athena por estar contigo

El cerro sus ojos con ternura mientras dibujaba una sonrisa similar en su rostro.

— No pensé que renunciarías a algo así – Aioria de rasco la cabeza y lo miro con vergüenza – me siento alagado

*•.¸♡Escondiendo Nuestro Amor¸.•*Where stories live. Discover now