-𝐖𝐞 𝐜𝐚𝐧-

Epílogo

Habían pasado dos años, dos años llenos de varios sentimientos encontrados.

Dos años en los que encontré el amor que no venía en los libros, no me casé con un duque, me casé con un guerrero.
Mi padre no es aquella persona que solo ve por el, siempre vio por todos.
Zadkiel es un maestro de la vida, siempre sabe que decir en el momento adecuado.
Aunque mamá estuvo un tiempo conmigo se que estaría orgullosa de lo que me he convertido, tenía razón, Edgar no iba a dejar que me desposara una persona que no amo. Aunque la recuerdo con nostalgia también lo hago con alegría, en el momento que estuvo fue un momento único y hermoso.

Ahora miro a Edgar segura de todo lo que siento por el, segura que el amor y nervios que me dan al verlo es algo bueno.

Nunca lo había visto enamorado de dos personas hasta que nació nuestro hijo.
Alarick es una combinación de ambos, pero sin duda es lo más lindo que mis ojos hayan visto.

Sin duda, nosotros podemos con todo Edgar Thompson.