Una Pequeña Princesa Traviesa

Capitulo 6

Si ven algún error de ortografía, me avisan en los comentarios por favor u gracias. Espero y disfruten.😉

(...)

Después de caer "dormida" recuerdo abrir vagamente mis ojos o escuchar voces a lo lejos en varias ocasiones.

La primera vez que abrí mis ojos una sombra estaba muy cerca de mi, aunque quería moverme mi cuerpo no reaccionaba y luego volví a sentir un pinchazo en uno de mis brazos.

La segunda vez creo que escuche a alguien hablar, su voz me era familiar pero no recordaba donde la había escuchado. Unas suaves caricias desde mi cabello pasaron por mi rostro y perfilaron mi mandíbula deteniéndose allí unos segundos mientras decía.

"Eres tan hermosa mi pequeña, no sa..."

Su voz paro drásticamente mientras pasaba la punta de sus dedos por uno de mis brazos.

"Ese hijo de puta, lo voy a matar por hacerte daño, te lo prometo pequeña".

Fue lo último que escuché antes de sentir tal vez unos labios en mi frente y pasos alejándose.

Tiempo después sentí mi cuerpo elevarse como si estuviera flotando, sentía todo ajeno a mí pero no me preocupé, mi cuerpo no respondía como quería era como si estuviera ahí y al mismo tiempo no.

Escuchaba voces a mi alrededor pero muy lejanas y caricias tan suaves que casi no las sentía.

(...)

Creo que pasaron horas pero no sé cuánto tiempo específicamente.

Un zumbido en mi oído me desconcertó y un dolor de cabeza terminó de despertarme.

Me encontraba en una especie de habitación, casi a oscuras pero había una lámpara encendida.

Me encontré extraño que las paredes no son cuadradas si no redondas y habían pequeñas ventanas cerradas.

¿Donde estoy?.

Aunque sabía la respuesta quería que esto no fuera real y todo sea un sueño.

La cama era muy suave y muy cómoda, tenía ganas de seguir durmiendo por que era lo que mi cuerpo quería.

Una especie de timbre se escucha por la habitación y yo di un pequeño salto en la cama.

"Por favor de abrocharse los cinturones en unos minutos comenzaremos el aterrizaje".

¡¿Que?!.

¡¿ATERRIZAJE?!.

Esto debe de ser una puta broma.

Eso acababa de aclarar mis sospechas.

Observé mi cuerpo por primera vez y desarropó mi cuerpo sentándome en el
borde de la cama cuando veo que mis muñecas y tobillos tenían hematomas.

Pase delicadamente la punta de mis dedos sobre ellos y recordé de me habían atado mientras estaba en la furgoneta.

Llevo puesto una camisa negro de hombre que cubrían mis muñecas aunque me quedara grande y las sábanas que anteriormente quité me cubrían desde la cintura hacia bajo.