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Es temprano por la mañana cuando el dolor en su espalda y hombros le despiertan; ha dormido en el sofá de la sala de Yoongi, en un espacio reducido en donde definitivamente no cabía. Abre los ojos en medio de un bostezo y estira su cuerpo antes de levantarse aún con la mirada somnolienta y el cabello revuelto.

No conoce mucho la casa de Yoongi como para saber dónde está ubicada la cocina, pero el olor a café lo guía hasta allí. Yoongi está sirviendo y cuando lo mira agrega una taza más, dejándola llena sobre la mesa, y Jungkook casi de manera sonámbula la toma entre sus manos y le agradece.

—¿Y Taehyung? —pregunta, suspirando bajito por el delicioso aroma del café recién hecho en la cafetera.

—Arriba, en la ducha.

—¿Y Jimin? —le pregunta, antes de dar un sorbo.

Yoongi ríe un poco antes de responder. —Arriba, en la ducha también.

Y Jungkook no puede evitar escupir el café.

El líquido caliente sube por su garganta, provocándole tos fuerte que le hace arquearse, producto de la sorpresa. Yoongi se ríe mientras lo mira ahogarse, y le palmea la espalda apenas pudiendo controlar su risa al ver su piel roja.

—Ya, ya, calmate. —dice riendo mientras lo golpea. —Tengo dos duchas, tonto.

Jungkook tose y lo mira molesto. —Pudiste empezar por allí.

El mayor ríe de nuevo, sentándose para tomar su café. —¿Crees que tu hermano se enredaria con el chico que te gusta? Están en mi casa, Jungkook, no seas tonto.

—Jimin ha salido con personas que me gustaban. —admite, encogiendose de hombros. —Aunque en realidad, nunca he dicho que Tae me guste.

Yoongi se ríe ligeramente. —Normal en Jimin, supongo. Siempre pensé que era atrevido, pero no creí que tanto, ¿entonces no te gusta Taehyung?

Jungkook niega con la cabeza. —No dije que no me gustara, dije que nunca había dicho lo contrario, es diferente.

—Sí... Claro.

—Eres el menos indicado para fastidiarme con eso, llevas no sé cuánto tiempo en esa amistad tonta con Jimin y ninguno sabe claramente lo que siente. —le replica con una sonrisa burlona, pero se borra al instante en que Yoongi le responde.

—¿De qué hablas? Yo tengo muy claro lo mucho que me gusta tu hermano.

Y Jungkook no estaba listo para eso.

Mucho menos cuando Yoongi lo dice con calma, como si fuera la cosa más simple del mundo, y es que, para él, lo es. Pero no para Jungkook, quien sólo molestaba a su hermano por diversión y no pirque realmente pensara seriamente en que tenía algo con Yoongi. Es por eso que lo mira con sorpresa, y apenas y puede creerlo cuando habla.

—P-pero él... Él dijo...

Yoongi se ríe de nuevo ante su reacción, pero sabe bien que ir por ese camino no es algo que se le antoje demasiado, por ello, termina por suspirar. —Sí, me gusta, y me interesa que es lo que él piensa de todo esto, pero tengo algo que decirte y es importante. Yo lo conozco, a Taehyung, quiero decir, lo conocí hace un tiempo.

Jungkook bebe lo que resta de su café antes de hablar. —Ah, sí, Jimin dijo que eres un niñito rico de los barrios altos de Seúl, por cierto, ¿cómo te terminaste fijando en mi hermano? Tú sabes... Son mundos distintos.

—El punto no es Jimin ahora, Jungkook, hablo enserio, es importante y... ¿niñito rico? —le pregunta riendo ligeramente. —Es una manera sencilla de decirlo, pero sí, lo soy... ¿Eso significa que sabes que Taehyung también lo es?

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