No Soy Humano (Renacimiento) [COMPLETA]

Capítulo 87 - Fin

Gu Huai pudo entender el estado de ánimo de Alves y sus pestañas temblaron levemente.

Gu Huai permitió que Alves le tocara la cara en silencio. Una vez que Alves se detuvo, Gu Huai atrajo a la otra persona hacia él, desatando expertamente la tela que esta persona usaba para cubrir sus ojos. En el momento en que se desató la tela, se cayó y Gu Huai estaba extremadamente cerca de las pupilas verticales doradas de Alves.

Estos ojos estaban fijos en él e inmediatamente, dos escenas pasaron por la mente de Gu Huai.

Una fue que la escena estaba en Tuser y también en esta habitación. Fue el primer momento en que se desató la venda de los ojos de Alves. La otra era la escena de la línea de tiempo pasada en la que Alves acababa de salir de su caparazón y era un cachorro. Gu Huai pensó que no importaba en qué período de tiempo, la primera vez que Alves vio el mundo, siempre parecía estar mirando a Gu Huai. Por lo tanto, Gu Huai tenía que ser responsable de este gran felino.

"Ha pasado mucho tiempo, Alves". Mirando a la otra persona desde una distancia tan cercana, Gu Huai no se escondió y solo sonrió a Alves.

En cualquier sentido, hacía mucho que se había ido.

La cara de Alves se tensó ligeramente mientras rodeaba su cola detrás del cuerpo de Gu Huai. Un momento después, finalmente dijo: "Lo siento".

Después de decir estas palabras con una voz que sonaba fría, Alves agregó: "Ah Huai, no te enojes".

Gu Huai se sorprendió y preguntó de una manera algo desconcertada: "¿Por qué estaría enojado?"

La disculpa del gato fue como un bebé. A los ojos de Gu Huai, el gran gato plateado bajó la cabeza y se frotó la mejilla de Gu Huai. "Porque no estaba allí cuando te despertaste".

Dijo que esperaría, pero Gu Huai se despertó y no lo vio. Alves pensó que Gu Huai podría estar enojado con él por romper su promesa.

"Chirp esperaba todos los días a que Ah Huai se despertara y no rompió mi promesa". La voz de Alves era muy baja mientras usaba el apodo 'Chirp' de una manera coqueta que este gran felino se había dominado sin un maestro.

No importaba lo que dijera. Hubiera sido mejor así. A Gu Huai le hubiera gustado que Alves dejara de esperar si no se despertaba. Sin embargo, el gran gato estaba actuando de una manera tan coqueta que Gu Huai guardó estas palabras innecesarias en su corazón. Él simplemente asintió con la cabeza y estuvo de acuerdo con una voz cálida: "Sí, lo sé".

Después de hablar, Gu Huai se acercó y besó los ojos de Alves. Los ojos de Alves temblaron incontrolablemente ante tal beso.

"¿Chirp ha visto a Ah Huai antes?" Aunque el recuerdo era muy vago, Alves sintió que su cognición era correcta y había conocido a esta persona desde muy temprano.

Gu Huai entendió a qué se refería Alves y se quedó un poco sin habla por un tiempo. ¿Podrían recordarse nuevamente los recuerdos borrados por las 'reglas'? ¿Qué tan obsesivo fue esto?

"¿Por qué piensas eso?" Se preguntó Gu Huai.

Alves no respondió la pregunta y solo miró a Gu Huai. Alves siempre pensó que nunca se rindió a Gu Huai, pero ahora se sentía diferente. Sintió que tal vez fue porque había visto a Gu Huai antes y ya se rindió que cuando se volvieron a encontrar, no sintió el cambio obvio. Aún así, estaba dispuesto a escuchar a Gu Huai no por sumisión sino porque le gustaba esta persona. El impacto de la rendición tuvo un efecto limitado en Alves y él no habría estado dispuesto a obedecer hasta ese punto.

Al ver que Alves no respondió, Gu Huai tampoco preguntó. Simplemente parpadeó y respondió: "Sí ... te he visto".

Alves todavía no podía recordar la imagen completa, pero entendía que la fuente de su irritabilidad y destructividad se debía a perder y olvidar lo que era muy valioso e importante para él.