Nuestro Pequeño Infinito [TERMINADA]

"Ya se fué"

*Narra Dante*
No estaba seguro de que hacer realmente, era muy tarde para ir a la casa de Simona, a demás, no era algo que tuviera que saber ya mismo. Decidí esperar al otro día, Romeo me entendió y me apoyó en cada decisión que había tomado antes y también ahora.
Sabía que era difícil para él hacer esto, porque aunque estuviera intentando algo con Lula otra vez, amaba a Simona con todo el corazón.

AL OTRO DÍA...

*Narra Simona*
Me levanté ocho de la mañana, me bañé y me cambié. Fui a desayunar y después preparé una valija de Ropa, tenía un bolso de mano en dónde iba a llevar mi teléfono y todas esas cosas.
Las chicas y Piru habían venido a despedirme, estaban emocionadas de que me fuera a España, me pedían regalos todo el tiempo para que les traiga a la vuelta.

Chipi
No se largue a llorar, Simona se va unos días nada más.

Rosa
Simo, hija, trata de estar bien allá. Disfrutá cada momento con tu hermana, pásenla bien y tengan cuidado.

Simona
Sí mamma.

Ailín
¡Traeme algo amiga! -se ríe- Mentira, si es posible, olvidate de todo y aprovechá cada minuto que pases allá.

Agus
Espero que nos llamen y nos manden muchos mensajes todos los días.

Chipi
¡Obvio!

Piru
¿Me llevan con ustedes? No tengo ropa, así que no tengo nada que preparar, ya estoy listo.

Simona
Callate vos. -se ríe- Vení acá, dame un abrazo. -lo abraza-

Piru
-corresponde al abrazo y sonríe-

Simona
Te voy a extrañar amigo, más vale que no te hagas el canchero y vengas a cuidar a mi mamma.

Piru
Obvio, me quedo a dormir. -se aleja de Simona y mira a Rosa-

Rosa
Tampoco tanto.

Chipi
Bueno... -los mira a todos y después a Simona- ¿Estás lista?

Simona
Sí. -sonríe-

Ailín
-las abraza a las dos- Chipi volvé pronto.

Agus
-se une al abrazo- Las vamos a extrañar.

Piru
-se une también al abrazo- Ahora sí es un abrazo.

*Narra Simona*
Un taxi llegó y cargamos las valijas.
En ese momento no me sentí bien, sentía que me faltaba algo, no me podía ir. Le pedí a mi hermana que me esperara en el aeropuerto, y aunque no entendió nada, aceptó y me dijo que me apurara porque el avión salía a las 12:20 hs.
Me pedí otro taxi y fui a la casa de los Guerrico, tenía que verlo una vez más.

*Narra Dante*
Me desperté al otro día, desayuné y me preparé. Me había dormido, así que cuando salí corriendo a la casa de Simona, eran las 11:30 de la mañana.
Cuando llegué nadie me entendió, así que la llamé por teléfono pero tampoco respondió. Decidí volver a casa y averiguar si estaba ahí.

Simona
-entra a la casa- ¡Junior!

Junior
-saliendo de la cocina- Ey, Simona, ¿que hacés acá?

Simona
Busco a Dante, ¿sabés si está acá?

Junior
Creo que acaba de salir.

Simona
¿A dónde fue?

Junior
Ni idea, ¿te pasa algo a vos?

Simona
Estoy muy apurada me tengo que ir.

Junior
Si querés esperarlo, no pasa nada, capaz que en un rato viene.

Simona
No puedo, a las doce y veinte me voy en avión.

Junior
¿En avión? -confundido- ¿A dónde?

Simona
-lo mira triste- Me voy a España, y tenía la esperanza de ver a Dante una vez más.

Junior
-triste- Pero ya debe venir, si querés lo llamo.

Simona
Ya está, me tengo que ir.

Junior
Pero si esperás un segundo, seguramente...

Simona
-lo abraza fuerte y después se aleja- Gracias. -se va corriendo-

Junior
¡Simona, pará! -la sigue-

*Narra Simona*
Salí llorando de la mansión y caminé al menos tres cuadras. Me pedí un taxi ahí, y fui directo al aeropuerto, no tenía más tiempo que perder.

Dante
-llegando- ¿Junior? ¿Que hacés acá afuera?

Junior
¿No la viste?

Dante
¿A quién?

Junior
A Simona.

Dante
¿Simona? -desesperado- ¿Cómo que Simona?

Junior
Vino a despedirse de vos.

Dante
¿Me estás jodiendo?

Junior
Se va a España, sale el avión a las doce y veinte, ahora.

Dante
Pero ya son las doce.

Junior
Vamos en el auto de Diego, quizás llegas a pararla.

*Narra Dante*
Por primera vez en mi vida le hacía caso a Junior: nos subimos al auto y nos fuimos directo al aeropuerto, los dos corriendo.
No tenía tiempo para preguntar nada, pero en el tablero de horarios decía que los pasajeros del vuelo a España de las 12:20, ya estaban abordando el avión.
Horriblemente, era un aeropuerto enorme y no llegaba más. Las puertas se cerraron y no me dejaron entrar.
Me acerqué a la ventana gigante y vi cómo la avión de Simona se iba.

Dante
Llegamos tarde.

Junior
-lo mira triste- Perdón Dante.

Dante
Ya se fué. -se le caen las lágrimas-

Junior
¿Que pasaba si se quedaba?

Dante
Íbamos a estar juntos.

Junior
¿Pero Simona no es...?

Dante
No. -lo interrumpe- No es nuestra hermana.