Nuestro Pequeño Infinito [TERMINADA]

"Quizás era su novia"

Mateo
¿Ya se conocían?

Dante
Sí. -mira a Mateo- Ella es...

Simona
-lo interrumpe- Nos conocemos por la familia nomás, yo era la mejor amiga de su hermano.

Dante
-mira a Simona confundido-

Mateo
Ah, claro.

Simona
Bueno. -suspira y le da un vaso a Mateo- ¿Vamos con mis amigas?

Mateo
Eh... sí, dale. -empieza a caminar-

Simona
Chau, Dante. -se va-

Dante
Chau. -intenta seguirla-

Mía
Ey! -lo agarra del brazo- ¿A dónde ibas? Pensé que me estabas esperando en la barra.

Dante
-la mira- Sí, pasa que justo ví un amigo y lo saludé.

Mía
Ah bueno, ¿y dónde está, tu amigo?

Dante
Ya se fué.

Mía
-se ríe- Está bien si no me querés decir la verdad.

Dante
-se cruza de brazos-

Mía
¿Que hacemos? ¿Nos quedamos más tiempo, o taza taza cada cual a su casa?

Dante
Yo, por mí está bien, si te querés quedar más tiempo, nos quedamos.

Mía
Pero no te quedes por mí, quedate si tenés ganas.

Dante
Si querés vamos al bar a tomar algo, así estamos más tranquilos.

Mía
-sonríe- Dale, vamos.

*Narra Dante*
Pedí un taxi y nos fuimos al bar.
Llegamos y me puse a cocinar algo y a preparar unas bebidas. Mía y yo nos sentamos en una mesa, la estaba pasando bien, por lo menos me reía un poco.

*Narra Simona*
Después de ver a Dante, no podía dejar de preguntarme que hacía acá, si estaba o no estaba solo. Mateo me hablaba todo el tiempo pero no podía prestarle atención. Las chicas se divertían un montón y cuando Piru volvió, se puso a hablar con Mateo. Yo de nuevo estaba fuera del grupo.
Les dije que no me sentía bien para poder irme, y les pedí que se quedaran a disfrutar la noche.
Estaba yendo a casa, cuando pasé por el bar de Dante. Una sensación rara me hizo acercarme hasta la puerta y ver por el vidrio.
Y entonces fue cuando lo ví, reír, ser felíz, disfrutar por primera vez de la buena compañía. Era una chica, parecía dulce y era linda. No tenía ninguna duda de que quizás era su novia, pero aunque no supiera nada al respecto, podía darme cuenta en los ojos de Dante, que había algo más entre ellos.
Minutos después, Blas me sorprendió.

Blas
¿Simona?

Simona
¡Que susto!

Blas
¿Estás llorando?

Simona
No no, para nada.

Blas
¿Que hacés acá? ¿Ibas a entrar?

Simona
No, justo pasaba por acá y Vi que estaban las luces prendidas, pero me voy a casa.

Blas
Ah bueno. ¿Segura que estás bien?

Simona
Sí. -sonríe triste- Nos vemos otro día.

Blas
Pará, ¿querés que te lleve?

Simona
No no, olvidate, no quiero molestar.

Blas
No es molestia. -saca unas llaves del bolsillo- Yo vine hasta acá porque me olvidé unas cosas, si me esperás, las busco y te llevo.

Simona
¿Vos decís?

Blas
Sí, si querés acompañame hasta adentro.

Simona
Mejor te espero acá. -se corre de la puerta de entrada y se queda parada al lado de un árbol-

Blas
Ya vengo. -entra al bar-

*Narra Dante*
La tensión aumentaba, me daba cuenta que Mía estaba disfrutando mucho de esto, así que le seguí un poco el juego. No tenía intenciones con ella, era una amiga de Uruguay. Pero al parecer, para ella era algo más. Estaba a punto de besarme cuando la puerta se abrió y me alejé enseguida.

Dante
¿Blas? ¿Que hacés acá?

Blas
Perdón, me olvidé unas cosas y... -ve a Mía- Ya me voy, es un segundo que te molesto nada más.

Dante
No pasa nada, me sorprendiste.

Blas
Interrumpí. -sonríe-

Mía
No pasa nada, ¿Blas?

Blas
Sí, vos seguro sos Mía, un placer.

Mía
Lo mismo digo. -se levanta- Paso al baño y ya después me voy a casa. -se va-

Blas
-se acerca a Dante- Perdoname.

Dante
No era nada, vinimos a comer algo y ya nos íbamos. -levanta las cosas de la mesa- ¿Que hacés vos?

Blas
Junior dejó la campera y el celular, vine a buscar eso.

Dante
Es un boludo ese pibe, no sé dónde tiene la cabeza.

Blas
Bueno, tampoco para tanto, a cualquiera le podría pasar.

Dante
-se ríe- Bueno, limpio esto y ya me voy.

Blas
Dale. -busca la campera y el celular de Junior- Yo ya tengo lo que vine a buscar, me voy porque Simona me está esperando.

Dante
¿Simona? -lo mira sorprendido-

Blas
Vine al bar y la vi en la puerta, así que me ofrecí a llevarla.

Dante
¿En la puerta?

Blas
Sí, aunque estaba rara, creo que estaba llorando.

Dante
¿Le preguntaste qué le pasaba?

Blas
Solo me dijo que estaba bien.

Dante
-mira para afuera- ¿No me podés terminar de ordenar la mesa? Voy a hablar con ella.

Blas
Si, obvio. -deja las cosas en la barra-

Dante
-sale del bar- Hola.

Simona
-se da vuelta y lo mira- Hola.

Dante
¿Soy el hermano de tu ex mejor amigo nada más?

Simona
Recién lo conocía, no tenía por qué saber tantos detalles.

Dante
Claro.

Simona
¿Saliste a bailar, solo?

Dante
Con una amiga.

Simona
Una amiga, genial.

Dante
Sí, llegó ayer a Buenos Aires.

Simona
Ah, no es de acá, con razón nunca la había visto.

Dante
La conocí en Uruguay cuando me fui a vivir un tiempo allá.

Simona
Que bien.

Dante
¿Estás bien? Blas me dijo que te encontró acá afuera.

Simona
Estoy excelente, es que pasaba por acá, ví las luces prendidas y cuando me acerqué a la puerta te vi con ella.

Dante
Ah. -se cruza de brazos- ¿Y que viste?

Simona
Lo feliz que estabas.

Blas
-aparece- Listo Dante.

Simona
-mira a Dante con lágrimas en los ojos-

Dante
Gracias, Blas. -todavia mirando a Simona-

Blas
¿Vamos, Simona?

Simona
Sí. -se da vuelta para subirse al auto- Chau Dante.

Dante
Sí, chau... -entra al bar otra vez-