Josuke Higashikata

310 35 0
                                    

AU: Soulmates

-Entonces... ¿nunca haz visto de qué color es tu Crazy Diamond?

-Es raro ¿no tienes algún problema en los ojos, Josuke? Deberíamos ir con Tonio a que comas algo para eso.

-No, es que... No tiene nada que ver con eso, chicos.- Se excusó Josuke, algo avergonzado-. Es... tiene que ver con otra cosa.

-¿Qué es? Podríamos ayudarte, no importa lo que debamos hacer ¡somos tus amigos!

-Es algo que yo debo resolver, hasta eso no se preocupen ¡debemos encontrar a más stand ussers!

.

.

.

.

.

.

.

.

.

-Alguien está causando problemas en la ciudad otra vez ¿acaso no puedo tener un día tranquilo?.- Esta vez Josuke se encontraba solo, pues había seguido a un stand, o al menos parte de él hasta esa parte de la ciudad. Ya estaban algo lejos de las personas, así que podría pelear sin problemas esta vez.

Divisó a lo lejos una figura bastante borrosa, por lo que decidió acercarse con cuidado hacia esta, dando un salto al notar que había invocado a un stand. No dudó ni un segundo, sacando a su Crazy Diamond para atacar antes de que el lo hiciera primero, sorprendiendose al sentir la rápida reacción de su oponente. Ya estaba listo para pelear.

-¡Alto ahí! No dejaré que lastimes a nadie.

-¡Eso debería decirlo yo! ¿Qué hacías siguiéndome?

-¡Vi tu stand! Crazy Diamond, haz lo tu- ¿Crazy Diamond? ¿Tienes color?

-¡Ocean Maste-! ¿Eh? ¿Eres azul?.- Los dos se miraron por largo rato, turnando su mirada entre sus stands y el otro, abriendo los ojos con algo de emoción y sorpresa, tenían varios sentimientos encontrados en ese momento.

-¡Tu eres mi alma gemela!

.

.

.

.

.

.

.

-Perdón por atacarte antes, pensé que eras una stand usser enemiga.- Josuke le tendió un helado, sentándose a su lado mientras rascaba su nuca con algo de vergüenza-. No pensé que, uh... fueras mujer, desde el principio.

-Sí... perdón también por atacarte, pensé que aquí nadie vería a mi stand, cuando te vi pensé que también eras un enemigo. Yo, uh, soy nueva en la ciudad ¿cómo dices que te llamas?

-Higashikata Josuke, a tus órdenes. Entonces...

-Somos almas gemelas.- Terminó la joven, sonriendo para si misma sin poder evitarlo-. Nunca supe de qué color era mi Ocean Master, desde que lo obtuve siempre fue... gris. Pensé que simplemente era así, y me resigné porque sus poderes son increíbles, pero sin color... era como ver el cielo apagado.

-Me pasó lo mismo con Crazy Diamond, primero pensé que era gris, pero todos podían ver sus colores... todos menos yo. Nunca imaginé que fuera rosa.

-Es lindo, y se ve que puede pelear bien ¿eh?.- Palmeó la cabeza del stand, escuchando un suave "dora" de su parte-. Debemos ver que tan resistente eres chico, nadie le gana a mi Ocean Master.

- ¡Ja! No lo haz visto en acción, además de eso puede curar, es de lo más genial.

-¿En serio? Que genial~. Ocean Master puede ayudar a regenerar tejidos, pero es algo lento porque no es su especialidad... por eso tardo en sanarme a mi misma, es algo problemático a veces. Por eso tengo muchas cicatrices, mira mira.- Le enseñó su pierna, la cual estaba llena de rayones y ciertas heridas al parecer recientes-. Esta me la hice hace unos días, no he tenido el tiempo para sanarla bien, me he encontrado con muchos enemigos.

-¿Puedo?.- La mirada de sincera preocupación de Josuke le derritió el corazón ¿cómo podía ser tan bueno si apenas se conocían? Definitivamente se había sacado la lotería con su alma gemela.

-Claro, si no te molesta ¿no necesitas mucha energía para eso?

-No tanta en realidad, con permiso.- Apoyó sus manos en su pierna, dejando que Crazy Diamond haga su trabajo con cuidado. Subió lentamente hasta sus muslos, bastante concentrado en su tarea; era adorable verlo de esa manera, su expresión seria era lo más lindo del mundo, por lo que inevitablemente soltó una risita, intentando ocultarla con sus manos-. ¿Te lastimé?

-No no, todo lo contrario... Eres muy lindo, Josuke. Ni siquiera me conoces y ya haz hecho todo esto por mi.

-Debo cuidar bien a mi alma gemela.- La sonrisa inocente con la que dijo aquello le derritió el corazón ¿en serio era real?-. A-Ah, perdón si me estoy adelantando mucho, es solo que... bueno, creo que siempre te esperé, y, uhm, entenderé si quieres ir más lento, no tengo problema.

-Josuke, está bien.- Con cuidado tomó el rostro del más alto entre sus manos, sonriendo para tranquilizarlo-. Yo también estoy muy emocionada, y... creo que podemos conocernos mejor ¿qué te parece? Me quedaré en la ciudad, así que podríamos salir si gustas, y si estás desocupado ¿bien? Creo que necesito alguien que me de un tour por la ciudad~.

-¡E-Estaría encantado! ¿Paso por ti después de clases?

-Podría ir a buscarte a tu salon si quieres, vamos a la misma secundaria de ahora en adelante.

-Ah, que genial...

-Josuke.- Acarició su rostro con cuidado, acercándose para besar su frente-. Perdón, pero necesitaba hacerlo desde hace mucho rato.

-Ah....- El pobre muchacho combustionó ahí mismo, su rostro completamente rojo por aquella acción. Estaba tan feliz y tan avergonzado al mismo tiempo que no sabía qué decir-. ¿Puedo tener otro?

-Claro que puedes.- No dudó y besó sus mejillas, siguiendo a su nariz, para finalizar con un suave beso entre sus labios. Para Josuke fue lo mejor de lo mejor, y si tuviera una cola estaba segurísima de que la estaría moviendo como loco-. ¿Feliz?

-Mucho en realidad, eres increíble.

-Tú también lo eres, pero ya debo ir a casa así que... ¿qué te parece si nos vemos mañana antes de ir a clases?

-Me encantaría.

-Perfecto~.

-¡Iré a dejarte a casa!

-¿Es una excusa para pasar más tiempo juntos?

-Es para... ¿protegerte de cualquier ataque?

-Sí, eres demasiado lindo.- No pudo evitar soltar una carcajada, tomando la mano del más alto para empezar a caminar-. Está bien, vamos.

.

.

.

.

.

.

.


JoJo things IIOpowieści tętniące życiem. Odkryj je teraz