MALA RUINA

Explosión final

Me lo pasaba en grande tocando en un escenario, soltaba toda mi rabia en cada bolo y me recompensaban por ello. Me adoraban. Me invitaban a cigarrillos, bebidas y algo de drogas. Disfrutaba demasiado de aquello.
Disfrutaba tanto que me olvidé por completo del sueño de Clara, me olvidé de ella. Ni siquiera me percaté de lo mal que estaba.
Hasta aquél día que me desperté aun sedado tirado en medio de su casa. La busqué por todas partes, todas las habitaciones, y no estaba. El baño estaba cerrado. En su cuarto, habían tirados algunos botes de pastillas y alguna que otra jeringuilla vacía. En el momento lo supe. Abrí el baño golpeandolo con todas mis fuerzas y allí estaba ella. Nunca olvidaré su cara. Demacrada, cubierta de vómito seco. Todo tirado por ahí. Ella no respondía.
Intenté llamar a un amigo. Pero como no, seguía drogado.
Cogí el cuerpo de Clara, ni siquiera latía su corazón, estaba fría, muy fría. No se cuanto tiempo llevaría ahí, mucho, eso seguro.
Fui con su cuerpo inerte en mis brazos al hospital mas cercano lo más rápido que pude. Los médicos la alejaron durante un tiempo de mi. Y yo, en la sala de espera, pensé en sus besos, su dulzura, lo preciosa que estaba enfadada, el olor de su cuerpo y las veces que nos acostamos juntos.
Me sentí un gilipollas. Por lo haberla cuidado como hizo ella conmigo, por no haber pensado en ella. Por no poder devolverle todo lo que hizo por mi durante ese año. Ella era la luz que nunca vi.
No tardaron en darme la noticia de que había fallecido por sobredosis. Si yo solo...la hubiera ayudado...
Descompuesto, volví a su casa. Me senté en su cama y la oli de nuevo.
Lei esa carta que yacía sobre la mesilla.
"Lo siento Dan" comenzaba " Pero no puedo hacer nada. Nadie puede ayudarme, y menos una panda de drogatas, eso también va por ti. No puedo más, todo se ha ido a la mierda, igual que yo. No te sientas culpable, llevaba esto mucho tiempo dentro. Era de esperar. Igual este no es el mejor momento para decirte esto pero te quiero Dan, te quiero desde hace mucho. Pero ahora, todo ha terminado, te pido que lo olvides, que me olvides. Tienes toda una gran vida por delante como músico. Se lo que te gusta tocar con los vomitivos. Podéis seguir sin mi, estoy segura. Vive y demuestra tu rabia al mundo entero. Adiós. Clara"
Ese día en el ensayo, anuncié su muerte pero no pareció importar nada. Ya hablaban de encontrar nuevo batería.
Me largué de ahí con el alma rota. Con la carta de Clara en el bolsillo y un montón de dinero que gasté en heroína.
Entonces me convertí en uno de esos yonkis que vagabundean las ciudades, que se sientan en esquinas por donde nadie quiere pasar, lleno de mierda. Me olvidé de la música, me olvidé de todo. Solo pensaba en no pensar en ella y no lo conseguía. Me drogaba, no sentía nada, cabeceaba, despertando con la imagen de su sonrisa. Así pase otro año, cada vez peor. Arrastrando mi cuerpo lleno de droga y alcohol. Sintiendome cada ve peor.
Y aquí estoy ahora. Bajo un puente donde he estado este ultimo tiempo. Sin fuerzas para seguir. Ya no tengo rabia, ya no tengo nada.
Escribo esto para dejar constancia de que he vivido. Pese a saber que igual nadie lo lee. Aquí queda escrito.
Lo siento Clara, por no darme cuenta, por dejarte morir y por no saber seguir adelante.
Asi que, con mis pocas pertenencias y esta libreta encima del puente, acabaré, eso que debí dejar que mi madre hiciera conmigo hace mucho mucho tiempo.
Moriré como ella, pero sin ella, con su carta entre mis manos y un te quiero que nunca podré decir.