Alpha Heirs (l. s.)-Omegaverse AU

VIII

Louis estaba de costado de pie mientras se miraba al espejo, con un puchero.

Tenía ya cuatro meses de embarazo y su vientre estaba demasiado hinchado como para que fuera tan sólo un bebé.

Tocó sus brazos y vio que estaban un poco más rellenos de lo que estaban usualmente.

Soltó un bufido llamando la atención de Harry que estaba en la cama, viendo su celular.

—¿Qué pasa amor?

Harry se había mudado a la habitación de Louis después de varias súplicas del castaño con él y con sus papás. Poniendo de excusa que su embarazo le exigía la total atención de su Alfa.

Y, a pesar de que Harry no lo había marcado, y de que sus papás sabían que no era indispensable, cumplieron el berrinche de su hijo para que se sintiera más cómodo estos nueve meses en los que tendría a un bebé dentro de él.

—Estoy gordo— murmuró triste.

Harry sonrió y rodó los ojos. Se puso de pie y caminó hacia Louis abrazándolo por detrás, posando sus manos en su pancita.

—No estás gordo, estás embarazado. Y aquí— acarició un poco —está nuestro bebé creciendo. Necesitas comer mucho para que este bebé nazca sano y fuerte.

—Pero es que así ya no te voy a gustar. Y por eso no me tocas— sollozó.

—No te toco porque no quiero lastimarte, bebé. Necesitas cuidarte y yo también tengo que cuidarte. Eso no quita que me gustes de la forma en la que quieres gustarme, pero tengo que mantenerme tranquilo.

Louis asintió resignado y recargó su cabeza en el pecho del rizado.

—Pero en nuestro celo si me vas a tocar, porque estoy embarazado, muy hormonal y si mi celo se une a eso, me voy a sentir muy triste si mi novio no quiere hacer nada.

Harry soltó una carcajada sabiendo que Louis estaba usando el chantaje emocional con él, como lo ha estado haciendo durante los últimos dos meses, viendo que si funcionaba.

—Lo voy a pensar, ahora, a la cama que ya es muy tarde y debemos dormir.

...

—Harry— murmuró Louis tocando el hombro de un Harry profundamente dormido a su lado —Harry.

Volvió a murmurar y está vez sacudió un poco a Harry para poder despertarlo. Rodó los ojos al ver que no funcionó.

—Harry, el bebé tiene hambre— dijo un poco más fuerte.

—Son las cuatro de la mañana Louis, estoy seguro que el que tiene hambre eres tú y no el bebé— murmuró sin abrir los ojos.

—Harry...

—¡¿Qué quieres Louis?! — dijo incorporándose en la cama y con un tono algo fuerte. Vio los ojos de Louis cristalizarse y en seguida se arrepintió de hablarle así —perdón amor, no quería gritarte, es solo que... — suspiró —el bebé siempre tiene hambre a las cuatro de la mañana y estoy muy cansado. — suspiró —Pero no importa, yo te traigo lo que quieras. ¿Qué quiere comer hoy el bebé?

—Fresas con chocolate— murmuró bajito secándose las lágrimas.

Harry asintió y se puso de pie para ir a la cocina por lo que Louis le pidió para "el bebé".

—Acurrúcate mientras voy por las fresas. No tardo— Louis asintió y tomó la almohada de Harry para acurrucarse con ella, poniendo una mano en su pancita acariciándola.

—¿Ves lo amoroso que es papá con nosotros, bebé? Creo que mejor papá no pudiste haber conseguido. Aunque, claro, papi será mucho más genial- sonrió.