82.

6.7K 686 1.8K
                                    

Isabella Zabini

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.




Isabella Zabini.

Empecé a caminar saliendo de las mazmorras hacia la torre de Astronomía donde vería a Scorpius como habíamos acordado de vernos. Sin hacer mucho ruido empecé a caminar por los pasillos con esperanza de no encontrarme algún prefecto o profesor.

Me asuste al ver una luz que había iluminado un poco el pasillo, pero me di cuenta que era yo. Una pulsera que tenia en mi muñeca estaba brillando, fruncí el ceño. No me acordaba de esta pulsera, humedecí mis labios. Dejo de iluminar.

Le pique a mi pulsera, esperando que volviera a iluminar, pero no. no se ilumino, hice una mueca y no le tome mucha importancia ya que seguí caminando.

Camine hasta la torre de Astronomía para subir hacia donde él estaría. Pero estaba un poco oscuro así que necesitaba algo de luz. Saque mi varita que traía conmigo.

Lumos.—murmure para aluzará.

Abrí la puerta entrando, vi a Scorpius de espalda pero al escuchar el ruido de la puerta se giro sobre sus talones viéndome.

—Isabella...

—Hola..—murmuré acercándome y pronuncie el contrahechizo.—Nox.

—Pensé que te habían atrapado.—soltó una risita.—ya iba a ir por ti.

—Bueno, tarde un poco por que tenia que ver si no habían prefectos.—me puse a su lado viendo el cielo.—¿Ya tienes rato aquí?

—Un poco.—murmuro.—Me alegra que hayas venido.

Gire mi cara viéndolo mientras sonreíamos los dos.

—¿Me permites tu mano?—me pregunto, asentí extendiéndosela, el la agarro con delicadeza volteándose quedando frente a mi.—Se que me he disculpado mucho contigo, pero de verdad agradezco que estés aquí y que seamos mi amiga.

Me acerque a el abrazándolo por la cintura escuche como soltó una risita y me rodeaba con sus brazos.

—Ya te he dicho que no siempre tienes que disculparte, pero eres muy terco.—me reí.—Te perdono, Scorpius. Todos cometemos errores y aprendemos de ellos.

—Tienes un gran corazón, Isabella. No te merezco, ni a ti ni a tu amistad... pero has decidido perdonarme a pesarme de todo, cuando yo pensé que te había perdido para siempre.

—Tranquilo, todos tenemos problemas y no pensamos muy bien antes de hacerlas.—murmure.—Eres importante para mi, agradezco de tenerte.

Me separe un poco volteándolo a ver, el acaricio mi mejilla.

—Eres  y siempre serás mi estrellita.

Saque mi labio inferior sin despegar mi mirada con la de el, se inclino hacia mi oído para susurrar a lo bajo:

¿Y si eres tú? |Scorpius Malfoy| [#2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora