Té negro(Levi ackerman y tu)

Capitulo 5

Giselle

Las interacciones nunca fue realmente mi fuerte, abrir mi mente y mis emociones a otros mucho menos, siempre que las emociones se volvían confusas simplemente me limitaba a mirar por la ventana por horas intentando aclararlas, siempre era mas fácil mantenerme neural, intentar que nada me afectara, no apegarme nunca a nadie para no sentir el dolor de la perdida.

La perdida, la muerte, la distancia, cosas que toda la gente tenían en común, un destino único que compartir, y ahora no se sentía igual, no podía mantenerme neural ante las emociones que en mi nacieron y el la posibilidad de no tenerla entre mis brazos de una manera desconocida, de una manera nueva.

Todos esto era como mirar, como sentir estar en una escena en puesta de Giselle, donde todo era melodramático.

Mi madre siempre amo Giselle, mirar a los bailarines de ballet interpretar la obra con movimientos sutiles y suaves, donde una flor es la que decidía todo, mi madre, cuanto la amo,  la calidez de su sonrisa y lo reconfortante de sus abrazos en los días lluviosos donde la luz se iba y la manera en que acariciaba mi cabellera para tranquilizarme y un beso sobre mi frente.

Ante la situación que estaba pasando, no hay mejor que visitarla, recibir un consejo por parte de ella nunca estaba de mas, sin importar si me regañaría, con un ramo de flores y una sonrisa reconfortante ¿Cuanto tenia sin verla? ¿Un mes? y desde aquel beso en mi oficina ya había pasado una semana, una semana donde en ocasiones ella me evitaba y otras me agradecía por el detalle, aunque sigo sin saber cual maldito detalle, yo aun no le compraba nada, pues, a mi pensar, si le compraba algo se lo daría en sus manos y no había necesidad de eso ahora, no quería que pensara que intento comprar su amor, pero lo mas raro de todo, es que, rara vez, encuentros post it en mi oficina, pegadas al monitos de la computadora y también ocultas por todo el lugar, post it que me decían una cosa, que me afirmaban que podía tener una oportunidad y la manera en la que me hablaba, me tocaba la simple forma de interactuar conmigo decía otra, y la manera en que miraba su celular con ternura otra totalmente distinta, y eso me mantenía mas confundido ¿Y si estaba jugando conmigo?

No, ella no es así, ella no juega con las personas.... pero... ¿porque lo hace?

Al llegar a aquella casa de fachada blanca y jardín impecable en compañía de Aragon, lo primero en recibir no fue lo que imaginaba, no era un abrazo y un "¿Como estas hijo?" por parte de ella, pedirme que entrar mientras colocaba las flores en agua, no lo que recibí fue un fuerte tirón de oreja que me obligaba a entrar hasta la sala, donde una madre furiosa me miraba.

Mas con decepción que con enojo ¿A cuantas personas le había dicho Isabel y ___ sobre lo de casarme con ella? se suponía que ya estaba bien con ____ y que lo estábamos intentando como personas normales, ser amigos, novios y casarnos.

—¿Pero quien se cree joven para estar llegando como si nada después de un mes? Ni siquiera una llamada a tu madre, ¡¿Y COMO ES ESO DE QUE TE CASAS Y NO SABIA!? ¿Quien es ella? ¿Porque no sabia nada?

Tras ella se podía ver a Isabel riendo, oculta tras el baldaran de las escaleras, esperando el momento adecuado para poder correr tras Aragon y llevarlo a su habitación.

—Y tu jovencita, sera mejor que subas a tu habitación si no quieres sufrir un regaño.

No hay motivos para decir lo que ocurrió con ella ¿Cierto?

—LEVI JOVENCITO ACKERMAN, TU PADRE ESTARIA FURIOSO SI SE ENTERA LO QUE HICISTE ¡¿QUIEN TE CREES?! AHORA RESULTA QUE EL SEÑOR PUEDE DECIDIR LO QUE LAS DEMAS PERSONAS QUIENEN PARA SU FUTURO, SERAS IDIOTA, SOBRINO DE KENNI TENIAS QUE SER.