Degenerates | Minshua

ILYSB*

Junhui tenía razón; la gente seguía con su vida y cuando habías encontrado al indicado, las cosas mejoraban eventualmente. Era inútil para Jisoo aferrarse a un amor desgastado. Ahora, Jisoo podía mirarse al espejo y notar que su mirada había cambiado. 

Jisoo buscó en su armario, decidiéndose por un suéter de tortuga color crema y un abrigo del mismo color pero tonalidad distinta. Se contempló por un rato en el espejo, era la primera vez que vería a su ex esposo después de mucho tiempo. Escuchó que Jeonghan había dado a luz a un saludable varón, y si tenía la oportunidad, Jisoo deseaba felicitarlos una vez más -esta vez, honestamente desde el fondo de su corazón. Escuchó el familiar claxon del carro de su novio, y Jisoo se asomó por la ventana donde su rosa amarilla se encontraba rebosando de vida. Se apresuró a salir de su habitación para encontrarse a Seungkwan cerca de la puerta, con una amplia sonrisa. 

"Deberías mudarte con Junhui a este punto," Seungkwan dijo pícaramente, y Jisoo se acomodó el abrigo sobre. "Quiero decir, ustedes están básicamente el uno sobre el otro 24/7."

Jisoo se acomodó el flequillo a un lado antes de tomar la perilla de la puerta. "No es cierto," refutó, pero sabía que nunca podrá ganar una discusión con su amigo. "Además, no tengo el derecho de sólo mudarme y ya-"

"¿Así que sólo estás esperando?" Seungkwan volvió a molestar, y Jisoo sólo trató de esconder el sonrojo en sus mejillas, abriendo la puerta. "Nos vemos luego," Jisoo se despidió, pero antes de marcharse Seungkwan lo sostuvo del brazo. "¿Estás seguro que estarás bien?" Seungkwan reafirmó, "¿Mingyu asistirá?"

Gentilmente, Jisoo se sueltó del agarre de su amigo. "Estaré bien, no te preocupes. Y gracias," Jisoo aprovechó la oportunidad para demostrar su gratitud por primera vez, porque realmente estaba agradecido con Seungkwan. Su amigo lo atrajo para un abrazo. Había algo bastante maternal en Seungkwan, y a veces Jisoo creía que se debía a que su amigo había sido criado por una madre soltera. Jisoo admiraba a la madre de Seungkwan -ella era independiente y fuerte- un modelo a seguir para alguien como Jisoo quien había sido abandonado en un orfanato a muy temprana edad. Seungkwan lo despide por última vez, deseándole buena suerte y haciéndole burla por el hombre afuera esperando así que Jisoo terminó marchándose con una sonrisa. 

"Buenos días," Jisoo saludó mientras toma el asiento de copiloto. Junhui le sonrió cálidamente. "Buenos días, ¿estás listo?" Jisoo asintió impaciente, abrochando el botón de su abrigo. "Por supuesto. Es mi primera vez luego de mucho tiempo yendo a un viaje de campo. La última vez que fui a uno fue en la universidad," Jisoo comentó animadamente mientras Junhui comenzaba a conducir. A Jisoo siempre le gustó ir en el asiento del copiloto porque amaba contemplar los paisajes.

"Bueno, es más como un viaje de trabajo ya que fue organizado por la corporación Kim -una pequeña muestra de gratitud por el increíble trabajo del último proyecto. Han decidido firmar un consorcio con nosotros para futuros eventos," dijo Junhui orgullosamente, y Jisoo encontró adorable la forma en que la mirada de su pareja se iluminaba. Jisoo rió suavemente y Junhui volteó a verlo. "¿Qué es tan divertido?"

Jisoo negó rápidamente. "Nada, sólo creo que eres muy tierno a veces." Junhui pudo haberse ahogado por aquella sorpresiva confesión de no ser porque estaba manejando. "¿Te estás sonrojando?" Jisoo molestó, acercándose para inspeccionar el rostro ajeno y Junhui no pudo resistir aquellos enormes y bellos ojos sobre él. Junhui aparcó abruptamente el auto a la orilla de la carretera en medio de la nada antes de desabrocharse ansiosamente el cinturón mientras Jisoo se encontraba confundido por la repentina acción. "¿Qué ha-?"

Junhui lo tomó del cuello, atrayéndolo en un ansioso beso, inhalando cada aliento de Jisoo, y tomándolo por sorpresa, Jisoo se encogió en su lugar, enterrando su cabeza en el amortiguador. Batallaba para respirar. Junhui se movía rápido, por todos los lugares; cabeza, nariz y mejillas restregándose contra Jisoo. Sentía la áspera textura de los dedos ajenos sobre su cuello, impregnandose en su piel, perdiendo el control. Sin pensarlo, Jisoo se alejó, golpeando con ambos puños el duro pecho de Junhui. "Para-"