Mago Supremo: Volúmenes 4 y 5

Capítulo 186. Clasificaciones

Siendo el último trimestre, los estudiantes de la Academia White Griffon ya no recibirían boletas de calificaciones ocultas. Se clasificarían de acuerdo con sus calificaciones, permitiendo que todos en el Reino sepan sobre su desempeño.

El decreto real que suspendió el tercer examen desesperaba a muchos jóvenes. La cooperación de repente no tenía valor. Los puntos extra se habían vuelto inesperadamente más valiosos que el platino, volviendo amigo contra amigo y hermano contra hermana.

Todos harían un esfuerzo adicional tratando de anotar la mayor cantidad posible durante las últimas dos semanas, con la esperanza de mejorar su clasificación, aunque sólo fuese por una posición. Clases y pasillos convertidos en campos de batalla, siguiendo el principio de que el ataque es la mejor forma de defensa.

Durante las lecciones prácticas, sabotear a los vecinos de uno mismo se elevó a una forma de arte, mientras que cualquier estudiante que caminara solo, sin importar la hora del día, estaba destinado a ser atacado.

Lith apenas notó tales inconvenientes. Mientras realizaba las rondas matutinas para la especialización de Sanador, sus únicos compañeros eran los miembros de su grupo.

Durante las clases de Cristales Magicos, la Profesora Farg demostró tener un ojo agudo y aterrador y una personalidad despiadada. Venció a los estudiantes en su propio juego.

Tan pronto como entendió lo que estaba sucediendo, cualquiera que encontrara sin trabajar en su piedra preciosa sin una buena explicación perdería algunos puntos. Un par de estudiantes intentaron un ataque coordinado.

Uno de ellos pedía ayuda a la Profesora mientras que el otro usaba un golpe de viento casi invisible para mover las manos de su oponente en un momento crítico del proceso de corte.

El resultado fue que ambos fueron atrapados, perdiendo veinte puntos cada uno que le fueron entregados a su víctima como compensación.

Nadie se atrevió a hacer un movimiento contra Lith durante las lecciones de Forgemaster.

Siempre había sido la mascota de la maestra, pero desde su visita a la Casa Tanash, la Profesora Wanemyre lo había colmado de tantos elogios y atención que se corrió el rumor de que los dos estaban teniendo una aventura.

Sin que el público lo supiera, Wanemyre era parte del círculo íntimo de Linjos, por lo que conocía la toxina anti-mana y también había sido una de sus víctimas. Como muchos de sus colegas, había creído que su mala condición física era consecuencia del ataque de Balkor.

Todavía estaba en duelo por muchos amigos y los efectos duraderos del veneno de los no-muertos sólo la hicieron sentir peor. Wanemyre había sufrido tanto personal como profesionalmente, la mayoría de sus últimas creaciones eran lo que sólo podía calificar como "basura".

Después de ser limpiada de la toxina anti-mana, su destreza mágica y su habilidad Forgemastering regresaron. Wanemyre sabía que todo era gracias a Lith. Entre el sentimiento de gratitud y el deseo de encontrar a los que le causaron tanto sufrimiento, incluso mirar mal a su alumno favorito era suficiente para hacerla restar puntos.

Entre lecciones, las cosas se volverían más cercanas y personales. Lith estando sin una Ballot era de conocimiento público. Varias personas estaban lo suficientemente desesperadas y enojadas como para intentarlo.

Cuarenta fracturas limpias, veinticuatro fracturas conminutas, una docena de conmociones cerebrales, siete pulmones perforados y varios bazos rotos obligaron a la mano de Linjos a revelar la clasificación antes de lo previsto.

Para consternación del Director, Lith había dejado de reprimirse durante mucho tiempo, por lo que sus asaltantes estaban abarrotando las salas del hospital de la Academia a diario.