Remember Me ©

CAPÍTULO 9:

Capítulo 9: ¿La forense y la víctima?

Emma.

Mierda.

Doble mierda.

Y más mierda.

No sé qué carajos hacer, estoy más confundida que nunca; por un lado quiero arreglar todo, decirle a Alex y a Max la verdad y esperar a que mi novio me perdone y para luego alejarme de Max. Y por el otro lado, quiero seguir besando a Max, seguir mintiendo...

Aunque odie mentir.

Y eso no es lo que me preocupa, el problema es que no sé por qué quiero hacer eso. Yo nunca he sido así, de hecho soy todo lo contrario, soy sincera, fiel y de Alex. No entiendo qué me está pasando.

¿Y si quizás no sea mi culpa y sea de Max?

Maldito.

¿Por qué tenías que venir a desordenar lo que por años he mantenido en orden?

¿Tenías que ser tú? ¿¡En serio!?

¿Por qué...?

Lo único que tengo claro es que debo tomar una decisión o mejor dicho, debo tomar la decisión que en verdad es correcta, hablar con la verdad.

Por eso es que le he enviado un SMS a Max para que nos reunamos en aquel parque a donde me envió la primera vez que hablamos....

"—Mañana a las once en el parque central te estará esperando un hombre vestido de negro con una mochila color azul. Sólo tienes que acercarte a él y decirle "vengo de parte de Max", te entregará un paquete y luego tienes que entregármelo a mí..."

¡Joder!

¡Ya basta!

Lo veo acercarse sin muchas ganas hasta que está delante de mí y sin previo aviso envuelve mi cintura con sus manos. Me atrae hacia él y en un movimiento rápido sus labios toman los míos. Reconozco que lo quería detener pero me es imposible ser fuerte ante sus besos.

Aunque no me gustaría que fuese así.

Prometí no volver a mentir. Así que siempre iré con la verdad así no me guste.

Entonces sí, me gustó lo que hizo.

Me separo de él lentamente pero el agarre en mi cintura no deja que me aleje por completo de su cuerpo.

—¿De qué querías hablar? —susurra sobre mis mojados labios.

—Este... —Pongo mis manos sobre las suyas y las aparto para así poder alejarme unos largos centímetros.

Su entrecejo rápidamente se arruga en una muestra de desconcierto.

—Es que yo...pues, quería decirte que... —balbuceo.

—Déjalo, ya lo sé.

—¿Qué? —la interrogante abandona mis cuerdas vocales en un tono alto y sorprendido—; Ya... ¿ya lo sabes?

Lesley...

Si él lo sabe hay una probabilidad de 97% que ella también.