Conociéndote - Luimelia

Capítulo 21

- Cómo esta?

Amelia le habló a la rubia una vez que esta cerró la puerta de la habitación de su hijo

- Aún sigue durmiendo.., al menos no le molesta la herida por lo que se ve

- Bueno pero eso es una buena señal, no?

Luisita se encogió de hombros a la vez que se sentaba a su lado en el sofá

- Eso espero..

- Oye.. -dejó un pequeño apretón en su pierna- que sólo fue un susto y ya

- Lo sé pero me siento un poco culpable sabiendo que le pasó esto y yo no estaba ahí para él

- Cómo que no estabas ahí? Luisita apenas te enteraste fuiste corriendo al hospital, no tienes porqué sentirme culpable. Podría haberle pasado aunque tú estuvieses aquí y aún así no lo habrías podido evitar, esto le puede suceder a cualquiera

La rubia giró su rostro para poder mirarla, apretó sus labios dibujando una pequeña sonrisa y tomó su mano, apretándola entre las suyas

- Gracias..

- Por qué?

- Porque no fui al hospital. Fuimos, juntas, lo cual es muy diferente

La actriz le sonrió mínimamente y ubicó la mano que le quedaba libre sobre la de Luisita

- No iba a dejarte sola en esto.. Además que yo también me preocupé muchísimo cuando supe que algo le había pasado a Teo pero no tenía idea del qué

- Ya.., lamento haberte preocupado

- Pero qué dices? Luisita que si yo estaba nerviosa no me quiero imaginar cómo estarías tú. Es normal preocuparse cuando no lo habíamos visto aún y no sabíamos cómo estaba

- Puedes dejar de hacer eso?

- El qué?

Preguntó frunciendo su ceño

- Dejar de ser tan perfecta y tener una respuesta para todo

- Pfff, estoy muy lejos de ser perfecta - Rió

- Sí claro...

- Oye te lo estoy diciendo enserio eh, que eso de que nadie es perfecto es totalmente real y yo no soy la excepción

- Pues a veces pareciera que no. Porque siempre haces todo para hacerme sentir bien y tienes una respuesta para cada cosa que diga

- Y por qué lo dices con esa cara de enfadadita?

- Pues porque me da rabia que seas tan perfecta, te lo estoy diciendo!

Amelia largó una carcajada al oírla con esa indignación y la camarera no pudo evitar sonreír levemente ante aquello

- Luisita no soy perfecta. Soy sincera que es diferente.. y todo lo que te digo es sólo la pura realidad, a veces eres muy injusta contigo misma y no te das cuenta de lo increíble que eres

Habló encogiéndose de hombros y la otra mordió su labio inferior sin apartar sus ojos de ella

- Deja de mirarme así..

Amelia volvió a hablar tras unos segundos en total silencio

- Me estoy conteniendo para no lanzarme encima de ti ahora mismo..

- Y qué te lo impide?

Preguntó alzando una ceja

- Un torbellino rubio que podría escucharnos y aparecer por aquí en cualquier momento