Capítulo 07.

Magsimula sa umpisa
                                    

«Joder, joder, joder, joder

Ahí estaba Justin Bieber, sentado en su pupitre con la espalda apoyada en el respaldo de la silla y mirándome fijamente con una sonrisa torcida sobre sus labios. Era la última persona con la que decidiría estar en clase de biología. Recé para que no estuviera con él en ninguna asignatura más.

Vi que detrás de Justin, pero en diferente fila, había un sitio libre, así que no dudé en sentarme allí rápidamente, antes de que mis piernas me comenzaran a flaquear de nuevo.

Cuando el señor Naubey se dio la vuelta para escribir en la pizarra, Justin aprovechó para lanzarme una bola de papel. La abrí y leí lo que ponía dentro.

¿No es genial hacer juntos la clase de biología, Dellinger?

Volví a arrugar el trozo de papel, haciendo de él una bola. No le pensaba contestar. No le pensaba prestar la más mínima atención durante toda la hora.

.

La hora pasó rápida, sin más distracciones por parte de Justin y sin más miradas por parte de mis compañeros de clase. Gwen no estaba en esa clase conmigo, pero sí que lo estaba Sally, la simpática y amable de Sally.

―Lexie, ¿puedes venir un momento? ―dijo el señor Naubrey cuando sonó el timbre, haciendo que fuera hacia su mesa.

―¿Pasa algo?

―Creo que, mientras coges el hilo de lo que estamos dando, te iría bien ponerte con alguien para que te ayudara con el temario.

―Oh, claro, sería perfecto ―mentí. 

No quería ponerme con nadie porque, bàsicamente, no conocía a nadie más que Sally y Justin, y con ninguno de los dos me quería poner.

―Permíteme aconsejarte ―dijo el señor Naubrey―: No sé si sabrás quien es Sally Hardwell, pero es un genio en biología.

―Sé quien es, y si puede ser, preferiría no ponerme con ella. Antes de entrar a clase he tenido un pequeño encuentro con ella, y parece ser que no le he caído muy bien.

―Yo puedo ayudarla si quiere ―una voz terriblemente conocida sonó detrás de mí, haciendo que me diera la vuelta y me encontrara con esos ojos mieles que tantas cosas escondían―. Se me da bien biología ―Justin se encogió de hombros.

―Esa es otra opción ―dijo Naubrey―. Aunque parezca increíble, Justin es uno de mis mejores alumnos.

―¿No puedo ponerme con otra persona?

―Vamos Lexie, a mí ya me conoces, soy íntimo amigo de tu hermano. ¿Quién mejor que yo?

Cualquier persona. Pensé, pero no lo dije.

―¿Me queda otra opción?

―Creo que no ―sonrió Justin ante la mirada que nos echaba Naubrey―. Entonces creo que oficialmente soy tu tutor personal en biología.

Suspiré, rodando los ojos y agarrando con fuerza la mochila donde guardaba los pocos libros que tenía. Salí del aula después de haberme despedido del señor Naubrey, pero sin hacerlo de Justin. Bastante le había hablado por lo que llevábamos de día. ¡Ni siquiera eran las nueve de la mañana!

―Hey ―me saludó Gwen con un abrazo―. ¿Cómo ha ido la primera clase en Halensy?

―Empiezo bien con biología.

Nos encaminamos hacia fuera del edificio. Según mi horario ahora tenía cálculo. ¡Genial! 

―¿Qué ha pasado? ¿Te ha dicho algo más Sally?

―No, no es ella ―dije, abriendo la puerta del edificio donde, una hora antes, había estado dando vueltas―. ¿Sabes quien es Justin Bieber?

―Para no saberlo... No encontrarás ni a una sola persona en Halensy que no haya oído hablar de él. ¿Qué te ha hecho ya?

―Se ha ofrecido voluntario para ser mi "tutor" ―hice comillas con los dedos cuando dije la palabra―, de biologia. El señor Naubrey dice que hasta que no les pueda seguir el hilo con el temario que me vendría bien tener a alguien que me ayudara. 

―Vaya, pues sí que empiezas bien, sí ―se rió y le di un pequeño golpe en el brazo.

―¡No tenía otra opción! Era él o Sally.

―Entonces, has hecho una buena elección.

Me reí, quién iba a decir que ella era amiga de Sally.

―¿Tienes cálculo? ―pregunté, esperando escuchar un salir de sus labios.

―Ajá ―suspiré aliviada―, primera clase juntas y sin Bieber, pero con Sally.

―¡Oh, genial! ―ironicé.

Halensy era un instituto enorme, antiguo, pero bonito. Siempre había gente bajando o subiendo escaleras, yendo de aquí para allá por los pasillos, entrando y saliendo de las clases. 

Cuando estábamos a punto de entrar en la clase donde se hacía cálculo, en una esquina vi a Justin besándose con una chica. Una chica morena, con la misma ropa que llevaba Sally minutos antes. Se parecía mucho a ella, aunque, en realidad, era ella.

Con los ojos bien abiertos miré a Gwen, la cual se encogió de hombros, queriendo decir que no sabía nada acerca de ello y que tampoco tenía ganas de hacerlo.

Volví a clavar la mirada en Justin y en Sally mientras que Gwen entraba en clase. Justin se dio la vuelta, mirándome a los ojos y sonriéndome. ¿Qué demonios estaba haciendo? Rodé los ojos y suspiré, negando con la cabeza.

―¡Lexie, espérame!

Fruncí el ceño al oír como Sally gritaba mi nombre. Cuando llegó a mi lado me agarró del brazo, como si fuera su amiga de toda la vida.

―¿Qué quieres, Sally? ―intenté deshacerme de su agarre, pero fue bastante imposible.

―He pensado en ir de compras esta tarde al salir de clase tú, Gwen y yo. ¿Qué dices?

Alcé las cejas, esperando que me dijera que era broma, pero eso nunca pasó.

―Lo siento, tengo cosas que hacer.

Tiré de mi brazo con fuerza, soltándome de ella.

Era nueva en Halensy, no conocía a nadie, pero eso no quería decir que podían hacer conmigo lo que les viniera en gana. 

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Menuda porquería de capítulo me ha salido, pero bueno, algo es algo... ¿Qué os ha parecido? ¿Os cae bien Sally y Gwen? 

PD: Gwen Robbins en multimedia :)

Besitos, Mire.

Blackmailer ➳ j.bTahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon