Lucha por tu vida.

872 94 23
                                    

Comienzo a gritar de nuevo sintiendo el peor dolor físico que había sentido jamás cuando el hierro calienta mis muñecas.

Estaba muriendo, mi tiempo de vida era limitado, milimetrado por un reloj de arena.

Athan pegándose a la pared se acerca a mí e ignorando el calor del fuego y pasando sobre él intenta mover la silla para alejarme del fuego.

Las risas de Hades retumban.

-Sé que no sabes que es lo que sucede, ni quién sea yo-Dice mirándome a los ojos una vez que me ha dado unos minutos más de tiempo entre el fuego y yo. Sus manos están lastimadas por la fuerza sobrenatural que utiliza para moverme-, pero te pido que confíes en que no permitiré que nada malo te pase.

Una fuerza lo aleja de mí, sin darme tiempo a decirle que lo recordaba, y que confiaba más en él que en cualquier otra persona sobre la tierra.

-¡Esto no es divertido!-Dice Hades-Estás haciendo que todo parezca una película de terror.

-Padre, te suplico que la sueltes ella-

-No.

Se arrodilla y pone sus manos en el regazo del atemorizante hombre de ojos oscuros, su rostro escondido en rendición.

Me parece impresionante que haya llegado a humillarse ante su padre por mí. Eso logra que mi corazón comience a palpitar con fuerza.

Aprendí a querer a alguien que desde la perspectiva de cualquiera merecía odio, pero ahora hacia lo necesario para salvarme.

Era exactamente como dijo Perséfone, Él solo había recibido odio. Habría sido injusto esperar algo diferente de su parte.

Pero aún así está arriesgando su vida por mi.

-Te suplico, por favor que en el mínimo índole de compasión en tu corazón puedas perdonarle la vida y soltarla. -Hades cambia su expresión burlona y le presta atención- Todo fue mi culpa, y ella no merece nada de esto. Hazme lo que quieras, destruyeme, carbonizame. Pero deja que ella vuelva a casa.

Hades se pone a su altura y le levanta el rostro.

-Estoy tan decepcionado de ti-Y lo abofetea.

-¡No!-Grito mientras lloro.

-Eres debil-Le dice-. Has flaqueado y echado a la basura años y años de enseñanza. Eres una decepción, una perdida de tiempo.

-No me ocurrirá lo mismo que te pasó con Persefone.

Se acerca a él y lo abofetea aún con más fuerza. Me duele el rostro de tanto llorar.

-Jamás pronuncies su nombre.

-¡Es por ella que te comportas así!-Corre hacia Athan y lo pega a la pared sosteniendo su cuello. Athan patalea, pero no veo que Hades tenga planes de detenerse.

-¡No, por favor!-Intento moverme en la silla pero solo me lastima aún más las muñecas y tobillos.

Veo a Adonis pasar desapercibido a la sala y discretamente se acerca a mí.

-No quiero verte-Le digo entre respingos.

-Vengo a ayudarte-Ignorando el calor punzante del metal toma un alambre grueso y comienza a girar una de las aberturas hasta liberar mi mano izquierda.

Athan lo mira, y esto ocasiona que Hades también lo haga. Así que con su mano restante crea una ráfaga de viento que lo aleja de mí junto con el pequeño alambre que significaba mi vida.

Lo estrella contra la pared y también lo sostiene del cuello. La piel de Athan comenzaba a tornarse magenta y yo ya no encontraba fuerzas para llorar y gritar.

Inframundo Where stories live. Discover now