Jade Wilde Una idiota obsesión.

Despues de la tormenta viene la calma...

Veo que pasan muchos carros de policías, pero todos se dirigen por mi casa. No creo que mis padres hayan llamado a la policía, cuando ellos provocaron esto, especialmente mi mamá.

Veo un carro que se acerca, sus luces tan fuertes me impiden ver quién es, se estaciona más lejos de donde estoy y para el auto.

Mi corazón empieza a latir muy fuerte.

Nadie sale del auto, pero sé que está ahí dentro, siento que me observan. Entro en pánico cuando la puerta se abre.

Sigo sin distinguir quien es, se sigue acercando hacia mí. Tengo ganas de salir corriendo pero ellos tendrían ventaja con el carro así que sería inútil.

Presa del miedo me abrazo fuertemente hasta que la sombra se hace visible. Reconozco ese rostro y cuando se va acercando cada vez más, me levanto y corro hacia él.

En estos momentos es el único que no me juzgaría, no puedo creer que siga aquí, me abraza fuertemente y la emoción me provoca que llore desconsoladamente, me sujeta fuerte y me acaricia la cabeza, no puedo parar de sollozar en su hombro y me atrae más hacia él.

 

 -Calma muñeca, te dije que siempre estaría contigo y para ti.

Dylan es la última persona que creí que vería en estos momentos y me alegro de que esté aquí, de que me buscara y me encontrara.

Me separa de él acariciando mis mejillas. –April, no vuelvas hacerlo. No sabes lo preocupados que estábamos todos.

-No me importan todos, ahora solo me alegro de que tú seas el que me encontrara. –mis lágrimas siguen saliendo y las expulsa con sus pulgares, me da un beso en la frente y me atrae de nuevo hacia él.

 Nos quedamos así hasta que paro de llorar y me alejo de él.

-Por favor no me lleves a casa, no les digas que me has encontrado. -digo suplicándole.

-Pero se van a preocupar April, no hagas esto por favor. –me dice acariciando mis mejillas.

-Por favor.

-¿Y dónde quieres que te lleve? –dice sin otra opción.

-No lo sé. –miro al piso. –un hotel estaría bien, no te preocupes yo traje un poco de… -me tapa la boca con un dedo.

-No te dejaré en un hotel, vendrás a mi casa, y tranquila que mi madre no le dirá nada a tus papás, te lo prometo.

-Oh por favor, no quiero molestar, enserio. Un hotel estaría bien. –sigo suplicando. –solo te pido que me lleves a uno porque no hay taxi a esta hora, por favor Dy.

-April, no te llevaré un hotel, por el amor de Dios. No te dejaré sola ahí. –Frunze el ceño.

-Entonces quédate conmigo en el hotel, pero por favor no le digas a nadie que me encontraste. –cierro mis manos en modo de súplica. –por favor Dy, eres el único que me puede ayudar ahora.

Lo piensa un rato, se coge la cabeza con ambas manos y suspira-De acuerdo, le avisaré a mamá que me quedo con Kyle esta noche. –me sonríe rendido y lo abrazo.

-Muchas gracias, enserio. Eres el mejor.

Buscamos el hotel más barato y nos decidimos por el Green Hotel que es de 3 estrellas. No es mucho pero es suficiente para mí.

 Dylan se está bañando,  me trajo una bolsa con algunas compras; Un pijama, una falda y una blusa, cepillo de dientes e interiores. Esto me hace sonrojar solo de pensar en cómo los consiguió exactamente de mi talla.