Después de que esa persona se fuera de su vida estaba sola.
Pasó toda su adolescencia con ese hecho, y es que su condición la obligaba a no entablar relaciones tan íntimas, haciendo que esa soledad creciera hasta hacerla una chica fría y dura ante...
Al día siguiente fui al instituto en el coche de Rosalie, como acostumbré a hacer esta semana pasada.
Ahora estábamos yendo hacia el aula de biología, y notaba a Edward un poco inquieto.
─ Que suerte que no puedo escuchar tus pensamientos, porque ahora tu cabeza tiene que ser un nido de pájaros. ─ Bromeé ─ ¿Te puedes relajar, Edward? No va a pasar nada.
El cobrizo me miró de reojo y apretó la mandíbula.
─ No es eso...se que me podré contener, estoy confiado con ello.
─ ¿Entonces que es?
─ Que quiero volver a verla ─ le miré extrañada como si tuviese cuatro ojos ─ No me mires así. Quiero hacer las cosas bien, no comportarme como un idiota.
─ ¿Entonces?
─ Voy a presentarme correctamente y a hablarle ─ al llegar al aula me agarró de un hombro antes de entrar ─ Así que te pediré que no te sientes a mi lado
Dudé en aceptar. Le miré a los ojos viendo que estaba confiado, entonces suspiré y asentí
─ Pero estaré detrás y atenta en todo momento
Edward me sonrió y me dio un abrazo corto.
─ Gracias Gala
Le sonreí y entramos al aula, donde ya varios alumnos estaban sentados. Edward se sentó en su sitio de siempre y yo detrás de él. A los pocos minutos vi entrar por la puerta a Isabella junto con Eric mientras que Mike le molestaba.
La chica lo primero que hizo fue mirar a Edward, quién ya la estaba mirando, y podría jurar que ella estaría viendo esa escena en cámara lenta y con la música de los ángeles.
Me reí levemente por mi pensamiento, haciendo que Edward se girara a mirarme con los ojos entrecerrados.
─ Lo he oído
─ Pues no te metas en mi cabeza ─ le dije con una sonrisa jugona. ─ Anda, que aquí viene. Se un caballero.
Isabella se sentó en su sitio y Edward entró en acción.
─ Hola. La última vez no tuve la ocasión de presentarme. Soy Edward Cullen, tu debes de ser Bella
La muchacha le miró levemente sorprendida.
─ Ah... sí
El profesor empezó la clase pidiéndonos que clasificasemos las células. Empecé ha hacerlo con mi compañero de mesa a la vez que estaba atenta a la pareja de enfrente
Isabella dudó un poco, pero le habló al cobrizo.
─ Desapareciste un par de días
─ Si, estuve fuera de la ciudad por temas personales.
Me reí levemente. Ya se lo había dicho a Isabella, ¿se esperaba otra respuesta? ¿Que le había mentido?
Edward me miró por encima de su hombro mirándome con los ojos entrecerrados habiendo escuchado mi risa
─ ¿De qué te ríes? ─ me preguntó mi compañero de mesa
─ De las células. Mira que son feas y hasta el hombre más guapo del mundo está formado por ellas. ─ inventé rápidamente
El chico me miró extrañado.
─ Eh, lo digo enserio. Mi belleza por dentro al final son esas células de formas raras ─ dije altanera intentando bromear y que deje de hablarme
─ ¿Gala Jones bromeando? La primera vez desde que apareciste ─ dijo sorprendido.
Le miré con una ceja alzada.
─ Forks no tiene gente interesante, no me culpes por ello
─ ¿Y los Cullen si? ─ preguntó a la defensiva
─ ¿Acaso te importa, chico? Ni siquiera se tu nombre ¿Qué más te da? ─ dije mirando a través del microscopio
Luego de eso no volvimos a hablar en toda la hora de clase, seguramente se habría molestado o incomodado, ni me importa.
Lo que si me importa era que Edward pudo controlarse y tener una conversación "decente" con su Tua Cantante, lo digo entre comillas porque empezaron a hablar del clima y de la llegada de Isabella, una conversación un tanto rara
Cuando tocó el timbre recogí mis cosas y me acerqué al dúo.
─ Isabella, hola ─ dije simpática.
─ Hola Gala ─ me respondió con una de sus sonrisas apretadas.
Después de nuestra conversación en su habitación las cosas entre nosotras estaban más tranquilas.
─ Te veo en el comedor ─ le dije a Edward
─ Sí, claro ─ me respondió tranquilo
─ Y a ti en la comida. Hoy toca comer en mi casa ─ me dirigí a la chica
─ Sí, cierto.
─ ¿Qué quieres comer? Si se lo pregunto a tu padre me dirá que está bien con cualquier cosa, así que elije tú
─ Hnmm...no sé, lo que tú quieras
Ante su respuesta apoyé mi cabeza en el hombro de Edward dejándome caer en él. Suspiré divertida
─ Eres igual a tu padre... Isabella eso no me sirve ─ le dije volviendo a una posición normal
─ Pues...bacon con huevo y patatas fritas
─ ¡Bingo! Eso ya es una comida ─ Bromeé ─. Eso haré entonces.
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En el comedor estaba sentada con todos los Cullen. Edward había llegado un poco más tarde por haber acompañado a Isabella hasta su taquilla.
─ Entonces, ¿ha ido todo bien? ─ preguntó Alice
─ Sorprendentemente sí ─ dije dándole un codazo a Edward, quién estaba sentado a mi lado.
─ Ya dije que no pasaría nada ─ dijo mirándome molesto ─ Lo que si pasa es... ¿Qué ha sido eso en biología?
Le miré extrañada
─ ¿El qué?
─ La conversación con tu compañero de mesa.
─ Blagh...─ asqueé rodando los ojos.
─ Me reí de ti e Isabella y él me escuchó, para disimular dije que las células eran feas y bromeé con la belleza y blah blah ─ expliqué
─ ¿Y qué pasó? ─ preguntó Emmett divertido
─ Que el chico se sorprendió por la broma y Gala se molestó. Al final insultó a la gente de Forks y dejaron de hablar.
─ No los insulté, simplemente dije que no eran interesantes
─ Dentro de lo que cabe tiene razón, no lo son ─ me defendió Rosalie
