05. Monedas para pagar favores

58.4K 3.6K 506
                                    


—Espera, creo que no estoy entendiendo ¿dormiste con una mujer?

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

—Espera, creo que no estoy entendiendo ¿dormiste con una mujer?

—Lo haces sonar como si fuera mi más grande hazaña en años—murmuro escuchando la risa al otro lado de la línea. Pasan un par de segundos mientras avanzo en la fila de la cafetería donde suelo desayunar, hay al menos cinco personas delante de mí y si fuera solo yo probablemente me habría ido y solo esperaba la hora del almuerzo para pedir algo, pero está Keyra.

Honestamente no pensé que ella realmente estaría allí cuando yo despertara, insistió tanto en irse anoche que creí que se iría en cuanto saliera el sol huyendo de mí, pero no lo hizo o tal vez lo planeó, pero le ganó el sueño porque cuando desperté estaba dormida incómodamente en mi escritorio.

—¿Cómo que lo hago sonar...? Es tu más grande hazaña desde que te conozco, podría haber pensado que eras gay, pero ni siquiera ligas con hombres—Grayson corta mi divague mental finalmente calmando su risa.

Grayson Arrende es uno de los pocos amigos que hice en la facultad de arquitectura, justo antes de abandonar la carrera para decantarme por ser piloto. No es que no me gustara esa carrera, pero definitivamente no había ninguna emoción en diseñar y perfeccionar planos cuando podía guiar un avión por el aire.

Tampoco es que haya demasiado emoción cuando llevas la vida de cientos de personas en tus manos, pero hay una diferencia abismal entre ambos oficios.

—Imbécil—Ruedo mis ojos avanzando cuando otro cliente es atendido en la fila.

—Como sea, estoy entendiendo que ella solo durmió en tu casa, pero no tuvieron sexo, así que en realidad no es una tan grande hazaña—Avanzo en la fila mientras resoplo.

—No la conozco, es amiga de Kate, fue un accidente que la encontrara allí.

—Un accidente, claro—ironiza y puedo escuchar el ruido de algo estrellándose—. Dame un minuto. ¿Campeón, qué rompiste?

—Nada, papi

—Escuché algo estrellarse.

—El avión se cayó, pero está bien

—¿Y tú?

—Estoy bien—Grayson hace un sonido bajo antes de volver al celular para hablar:

—Entonces, esperas que crea que realmente solo durmieron—Vuelvo a rodar mis ojos avanzando otro par de pasos y ya solo quedan dos personas delante de mí.

—Ni siquiera durmió en la cama, imbécil, cuando desperté estaba en el escritorio.

—La espantaste.

—O simplemente no quiere tener nada que ver conmigo.

—Pero estoy seguro que no la hubieras invitado a la cama si no te interesara.

Quédate otra nocheWhere stories live. Discover now