Desafío 63: Resultados.

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Buenas tardes, sensuales seguidores

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Buenas tardes, sensuales seguidores.
Antes de dar paso a los resultados queremos agradecer a la participación que tienen con este apartado, el equipo de novela juvenil valora mucho su participación activa. 
En esta oportunidad la competencia estuvo muy reñida, pero finalmente dos participantes lograron alzarse esta semana y a continuación se los presentaremos. 

¿No fuiste seleccionado en esta oportunidad? ¡No te preocupes! Mañana estaremos lanzando un nuevo desafío en el que podrás participar. 

Ahora si, sin más preámbulos, les presentamos a los ganadores.

*La forma en la que se muestran los participantes no tiene un orden en específico.

***

Celine_ChR

Cuando me di cuenta de que era real tu partida, cuando sentí el peso de no volver a ver tu sonrisa cada mañana, no pude con ello. Se me oprimió el pecho mientras mi visión se nublaba.

Sé que te había despedido con una sonrisa, y que te deseé buen viaje antes de cerrarte la puerta del taxi. Pero fue cuando te vi alejarte que todas esas emociones cayeron sobre mí, aplastándome.

Corrí desesperadamente —aunque te había perdido de vista—, esperaba que algún semáforo te hubiera detenido por mí. Me pregunto cómo fui tan estúpido como para creer que podría darle un fin a mis sentimientos con tu partida. Pero eras la novia de mi hermano, nunca me atreví a insinuarme.

Tuve citas con otras chicas, incluso mantuve una relación por unos meses, pero no se sentía igual. Cuando él y tú rompieron, decidí respetarlos y mantener distancia... hasta hoy.

Me encontraba corriendo como desquiciado, con el corazón en la mano, pensando en lo que podría decirte. El semáforo que tal vez te hubiese detenido, ahora me detenía a mí. Entonces, te vi a unos metros. Podría reconocerte de espaldas en cualquier circunstancia. Te había observado marchar tantas veces... No podía verte partir de nuevo, así que corrí, atravesé por la avenida principal y me gustaría decir que te alcancé. Pero unas luces me cegaron y de repente estaba en otro lugar.

Estabas conmigo, sujetabas mi mano. ¡Cuánta felicidad! Pero llorabas, a pesar de estarme diciendo esas palabras que siempre soñé oír tuyas, llorabas sin control. La máquina dejó de marcar mis latidos. Llorabas en una esquina viendo como los médicos hacían de todo. Luchaba por quedarme, por volver contigo. Y lo logré.

Prometo decirte cara a cara lo mucho que te amo, Lucy, solo espera un poco. Pronto despertaré.

***

angiebadom

Título: Promesa.

Mi corazón bombeaba como loco, el frío aire del invierno golpeaba mi rostro y creaba escalofríos en mi piel mientras corría hacia el aeropuerto para alcanzarlo.

Las luces de los autos a mis costados encandilaban mi vista, y las lágrimas que empezaban a rodar por mis mejillas no estaban ayudándome.

Bea me mandó un mensaje cuando estaba con Nick, y tres palabras fueron suficientes para dejar mi estúpido juego de celos y darme cuenta de que todo eso fue un error.

"Dylan se va"

Ni me despedí de Nick, solamente pedí un taxi para llegar al aeropuerto, pero para mi buena suerte el taxi se pinchó una llanta y terminé corriendo para llegar.

Aceleré el paso, el frío me estaba matando, pero valió la pena, tres minutos fueron suficientes para entrar en el aeropuerto y escabullirme entre guardias para llegar a la sala de espera.

Paré en seco al notar su silueta, su cabello despeinado y su espalda me hicieron identificarlo entre la multitud.

—Idiota —susurré con una sonrisa.

No dudé ni un minuto para gritar con todas mis fuerzas.

—¡Dylan! —mi voz se cortó mientras ese atractivo rostro cruzaba miradas conmigo. Sus ojos grises irradiaban sorpresa.

Tenía que decirle que había estado mintiendo.

Sus pasos lentos me dejaron sin aliento, y cuando se detuvo frente a mí me robó un suspiro.

—Julie... —un silencio nos inundó.

—Yo... —no sabía qué decir. —Entre Nick y yo no hay nada... —él me calló con sus dedos entre mis labios con una sonrisa suave.

—Lo sé... los dos fuimos unos idiotas inmaduros—apoyó su frente contra la mía.

—Yo nunca te odié —las ganas de llorar volvieron a mí.

—Ni yo... —sentí su respiración cálida en mi piel.

—No te vayas... —rogué.

—Tengo que hacerlo —hizo una pausa. —Pero volveré, lo prometo...

***

Desafíos de Novela JuvenilWhere stories live. Discover now