-Buena chica —felicitó el Maestro Fu— ¿Quieres un cheque o transferencia?
-Transferencia por favor —dijo Gu Ning.
Sacó su tarjeta bancaria y le dijo al Maestro Fu su cuenta.
-Claro —respondió el Maestro Fu.
Llamó a alguien para transferir el dinero de inmediato.
Después de unos minutos, Gu Ning recibió un mensaje que mostraba que los 30 millones de yuanes habían sido transferidos con éxito, entonces, Gu Ning le entregó el jade al Maestro Fu.
-Señorita, ¿quiere cortar el resto? —el trabajador preguntó.
-Sí, por favor —respondió Gu Ning.
Le dio un material de desecho al trabajador.
El Maestro Fu estaba a punto de irse con el jade, pero se quedó cuando Gu Ning continuó cortando sus materias primas.
Como Gu Ning ya había cortado una esmeralda de alto nivel, la multitud estaba emocionada de ver qué pasaría después.
Aunque todos creían que Gu Ning no podía ser tan afortunado como para cortar otro jade, todavía estaban llenos de esperanza.
Desafortunadamente, el siguiente fue un material de desecho, sin embargo, la multitud aún no se dispersó, porque Gu Ning tenía una última materia prima.
Gu Ning no había conseguido con éxito una esmeralda hasta que la tercera materia prima suya había sido cortada, podría ser posible que la última materia prima tuviera jade también.
Aún así, no había una gran posibilidad.
El último no fue grande, Gu Ning también sabía que la capa exterior no era gruesa, por lo que dijo:
-Por favor, frótala.
-No hay problema —respondió el trabajador.
Tardó un poco más en frotar una piedra que cortarla, pero todos fueron pacientes.
Después de un rato, el verde apareció en la piedra, el trabajador alzó la voz emocionado en primer lugar,
-¡Hay una esmeralda, otra vez!
-¡Caramba, la chica es tan afortunada! Dos de cada cinco tienen jade adentro.
Esta vez, el jefe se sintió muy arrepentido.
Solo se veía un poco de verde, fue difícil saber el tipo.
El trabajador pasó a frotar la piedra, cuanto más se quitaba la capa exterior, más emocionados estaban todos.
Cuando se había eliminado la mayor parte de la capa externa, el tipo de jade era lo suficientemente claro.
-¡Jesús! ¡¿No es del tipo de hielo de alto nivel?!
Los tipos de hielo alto eran solo un poco peores que el tipo de vidrio, pero también eran un tipo de jade de alto nivel, era incluso mejor que el tipo de arroz glutinoso.
Esta esmeralda era cristalina con gran transparencia, pertenecía al antiguo pozo, del tipo de hielo alto, aunque no era gigante, y solo era tan grande como un tercio del jade anterior del tipo de arroz glutinoso, su precio no era mucho más bajo que el anterior.
Gu Ning absorbió inmediatamente el poder en sus Jade Eyes.
Mientras su espacio telepático ocular estuviera lleno del poder, crecería más.
Cuando el jade se cortó por completo, un hombre dijo al instante:
-¡Veinte millones de yuanes!
Era la voz del Maestro Fu otra vez, nadie se atrevió a hacer un seguimiento esta vez, porque había pocas personas ricas alrededor.
El hombre que había competido con el Maestro Fu la última vez estaba a punto de llorar, él dijo:
-Maestro Fu, ¿no dijo que hay algo mejor esperándome? ¿Por qué tienes que competir conmigo otra vez esta vez? ¡Pagaré veinticinco millones de yuanes por ello!
Este jade del tipo de hielo alto era más valioso que el último del tipo de arroz glutinoso, pero no era grande, valía alrededor de veinticinco millones de yuanes, si se convirtiera en joyería, el comprador podría ganar unos diez millones de yuanes.
Pero si la oferta fuera más alta, no sería muy rentable.
El Maestro Fu, en cambio, estaba decidido a comprar el jade.
-El comprador más generoso tendrá el jade, creo que es bastante justo.
-Tú... —el hombre no sabía qué hacer.
Si el Maestro Fu volvió a ofertar, tenía que rendirse una vez más.
-Bien, este es tuyo. —el Maestro Fu entendió que el hombre, cuyo nombre era Zhao Yuefeng, quería tanto al jade.
Eran conocidos en realidad, el Maestro Fu no quería perder a un amigo solo por una esmeralda.
Zhao Yuefeng se emocionó de inmediato.
-¡Muchas gracias, Maestro Fu!
Por lo tanto, Zhao Yuefeng obtuvo este jade de tipo alto hielo al precio de veinticinco millones de yuanes al final.
En un día, Gu Ning ganó cincuenta y cinco millones de yuanes.
Aunque Gu Ning parecía tranquila por su apariencia, su corazón latía cada vez más rápido.
Ella gritaría si se lo permitieran ahora.
-Señorita Gu, es un placer conocerla, soy el presidente de Furong Jewelry, me llamo Zhao Yuefeng, esta es mi tarjeta de negocios, si la señorita Gu vuelve a cortar cualquier otro jade de alto nivel, avíseme, puedo comprarlo a un precio razonable y, por favor, dame prioridad como comprador —Zhao Yuefeng ahora estaba completamente convencido de Gu Ning.
Ya sea por suerte o por fuerza real, era realmente raro cortar dos esmeraldas de alto nivel de cinco materias primas.
Gu Ning había revisado las marcas nacionales de joyería, sus fundadores y presidentes en línea anoche, por lo que, naturalmente, conocía la marca de Furong Jewelry.
La sede de Furong Jewelry no estaba en la Ciudad G, pero tenía muchas tiendas en todo el país con dos mil millones de yuanes en activos, pertenecía a la marca nacional de tercera línea, y el presidente era Zhao Yuefeng, que tenía unos 40 años.
Zhao Yuefeng no necesitaba comprar jade él mismo, solo estaba aquí por diversión cuando inspeccionaba sus tiendas en City G.
Gu Ning estaba emocionada de que Zhao Yuefeng se hiciera amigo de ella por iniciativa propia.
Por lo tanto, si iba a cortar más jade, vendería algo a Zhao Yuefeng.
Serían compañeros, aunque los pares siempre competían entre sí, también podían cooperar.
Gu Ning aceptó su tarjeta de presentación con felicidad.
-Claro, llamaré al Sr. Zhao primero si elimino cualquier jade de alto nivel en el futuro.
-Jovencita, por favor no me olvides, puedes contactarme también, no pagaré menos que Zhao Yuefeng —el Maestro Fu sacó su tarjeta de presentación de inmediato, poniéndola directamente en la mano de Gu Ning.
Gu Ning pensó que era muy divertido ver competir a esos dos compradores.
Aunque Gu Ning no conocía los antecedentes del Maestro Fu ahora, sabía que el viejo debía ser rico y poderoso.
Gu Ning no apuntó a la riqueza del viejo, por supuesto.
Ella solo quería mantener una buena relación con sus clientes, especialmente con los clientes súper ricos.
-Maestro Fu, haces esto a propósito, ¿verdad? —Zhao Yuefeng se sintió un poco disgustado.
-¿Y qué? No eres el único que ama el jade. ¡Me encanta también! —el Maestro Fu respondió como un niño— ¡Jovencita, recuérdame! —le recordó amablemente a Gu Ning entonces.
-Lo haré. —Gu Ning sonrió.
Ella iba a cortar muchas más esmeraldas en el futuro, no le haría daño a nadie si ella también vendiera algo al Maestro Fu.
El Maestro Fu se alegró de escuchar una respuesta afirmativa.
Después de eso, Gu Ning dejó la tienda primero.
En poco tiempo, muchas personas habían escuchado la noticia de que la tienda había cortado dos jade de alto nivel, todas las personas vinieron a la tienda por buena suerte, la tienda se hizo popular de inmediato.
Desafortunadamente, no tuvieron tanta suerte como Gu Ning.