CAPÍTULO SEIS:
ORGULLO SLYTHERIN.
Cuando el fin de semana de Hogsmade finalmente llegó, Nova se encontró ansiosa por la reunión con Potter. Recordó que Granger y Weasley mencionaron que no habría Slytherins, y creyó firmemente que, incluso si lo hubiera, el resto de los estudiantes serían más cuidadosos de la chica Nott, cuyo padre era un Mortífago y no solo un Slytherin purista de la sangre.
Se aseguró que Parkinson y Bulstrode hubieran abandonado la habitación antes de sentarse, arrojando sus sábanas fuera de sus piernas. Una vez que sus pies se plantaron en el suelo, se levantó y caminó hacia el vestidor. Octubre significaba más frío, por lo que se aseguró de colocarse unas medias gruesas debajo de su falda negra para que sus piernas no se congelaran. Después de colocarse un saco cálido sobre sus hombros, se dirigió al baño.
La chica en el espejo lucía nerviosa y tímida. Konstantinova Nott no era nerviosa y tímida. Rápidamente mirando su reflejo, se aseguró de lucir como la mortal princesa de Slytherin que todos conocían mientras cepillaba su cabello —. No seas estúpida, Nova—, se susurró con un tono duro —. Son Gryffindors. Eres mejor que ellos.
Su reflejo no lucía convencido, pero Nova apretó los labios y entrecerró los ojos. Una vez que su cabello ya había sido cepillado, bajó las escaleras a donde Theo y su grupo de amigos le esperaban. Malfoy ya había sido llevado por Parkinson, por lo que dejó a los mellizos con Greengrass y Zabini. Nova no estaba segura de a dónde se habían ido Crabbe y Goyle, pero no le importó.
— ¿Lista para Honeydukes?—, preguntó Theo con una sonrisa. Los ojos de Nova se enfocaron en su brazo, que estaba unido al de Greengrass. Cuando él se dio cuenta, rodó los ojos.
—En realidad tengo que hacer algo antes, pero te buscaré cuando termine—, su mellizo le dirigió una mirada confusa, por lo que ella agregó —. Tengo que ir a buscar tu regalo para Navidad.
—Es principios de octubre—, rió él —. Faltan dos meses para Navidad.
—Bueno, quiero asegurarme que no vendan todo. Los encontraré en Las Tres Escobas después. Merlín sabe que necesitaré una cerveza de mantequilla.
—Bien. Solo encuéntranos allí, entonces—, respondió Theo, dándole una pequeña caricia sobre la cabeza antes de salir de la Sala Común, Greengrass y Zabini lo siguieron. Una vez que Nova se aseguró que se habían ido, sacó la carta que había obtenido de Weasley la noche anterior.
Nott, encuéntranos en Hog's Head mañana. Y recuerda no decirle a nadie a dónde vas.
Nova rodó los ojos. Como si fuera lo suficientemente estúpida como para decirle a alguien que estaba yendo en contra de su Padre, y con Harry Potter encima. Se encargó de prender fuego la carta, arrojándola a la fogata.
El aire estaba ligeramente frío cuando salió del castillo, pero no era insoportable. Notó que las hojas de los árboles comenzaban a caer, dando la impresión que otoño estaba acercándose. Paró y le dio su permiso a Filch cuando él estiró su mano hacia ella.
—Luce falsa—, habló Filch con un tono infeliz.
—Dejaste ir a mi mellizo y él tiene la misma firma—, respondió Nova con un tono agitado. Filch pareció encontrarle lógica a su argumento, por lo que la dejó seguir dedicándole una mirada. Ella simplemente rodó los ojos, caminando hacia la entrada de Hogwarts y marchando en dirección a Hogsmade.
Cuando Nova llegó a Hog's Head, su nariz se arrugó en disgusto. Colgando del cartel sobre la puerta había una cabeza cuya sangre caía hasta manchar la ropa blanca. Nova no estaba impresionada. Al abrir la puerta y entrar, el primer pensamiento que albergó su mente fue lo mucho que su Padre odiaría Hog's Head. Estaba cubierto del techo al suelo en lo que lucía tierra seca, pequeñas partículas de polvo se esparcía cada vez que daba un paso. El lugar era oscuro, nada de luz lograba traspasar las ventanas sucias.
—Buen lugar para reunirse, Granger—, murmuró Nova para sí misma. Notó al grupo en el fondo del pub, justo cuando Fred Weasley habló.
—Hola. ¿Podríamos tener... veinticinco cervezas de mantequilla, por favor?
Cuando el hombre lo miró molesto, Nova suspiró —. Que sean veintiséis.
Estaba segura que nunca había visto tantos ojos sobre ella. Todos en el grupo se giraron para ver a la Slytherin, varias bocas abriéndose ante su aparición. Los únicos que parecían estar felices porque había aparecido eran Potter y Granger. Incluso Weasley lucía aprehendido, como si estuviera arrepentido de su decisión de invitarla a la reunión secreta.
— ¿Qué diablos hace ella aquí?—, preguntó Terry Boot, un chico de Ravenclaw de un año menos que ella. Había una frialdad en su voz que Nova estaba segura reservaba para los Slytherins.
— ¿Quién invitó a la Slytherin?—, agregó Ernie Macmillan. Nova le envió una mirada tan fría que él se recostó en su asiento para poner distancia entre ellos.
—Yo lo hice—, respondió Potter, mirando a Ernie y Terry —. Invité a Nott y, si no les gusta, no tienen por qué quedarse—, sus ojos esmeralda viajaron para encontrarse con los de Nova, quien le dio un corto asentimiento y se sentó al lado de Neville Longbottom. Él se acercó a Dean, y tembló cuando ella cruzó las piernas.
El hombre del bar apareció de vuelta con varias bebidas, y Nova le deslizó un par de monedas antes de tomar un trago. Una vez que el líquido golpeó su garganta, la mirada irritada de su rostro se suavizó. Mientras la mayoría de los chicos de Hogwarts amaban los dulces del carrito del Hogwarts Express o de Honeydukes, Nova no creía que había algo mejor que la cerveza de mantequilla.
Una vez que todo el grupo estaba sentado, Nova se inclinó en su silla y esperó a que Granger hablara.
—Eh—, comenzó Hermione, su voz aguda. Nova quería reír. En su mundo, estar nervioso no era una opción. Siempre la entretenía ver cuando otras personas lo estaban —. Bueno... uhm, hola.
Elocuente.
—Bueno... uhm... bueno, ustedes saben por qué están aquí. Mm... bien, Harry tuvo la idea —digo, yo tuve la idea— que sería bueno que si las personas que quieren estudiar Defensa contra las Artes Oscuras, y me refiero a estudiar de verdad, ya saben, no la basura que nos está haciendo hacer Umbridge. Porque nadie puede llamar a eso Defensa contra-- alguien la interrumpió con un "hum, hum" y Granger no lució complacida en lo absoluto —. Bueno, creo que sería bueno si nosotros, bueno, tomáramos el asunto en nuestras propias manos.
— ¿Vamos a aprender Defensa contra las Artes Oscuras con una Slytherin?—, preguntó una chica pelirroja de Ravenclaw, que estaba sentada al lado de Cho Chang. Cuando sus ojos se encontraron con los de Nova, la mujer Nott le dedicó una sonrisa siniestra que provocó que la Ravenclaw temblara.
Nova felizmente tomó un sorbo de su cerveza de mantequilla.
—Y con eso me refiero a aprender como corresponde a defendernos. No solo la teoría, sino que los encantamientos reales—, continuó Granger como si no la hubiera escuchardo. De todos modos, Potter lo hizo y le envió una mirada que dejó en claro que ella no estaba obligada a quedarse.
—Quieres pasar tu examen T.I.M.O. de Defensa contra las Artes Oscuras también, asumo—, mencionó Michael Corner, mirando a Granger.
—Por supuesto—, replicó Granger. Nova quería rodar los ojos. Claro que Hermione Granger quería aprobar sus exámenes T.I.M.O.. ¿Este Michael siquiera la conocía? —. Pero quiero más que eso. Quiero ser entrenada propiamente en Defensa porque... porque...
En base al rostro de Granger, Nova supo qué se avecinaba.
—Porque Lord Voldemort volvió—, comentó Nova, terminando la frase junto con su cerveza de mantequilla. La pelirroja de Ravenclaw soltó un chillido similar a un cerdo siendo asesinado, los ojos de Terry Boot se abrieron, Padma Patil tembló en su asiento, y el pobre Lonbottom lucía como si estuviera a punto de desmayarse.
—Sabes mucho sobre eso, ¿no, Nott?—, preguntó un chico de Hufflepuff que ella no conocía. Notó que habían al menos cinco personas mirándole, entonces se encogió de hombros.
—Es conocimiento básico. ¿Por qué no, en lugar de hacer comentarios sobre mi casa, le prestas atención a lo que Potter tiene para decir para que no acabemos todos muertos?—, el Hufflepuff se hundió en su asiento, y Nova se giró al hombre del bar —. ¿Podría tener otra cerveza de mantequilla?
— ¿Dónde está la prueba de que Tú-Sabes-Quién está de vuelta?—, preguntó el mismo chico. Nova quería tomarlo por el cuello y romperlo como a una rama.
—Bueno, Dumbledore lo cree--.
—Quieres decir que Dumbledore le cree a él—, interrumpió el Hufflepuff, señalando a Harry —. Y la única razón por la que Nott lo está diciendo es porque su familia básicamente alaba a Tú-Sabes-Quién.
— ¿Quién eres tú?—, escupió Weasly, mirando al Hufflepuff. El hombre del bar le pasó a Nova otra bebida y ella le dio tres monedas más antes de tomarla.
—Zacharias Smith, y creo que tenemos el derecho de saber exactamente qué es lo los hace decir que Tú-Sabes-Quién está de vuelta.
—Mira, de eso no se trata la reunión--.
—Está bien, Hermione—, interrumpió Potter. Su voz fría y como piedra, muy parecida a la voz que Nova había utilizado —. ¿Qué hace que digamos que Tú-Sabes-Quién está de vuelta?—, observó a Zacharias con tanta intensidad que Nova se sorprendió que el chico rubio con un sweater amarillo no estalló en llamas —. Lo vi. Pero Dumbledore le contó a toda la escuela lo que pasó el año pasado, y si no le creíste no me creerás a mí. Y no voy a desperdiciar una tarde intentando convencer a nadie.
—Todo lo que nos dijo Dumbledore el año pasado fue que Cedric Diggory fue asesinado por Tú-Sabes-Quién, y que tú trajiste su cuerpo de vuelta a Hogwarts. No nos dio ningún detalle, no nos contó cómo Diggory fue asesinado--.
— ¿Quieres saber exactamente cómo Voldemort le lanzó un Avada Kedavra a alguien? ¿Es eso, Smith?—, inquirió Nova y el chico se giró hacia ella, la rabia clara en su rostro.
—El resto de nosotros no somos tan buenos en la Magia Oscura como tú, Nott.
—Cierra la boca, Smith—, respondió Nova, golpeando su vaso sobre la mesa. Severas personas en el grupo se encogieron —. Mi familia ha estado en Slytherin por generaciones, ¿y? Al menos vine a la jodida reunión lista para aprender hechizos defensores para protegerme, a diferencia de ti, que solo viniste a demandarle a Potter que dé detalles del asesinato de Diggory. Por lo que te recordaré, ya que pareces haber olvidado un modal básico, es grosero. Si viniste aquí a aprender sobre asesinato y no sobre cómo protegerte para no encontrarte con el mismo destino, o si tienes un problema conmigo estando aquí, puedes levantar tu trasero e irte.
Toda la habitación se sumió en silencio después de su monólogo. Incluso Weasley la estaba mirando con sorpresa mientras todos digerían sus palabras. Nova alzó su cerveza de mantequilla y tomó otro trago, maldiciendo al percatarse que estaba vacío —. ¿Alguien tiene otro knut?
Sin palabras, Dean Thomas se estiró por sobre Neville Longbottom para alcanzarle uno.
El hombre le pasó otra cerveza de mantequilla sin que ella se lo pidiera. Deslizó el vaso vacío en su dirección antes de comenzar a tomar del otro con rabia.
—Entonces—, habló Hermione después de un par de momentos en que todos observaron en silencio a la chica de Slytherin —. Como estaba diciendo... si quieren aprender Defensa, necesitamos decidir cómo lo haremos, cada cuánto nos encontraremos y en dónde vamos a--.
— ¿Es verdad que puedes producir un Patronus?—, preguntó una pequeña Ravenclaw, interrumpiendo a Hermione para mirar a Potter.
—Sí.
— ¿Un Patronus corpóreo?
El rostro de Potter se transformó en algo extraño a reconocer —. Er - no conoces a Madam Bones, ¿o sí?
—Es mi tía. Soy Susan Bones. Me contó lo que pasó. Entonces, ¿es verdad?—, insistió Susan, dándole a Harry una sonrisa llena de curiosidad —. ¿Un Patronus en forma de alce?
—Sí.
— ¡Vaya, Harry!—, gritó Lee Jordan, su rostro lucía más que impresionado. Incluso Nova no pudo evitar alzar una ceja en sorpresa. Producir un Patronus era una de las cosas más difíciles que un mago joven podía hacer. Incluso los magos más ancianos tenían problemas para producirlo. Su Padre no había sido capaz de producir un Patronus en años —. ¡Nunca supe eso!
—Mamá le dijo a Ron que no lo contara—, exclamó Fred Weasley, sonriéndole a Harry —. Dijo que ya tenías suficiente atención.
—No está equivocada—, balbuceó Potter bajo de su respiración. A su lado, Nova escuchó a Neville Longbottom cubrir su risa.
— ¿Y mataste un Basilisco con la espada de la oficina de Dumbledore?—, inquirió Terry Boot, su voz sonando agresiva —. Eso es lo que un retrato me contó cuando estuve ahí el año pasado...
—Uhm-- sí. Hice eso, sí.
—Y en nuestro primer año—, comenzó Neville Longbottom mientras el grupo soltaban sonidos de impresión. Los ojos de Lavender Brown estaban abiertos de par en par, y los hermanos Creevey observaban a Potter como si fuera el sol —. Recuperó la Piedra Filosófica--.
—Filosofal—, corrigió Hermione.
—Sí, eso, de Ustedes-Saben-Quién—, terminó Neville.
—Por no mencionar todas las tareas que superó en el Campeonato de los Tres Magos el año pasado: dragones, sirenas y acromántulas, y...—, Cho Chang vaciló, los demás asintieron.
Mientras tomaba su cerveza de mantequilla y Potter aclaraba que siempre había sido ayudado, Nova se encontró observando a Granger y Weasley. Y entonces, a todos los presentes en el círculo. Ellos amaban a Potter. Incluso Smith, que intentaba lucir como si no estuviera interesado, lucía impresionado. Nova tragó la bebida mientras la tristeza rodeaba su corazón.
Nunca tendría eso. Nunca tendría personas que la defendieran en contra de cualquier cosa que otros dijeran. Tenía a Theo, pero él pronto seguiría los pasos de su Padre y la dejaría. Harry Potter tenía amigos, amigos verdaderos, y la melancolía que vino con eso fue suficiente para provocar que Nova se recostara en su silla en silencio, sin responder cuando varias miradas se posaron en ella después que Zacharias Smith volviera a decir algo estúpido.
— ¿Nova?—, inquirió Granger después de unos momentos en que la chica de Slytherin solo observara el fondo de su vaso. Cuando Nova alzó la cabeza, todas las miradas estaban sobre ella —. ¿Qué crees? Una reunión a la semana, y les avisaré cuando se decida un lugar y la hora.
—Sí, sí—, respondió Nova rápidamente, intentando asegurarse que no luciera como realmente se sentía —. Sí, eso está bien—, repensando sus palabras, alzó un dedo —. Con una condición
Alguien gimió.
— ¿Qué condición?—, inquirió Hermione.
—Que todos cierren la boca sobre mí siendo una Slytherin. No elegí mi maldita casa.
Fred, George y Lee soltaron carcajadas casi idénticas. Dean Thomas intentó ocultar su sonrisa. Potter y Granger la miraban con sonrisas en sus rostros. Incluso Weasley tuvo que cubrir su sonrisa con su mano.
—Claro, creo que todos podemos aceptar eso. Ahora, creo que deberíamos escribir nuestros nombres...
Nova no escuchó el resto. Se levantó pacientemente y esperó hasta que casi todos terminaran de escribir sus nombres antes de caminar hasta Granger, que estaba sentada con un pedazo de pergamino y una pluma.
Observó el pedazo de pergamino, tomando la pluma entre sus manos. Era ahora. Este era el momento en que finalmente elegía algo por sí misma. Estaba eligiendo ayudar a Theo.
Konstantinova Nott.
—Nott—, llamó Potter y Nova lo miró, expectante —. Gracias. Por lo de hoy, digo. Con Zacharias.
—Estaba siendo un idiota—, respondió Nova, encogiéndose de hombros —. Cualquiera hubiera hecho lo mismo.
—Pero nadie más lo hizo—, agregó Potter.
Supuso que tenía razón —. Bueno, no lo menciones, Potter.
—Puedes llamarme Harry, ¿sabes?
La más pequeña de las sonrisas provocó que los labios de Nova se torcieran hacia arriba —. Lo sé—, entonces, su rostro se volvió serio una vez más —. Y supongo que debería decir gracias por invitarme a esto, aunque sabías que ibas a recibir quejas por traer a una Slytherin.
—Solo me aseguro que conozcas tus opciones.
Nova asintió. Apreció eso más de lo que dejaría notar —. Cierto. Bueno, los veo en la próxima reunión.
Estaba fuera de la puerta y ya caminaba hacia Las Tres Escobas cuando escuchó la puerta de Hog's Head abrirse y escuchó pasos detrás de ella. Cuando se giró, se encontró con Weasley ligeramente sin respiración, apoyando sus manos sobre sus rodillas e intentando recuperar el balance de su respiración.
—Merlín, caminas rápido—, él tomó un par de bocanadas de aire antes de que se volviera a parar derecho, siendo un par de centímetros más alto que Nova —. Mira, solo quería darte las gracias por venir. Significó mucho para Harry. Y perdón por el idiota de Zacharias Smith.
—Sí. Fue un verdadero estúpido, ¿no?—, respondió Nova.
Weasley rió, entonces lució sorprendido de que se había reído por algo que una Slytherin había dicho —. Un completo estúpido. Nada de lo que dijo es verdad, ¿sabes?
— ¿Un Weasley diciendo que Nova Nott no es una Slytherin terrible, purista de la sangre? Qué extraño.
—Bueno... uhm... quiero decir, es obvio, ¿no? Que... ¿que no lo eres? Me refiero a que viniste a esta reunión y defendiste a Harry cuando alguien lo llamó un mentiroso. Estaba...—, él no podía decirlo, sus labios formaban la palabra pero nada salía.
—Equivocado. Estabas equivocado—, terminó Nova por él. Él asintió, sus mejillas rosadas.
—Sí. Digo... tienes razón, estaba equivocado.
Nova rodó los ojos, pero no hubo dolor en su acción como lo había al principio del año —. La próxima vez que me hables, asegúrate que sea en español, Weasley. Me temo que no hablo balbuceos.
Se giró y comenzó a caminar en la dirección contraria antes de que él pudiera llamarla para que volviera. Él la observó alejarse, el sentimiento cálido de su vergüenza aún presente en sus mejillas.
—Oh, lindo Ronniekins—, dos voces cantaron de repente detrás de él. Cuando Ron se giró, vio a sus dos hermanos gemelos y a Lee, grandes sonrisas en sus rostros.
— ¿Qué quieren?
—Voy a decirle a mamá—, anunció George, acercándose y tomando la mejilla de Ron, apretándola entre sus dedos —. ¡Va a creer que es tan adorable! Su hijo más joven finalmente está enamorado.
—Sal de encima—, exclamó Ron, alejando los dedos de su hermano de sus mejillas. Tan pronto como el agarre de George desapareció, la mano de Fred tomó el otro lado de su rostro —. Fred, juro por Godric. ¡Ow! Fred, eso es-- ¿de qué diablos hablan ustedes dos?
—Tú y tu pequeño y adorable crush en Nova Nott—, respondió Lee. Ron se removió, como si estuviera en shock—. Oh, no seas tan dramático, Ron.
— ¿Creen que me gusta Nott?—, preguntó Ron, su voz sonando dos octavas más alta. Los tres chicos parecieron encontrarlo hilarante, ya que no paraban de reír —. ¿Están locos? No me gusta Nova Nott.
—Claro, claro—, canturreó Fred.
— ¡Lo que digas, Ronniekins!
—Ustedes harían una pareja hermosa. Solo imagínalo, un Weasley con una chica cuya familia odia la idea de los muggles. Es una combinación hecha en el cielo, claro—, terminó Lee mientras los tres volvían a romper en carcajadas.
—Ustedes tres están malditamente locos.
Como si él pudiera gustar de Nova Nott. Con sus manos cerradas en puños, marchó de vuelta a la entrada de Hog's Head, donde Hermione y Harry lo estaban esperando. Antes de que la puerta se cerrara detrás de él, escuchó a Fred gritar —. ¡Cuando te des cuenta que te gusta, dínoslo! ¡Decidimos que te vamos a ayudar!
Nova Nott y él. Juntos. Era una idea tan alocada como sus hermanos.
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Querida Nova,
Probablemente no sabes quién soy. Y si no te importa, me gustaría mantenerlo así. Solo digamos que tenemos un amigo en común, y él sugirió que debería escribirte una carta dejándote saber de un viejo amigo mío.
Uno de mis mejores amigos durante mis años en Hogwarts nació en una familia de sangre pura, todos Slytherins. Cuando nos conocimos en el tren, él estaba seguro que iba a ir a Slytherin y crecería para seguir al Señor Oscuro, como el resto de su familia. Temía que sus amigos iban a terminar en otras casas - las casas convencionalmente consideradas "buenas."
Para su sorpresa, fue asignado a Gryffindor. Junto con sus tres mejores amigos, que había conocido en el tren.
Sé que tu situación es diferente. Haz estado en Slytherin los últimos cinco años de tu vida. Haz estado rodeada por seguidores del Señor Tenebroso toda tu vida. Pero aunque parece imposible salir de allí, te prometo que es una hazaña posible.
Recuerda que tú eliges, Nova. Solo porque las personas perciban que eres algo, no significa que debes vivir cumpliendo sus estándares. Mi mejor amigo no lo hizo. Él se alejó de la familia que tanto detestaba y encontró mucho más. Encontró la luz, la amabilidad y, más importante, el amor. Creo que tú puedes hacer lo mismo.
Slytherin no es una casa malvada, Nova. Te hará bien recordarlo. No estás destinada a convertirte en tu padre. Tienes la elección de elegir, al igual que mi amigo.
Espero que esta historia te inspire. Espero que entiendas que muchos se preocupan por ti. Y ojalá, cuando te conozca cara a cara, ya habrás decidido por ti misma, y no por nadie más.
Cuídate,
R.L.
La carta había llegado esa mañana, cuando Nova estaba sentada en la mesa de Slytherin desayunando. Los domingos eran tranquilos, normalmente utilizados para estudiar para los exámenes T.I.M.O. y haciendo cualquier tarea que no había llegado a terminar. De todos modos, en ese domingo en particular, Nova no pudo evitar observar la carta cuando una lechuza de la escuela la había dejado caer (y casi cayó sobre su comida caliente).
R.L. ¿Quién era R.L.? Intentó pensar en un conocido con esas iniciales, pero no se le ocurrió nadie. La leyó doce veces, sus ojos escanearon cada palabra como si estuviera intentando aprenderlas de memoria.
Cuando Theo se sentó a su lado, ella dobló la hoja y la guardó en su mochila —. ¿Qué es eso?—, preguntó, robando su vaso lleno de jugo de naranja y tomando un sorbo.
Ella se encogió de hombros —. Solo tarea de Pociones que debo terminar—, continuó comiendo su desayuno, casualmente cortando su panqueque con su tenedor y cuchillo —. ¿Theo? ¿Conoces a alguien con las iniciales R.L.?
Theo levantó la mirada de la tostada que estaba cubriendo con mantequilla y pensó por un momento —. Creo que no. ¿Por qué?
—Estaba escrito en una mesa. Solo curiosidad.
Los dos continuaron comiendo sus desayunos, silenciosos mientras masticaban. Nova sintió la mirada de Theo sobre ella, y cuando lo miró, él estaba sonriendo —. Malfoy luce tan molesto con Pansy como tú normalmente lo haces.
Los ojos de Nova viajaron rápidamente al final de la mesa y notó a Pansy casi sentada sobre las piernas de Malfoy. Él lucía disgustado mientras intentaba comer —. Eso es asqueroso.
—Suenas celosa.
—Muérdete la lengua—, replicó Nova —. Me gustaría que dejaras de decir eso. Malfoy se esperanza más cada vez que dices esas cosas.
—Oh, vamos, Nova. Sabes que él terminaría con Pansy en un microsegundo si le dijeras que quieres volver a intentarlo. El chico ha estado enamorado de ti desde que se conocieron.
—No funcionamos, Theo.
—No creo que sea eso, en realidad—, respondió Theo, bajando sus utensilios para mirarla. Ella le envió una mirada —. No, escúchame. Creo que rompiste con él porque temías que rompiera tu corazón.
—Como si Malfoy pudiera romperme el corazón. Sé razonable, Theo.
—Rompiste el suyo antes que él pudiera romper el tuyo. Creo que esa es la razón por la que rompiste con él.
—O terminé porque no podía ver un futuro con él—, señaló Nova, llevando una uva a su boca.
—Tarde o temprano, tendrás que entregar tu corazón, Nova. En realidad es una sensación genial.
Sus ojos se dispararon hacia él, y ésta vez, una sonrisa genuina apareció en su rostro —. Las cosas van bien con Greengrass, ¿entonces?
—Su nombre es Daphne—, la corrigió, ignorando que ella rodara los ojos en respuesta —. Y sí, las cosas van bien. Realmente me gusta, Nova.
Esto era lo que ella quería. Quería ver la sonrisa tonta en su rostro mientras hablaba sobre una chica que le gustaba. Le dio otra sonrisa pequeña para hacerle saber que, mientras que él estuviera feliz, ella también lo estaría —. Bien. Estoy contenta.
—Sí, yo también.
Era lo más lejano a un Mortífago que ella había visto nunca. Era un chico, un chico enamorado atravesando la escuela, intentando descubrir quién era. Era su hermano, ningún semblante parecido al de su Padre apareciendo en ese momento.
No pudo evitar pensar que si ella estuviera intentando producir un Patronus, justo como Potter, este sería su recuerdo más feliz.