En un dicho momento entraron una serie de enfermeras y doctores, al parecer su ritmo cardíaco estaba aumentando incontrolable mente, nadie comprendía exactamente por qué, hace unos minutos ella estaba de maravilla, su ritmo había aumentado como si hubiese visto a un fantasma o a un asesino serial intentando matarla, que era imposible ¿no? eso querían creer los doctores mientras la tranquilizaban y sedaban.
(...)
No entiendo como dejé que ésto ocurriera, es mi culpa, quería que ella supiera tomar sus propias decisiones, la dejé de vigilar, perseguir, proteger. No sabía que ella llegaría hasta el punto de querer huir.
Vi detalladamente como salió corriendo como si no hubiese un mañana con una euforia increíble, su rostro mostraba confusión; tal vez pensaba en muchas cosas. Ella no estaba feliz en esos momentos, pero tampoco estaba tan mal... tal vez solo necesitaba pensar las cosas y volver con nosotros, con su actual familia.
Debí haberla cuidado más, aconsejado más, abrazado más, debí haberle recordado diariamente que siempre estaría para ella, que contaba conmigo, que me importaba demasiado, debí haberle dicho que en éste infierno, ella era agua. Tal vez si se lo hubiese dicho ella aún estaría aquí.
Soy un idiota.
Pero ese accidente le robó la ultima esperanza de vida.
(...)
Slenderman, ¿estás seguro que no viste a Valentina? -preguntó por tercera vez Jeff, esperando por respuesta un "sí, yo sé dónde está."
No -respondió slenderman
¡Es completamente imposible que no hayas visto nada! tú siempre ves todo, hasta lo que no deberías -exclamó Andrés desesperado
Mi... mi amiga... Valentina ¿que te pasó? da señales de vida, ¡carajo! -decía Jane mirando su celular. No tenía ánimos, no tenía fuerzas. Lo único que tenía era dolor.
Ya les dije por tercera vez que no tengo idea de dónde ni cómo esté Valentina. -respondió Slenderman al ver la situación de miedo, desesperación y dolor de los tres chicos.
Y ¿planeas que con eso nos pongamos mejor? ¿piensas que eso nos dará ánimos? -interrogó de manera sarcástica Jeff a Slenderman.
No planeo nada, niño estúpido. Solo quiero que entren en razón, que vean la realidad. Nosotros causamos ésto, nosotros hicimos que huyera. -contestó Slenderman.
¡YA BASTA! en vez de estar echándonos la culpa, debemos buscarla. No sean inmaduros. -Exclamó Jane, explotando inmediatamente, como si fuese una granada.
Slenderman, tú sales del bosque. Jane tu vas al hotel o a los lugares donde estuvieron ayer. Jeff tú te encargas de los bosques, conmigo. -Dictó Andrés, ya cansado de estar discutiendo.
Entendido -asintieron todos y se dirigieron a su misión.
(...)
Buenas Noches, se encuentra en éste hospital la paciente Valenti... fue interrumpido por la recepcionista. -Claro, en la habitación 486, es paciente de emergencia.
Disculpe, ¿es usted familiar de la paciente? ¿o sabe algo del accidente? -preguntó la recepcionista
Yo vi como pasó el accidente -respondió
Oh, bueno, Puede pasar -mencionó la recepcionista
Gracias, habitación 486 ¿verdad? -corroboró él
Exacto, bienvenido. -concluyó ella.
(...)
Abrió la puerta de la habitación 486 y se adentró en ella y la vio, ahí acostada en esa cama, conectada a cables. Todo está conectado pensó.
Acarició su rostro, tenía mucha heridas. ¿cómo dejé que esto pasara? se preguntó así mismo.
¿Sl..slenderman? ¿eres tú? -Exclamó la joven viendo a un hombre vestido de traje, era muy blanco, tenía lentes de sol, y un abrigo. Tenía un sombrero negro, se había dibujado una boca, que cómico.