HARRY'S POV
-Harry, quiero hacerlo -Seguía insistiendo Valerie. Había intentado quitarle aquella idea de la cabeza. Los chicos ya se habían marchado, y desde entonces, no habíamos hablado de otra cosa. Ella quería infiltrarse en la banda de Christian y averiguar donde tenía a Louis. Yo me negaba-. Por favor.
-Coño, Valerie, te he dicho que no. Y no voy a cambiar de opinión -Ella me miraba suplicante. Pero aquella idea no me gustaba, no hablábamos de una banda cualquiera. Hablábamos del mafioso más peligroso de todos los tiempos.
-No puedes escoger por mí -Replicó ella. Yo suspiré.
-Tienes razón, no puedo -Contesté-. Pero si te tengo que romper las piernas para que no salgas de esta casa, lo haré.
-No eres capaz -Me retó, me acerqué a ella.
-¿Estás segura? -La miré desafiante, y ella negó con la cabeza-. Mejor, olvídalo.
-No quiero -Siguió-. Quiero ayudar a Louis, e iré a buscar a Christian, a Luke o quien sea.
-Mierda, ¿puedes pensar racionalmente por una vez? -Grité-. Si vas allí, te matarán. O algo mucho peor, no sabes nada de ellos, ahora me quieren joder a mí también.
-¿A ti?
-Sí, por haberme marchado del grupo de Christian. Ahora soy su enemigo -Le expliqué, y lo peor era que sabían que quería protegerla-. Y si me quieren hacer daño, lo harán a través de ti.
-Harry...
-No, ni irás. No se hable más -Acabé-. No voy a dejar que te metas en ese mundo. No quiero verte sufrir.
-Vale. Te haré caso -Sonreí ante aquella aprobación. Ella se acercó y me abrazó-. Pero no te separes de mí -Me susurró al oído. Sonreí, no tenía la intención de hacerlo.
VALERIE'S POV
Me escaparé esta noche, cuando Harry se haya dormido. Me sentía culpable, Louis había sido secuestrado por protegerme. Además, Christian me buscaba a mí. Quizá si me presentaba allí, acabaría con todo lo que sucedía en aquel momento.
La noche llegó, cené junto con Harry un sándwich de atún acompañado de un yogurt. Me fui a la ducha, mientras Harry veía algo de televisión. Al parecer, su apartamento ya había sido registrado y había poca vigilancia alrededor. Pero él se negaba a volver, decía que aún era pronto.
Harry se durmió profundamente en el sofá, eran cerca de las dos de la mañana. Me acerqué a él y le moví suavemente, él abrió los ojos y me miró.
-Harry, ves a la cama, te has dormido viendo la televisión -Él apagó la tele, y se levantó. Me cogió de la cintura cuando caminaba hacia mi habitación y me besó. Dejé mi bata y vi que él me miraba curioso. Me dispuse a salir de la habitación.
-¿Dónde vas? -Preguntó con la voz ronca, seguía medio dormido.
-Al lavabo y a beber un poco de agua, tengo sed -Le di un beso en los labios-. Ahora vuelvo.
Él asintió. Entré al lavabo a toda prisa y me cambié. Unos jeans negros, una camiseta blanca, mis botas y ya estaba lista. Me miré al espejo. No estaba bien engañar a Harry, si se despertaba se pondría como una furia y probablemente me atase a una silla. Pero debía hacer eso si quería salir de esos problemas. Me dirigí a la cocina, y encendí la luz.
Rápidamente cogí mi chaqueta del recibidor y abrí la puerta con mucho cuidado. Miré mi comedor por última vez, que estaba iluminado por la luz de la cocina.
-Lo siento -Murmuré. Cerré la puerta sin hacer un mínimo ruido. Bajé a toda prisa las escaleras, y salí a la calle, una oleada de frío invadió mi cuerpo de inmediato. Lamenté haber salido de repente, miré alrededor. Había gente que volvía de fiesta, por las calles.
Dos jóvenes borrachos me lanzaron un piropo cuando caminaba en dirección el centro de Londres, no sabía dónde iba exactamente. Pero tenía la sensación que me vigilaban. Cuando pasé por una calle más desierta, un callejón perdido, escuché por detrás el motor de un coche. Me tensé y caminé más deprisa. Justo por delante apareció otro coche. Ahí estaban.
Paré en seco y me quedé parada.
-Señorita Parker -Dijo una voz detrás de mí un escalofrío me recorrió por dentro-. ¿Quiere que la lleve a algún lugar? -Me giré y vi aquellos ojos azules, que me escalofriaban. Sonreía ampliamente.
Luke Hemmings.
Miré a Luke asustada. Caminé hacia él, y asentí. Estaba nerviosa, pero no tanto como cuando vi a Harry de nuevo aquella noche. No temía tanto a Luke.
-Llévame a ver a Christian -Dije de forma seria. Él simplemente rió.
-¿Así que quieres ir a ver a papá? -No contesté-. Sube al coche -Dijo de forma seria. Me subí al asiento del copiloto. Luke bajó los pestillos, para que no pudiese escapar. Él miraba fijamente a la carretera. Yo estaba nerviosa y trataba de calmarme, a través de mi respiración, hasta que Luke habló-. ¿Por qué quieres ver a Christian?
-Quiero acabar con todo esto -Me limité a contestar.
-¿Crees que es tan fácil? -Añadió Luke rápidamente. Noté que sonreía de forma pícara-. Esto no se arregla con tu muerte, el objetivo desde el principio ha sido Harry Styles, no tú -Miré a Luke y él me guiñó el ojo-. Por lo que dijo Jason, si le queremos hacer daño a él, será a través de ti.
-Me conoce de hace pocos días, yo no le importo -Comenté, mientras comenzaba a llover. Las gotas caían en el cristal del coche, y el parabrisas las apartaba.
-Créeme, que querrá protegerte -Luke parecía convencido de lo que decía-. Y te has metido en la boca del lobo. Christian me dijo que hiciese contigo lo que quisiese, nena.
-No me llames así.
-¿Así cómo? ¿Nena? -Asentí y él soltó una carcajada-. Oh, venga, nos lo podemos pasar muy bien juntos, pero me parece que tú no me lo vas a poner fácil -Sabía hasta dónde quería llegar Luke, y aquello no me tranquilizaba-. Cuando Harry se entere, ¿qué hará? Conozco sus impulsos, matará a todo aquello se le oponga en el camino. Has metido la pata hasta el fondo, nena. Has complicado mucho más las cosas. Eso implica más diversión para mí, y para ti, una muerte lenta.
-Sería más fácil matarme y después a Harry, ¿no crees?
-Eso no tiene emoción -Contestó Luke, mirándome a los ojos-. Somos mafiosos, vivimos de los chantajes y amenazas. Si Harry hace lo que le pedimos, no sufrirás daño alguno.
-¿De verdad?
-No, yo no cumplo nada de lo que digo. Te mataré, Valerie Parker -La piel se me erizó-. Y desearás no haber huido esta noche, con lo bien que estabas con tu asesino... Lo lamentarás.
Luke paró el coche. Sacó su móvil y buscó en la agenda. Me miró con una sonrisa desafiante. Me sonrió malvadamente. Sentía que mi corazón iba a parar de un momento a otro, mi nerviosismo me invadía por completo.
-Llamemos a Harry -Dijo, tragué saliva. Mi corazón se aceleró aún más. Luke me pasó la mano por la mejilla-. ¿Qué dirá, eh? ¿Se lamentará por ti? -Luke soltó una risita y accedió al contacto-. Ahora lo veremos.
Sonó una vez y otra, y otra, a la tercera. Escuché la voz de Harry, mis lágrimas floraron por mis ojos y comenzaron a caer. Ahora me arrepentía de lo que había hecho. Harry tenía razón.
-¿Qué mierdas quieres Hemmings? -Dijo su voz ronca.
Luke rió.
-Tengo a tu chica -Contestó Luke, me miró durante un segundo y añadió-. Más bien, ella ha venido a mí.
-¡Harry, lo siento! -Dije con la voz entrecortada. Luke me pegó con la mano abierta en la mejilla. Al parecer Harry escuchó ese ruido.
-¡Ni se te ocurra tocarla, Hemmings! ¡Te juro que te mato!
-Demasiado tarde, Styles -Dijo Luke tranquilamente, se apoyó en la ventana del coche-. Si la quieres ver con vida, tendrás que pagar las consecuencias. Ella sufrirá por ti.
-Te lo repito, no la toques -La voz de Harry sonó más tranquila. El dolor que sentía en mi mejilla hizo que unas lágrimas se me cayesen.
-Haremos un trato -La voz de Luke sonaba diabólica en aquellos momentos-. Tráeme mañana a las once, diez millones de libras y te devolveré a Valerie.
Diez millones. El miedo recorrió de nuevo mi cuerpo. Harry no gastaría jamás tanto dinero en una simple chica. Tenía la certeza de que él se negaría, moriría en manos de Luke, lo veía claro.
-De acuerdo -Contestó Harry, mi corazón se aceleró. Y algo de esperanza inundó mis pensamientos-. Pero ni se te ocurra tocarla en esta noche.
-Lo que digas -Luke colgó el teléfono, y me miró descaradamente-. Qué lástima que Harry crea que no voy a hacer nada contigo, vas a pasar la peor noche de tu vida. Y mañana, hablaré con Christian sobre ti.
-Te dije de un principio que quería hablar con él.
-No podrás, estarás totalmente destrozada, cariño -Contestó-. Y el único consuelo que tendrás, será la droga que te meteré, eso te aliviará. Sé lo que hago.
Las ganas de huir de allí aumentaban. Pero no podía, el pestillo estaba cerrado. No tenía escapatoria, una vez más, me lamentaba de no haberle hecho caso a Harry. Mierda, Valerie, ¿porqué eres tan imbécil? Harry lo hizo por tu bien, vas y le desobedeces, ahora tendrás que pagar las consecuencias. Y después, seguramente él no quiera saber nada de ti. Pagar diez millones por sacarme de allí. Quizá no lo hará. Sentía desesperación. No sabía qué hacer. No podía hacer nada.
Luke conducía dirección a las afueras de Londres, era un barrio suburbial. Casas y apartamentos antiguos, pubs llenos de jóvenes rebeldes y drogadictos. Un ambiente al que yo no estaba acostumbrada.
Llegamos a un pequeño bloque de apartamentos, Luke paró el coche en la puerta del edificio. Me sacó de su coche a la fuerza, me cogía del brazo con fuerza. Las piernas me flaqueaban, apenas podía caminar. La verdad, mis nervios ocupaban todos mis pensamientos, me sentía mareada, y tenía un choque de sentimientos y sensaciones por todo mi cuerpo.
Subimos hasta un piso desordenado, pequeño y oscuro. Quizá Luke vivía allí. No lo sabía. No parecía un lugar acogedor. Además, aquel lugar no me daba buena espina, quizá era porque sabía cuáles eran las intenciones de Luke.
-Ahora comienza la acción, cariño -Luke rió mientras cerraba la puerta con llave a su paso.