Esto es malo... Muy malo.
Badra me mira con una sonrisa muy extraña desde hace ya varios segundos, nunca vi esa expresión en su rostro.
¿Extasiado?, ¿Deleite?, ¿Nervioso?, ¿Alegre?. ¿Qué rayos es esa mirada?.
- Estaba yendo a la cocina a comer algo... -dije sonriendo nerviosamente mientras trataba de agacharme poco a poco para zafarme de sus brazos y salir corriendo.
Pero el parece notarlo. Sus manos que estaban a los costados de mis caderas, ahora sujetaban mis manos contra la pared.
Badra me miró serio. Seriamente a mis ojos. Y sujetaba con fuerza mis muñecas contra la pared a los costados de mi cabeza.
- Heeeeee, ¿Quieres comer algo? -dijo con una sonrisa aparentemente amable.
¡Amable nada!, Es como... Como la de un depredador en busca de su presa.
El lamió su labio inferior. Parecía deseoso de algo. No quiero decir esto pero... Parece desear algo de mí.
- ¿Por qué tus manos tiemblan pequeña Camille? -el se acercó más y más a mí.
Una de sus piernas se ubicaron entre las mías. El acercó su rostro a mi cuello, y luego se acercó a mi oído.
- Me agrada este olor... Este dulce aroma de mujer que desprendes Camille... ¿Sabes que me hace sentir esto? -respiraba tranquilamente cerca de mi oído- Siento algo muy pecaminoso en mí... Pero es agradable, lo deseo con todo mi ser, ese olor Camille... Tu olor me provoca y mucho, creo que no podré contenerme más desde ahora... -entonces lamió mi oreja.
Tengo miedo. Hace mucho... No sentía miedo.
- Vamos, vamos, no llores Ca-mi-lle -dijo coquetamente mientras se alejaba de mi oído y me miraba fijamente a los ojos- Será divertido, para ti y para mí mi preciada Camille... -dijo sonriéndome- Vamos deja de temblar y llorar, no me agrada que me mires asustada -su expresión cambio repentinamente a una seria y molesta.
Quiero irme, déjame irme. Papá, ¿Dónde estás?, Ven a mi rápido papi, rápido. Badra... Empieza a asustarme.
- "Papá ven a mí" -dijo mirándome fijamente- ¿Eso pensabas cierto?, Lo tienes dibujado en tu rostro... -el sonrió- Así que tú padre eh... -su mirada era siniestra y oscura- Estás haciendo que me moleste Camille, ¿Pensar en tu padre en estos momentos?, ¿Cuándo estás conmigo?, ¿Tanto me temes? O... -su mirada se volvió muy enojada y psicópata- ¿O TANTO LO AMAS?, ¿MÁS QUE A MÍ? -ahora empezaba a apretar mis muñecas fuertemente.
- Badra... Me lastimas... Me estás lastim... ¡Ay! -dije cuando el me estiró hacia él y luego me volvió a lanzar con fuerza a la pared.
- Arruinas el momento Camille... -el chasqueó la lengua- Odio que me veas como un monstruo... Odio ver que me temes tanto como para empezar a temblar y pensar en tu padre... Tsk -el me soltó y me dio la espalda- Puedo ser un asesino despiadado, amante de la sangre y la tortura, pero... No forzaría a nada, a la mujer que amo -me miró de reojo y sonrió- ¿O debo decir mujercita eh?, Aún te falta crecer Camille -me sonrió- Pero, me alegra saber que ya puedo decirte "mujer" y no niña... O tratarte como una -el se giró a mirarme nuevamente a los ojos- Aunque no sé si podré contenerme cada vez que sienta el más mínimo olor de tu aroma Camille... Ahora mismo, tendré que ir a encargarme de mí mismo -sonrió nuevamente sombrío- pero me duele que ames tanto a tu padre y no a mí eh -el seguía mirándome a los ojos.
Mis piernas seguían temblando. Mis manos también... Badra... Es muy peligroso, pude sentirlo en su mirada y en la fuerza con la que me sostenía.
¿En qué pensaba yo cuando creí que podría controlarlo?, Esta claro, que... Qué solo se dejó controlar por mí todo este tiempo. Pero en cualquier momento, puede perder la cabeza y...
- ¿Lo sientes? -dijo al tomar mi mano y acercarlo a su corazón- Está todo acelerado por ti Camille... -su mirada seria seguía clavada en mí- Lo siento si te asusté, pero... Hablo enserio cuando digo que me gustas como mujer, te amo Camille, más que nada en el mundo, y por ello, por ello no me da ganas de lastimarte ni forzarte a nada -dicho esto acarició suavemente mis mejillas.
Y entonces... Me dió un suave beso en los labios. Nuestros labios rozaron entre sí.
Enseguida se separó con una sonrisa socarrona.
- El primero -me guiñó el ojo.
- ¿Quién está ahí? -dijo Kenya restregando sus ojos y acercándose- Ah... Camille y Nathan... ¿¡NATHAN!? -dijo preocupada alejándome de Badra.
- Badra... Soy Badra, suelta a Camille -dijo con una mirada amenazante.
Oh, es verdad, es la primera vez que Kenya se encuentra con él. Guido y Alessandra ya lo vieron pero ella no.
Pero no tengo tiempo de pensar en presentarlos... Yo... Yo... Badra me besó... Él...
- ¿Desde cuándo tú miras así y como qué Badra? -dijo Kenya abrazándome.
- Camille vamos dile de una... ¿Eh?, ¿Y esa expresión tan linda? -dijo mirándome burlonamente- Te ves tan tierna... Mejillas rojas... Como la sangre que ahora expulsas... ¿Aún te sobra sangre para enviarla a tus mejillas? -dijo acercándose a Kenya y a mí.
Kenya sintió el peligro. No sabía que pasaba, pero sus instintos le decían que Nathan no estaba cuerdo. Badra, seguía acercándose lentamente.
- Das un paso más y no responderé -dijo Kenya colocándome detrás suyo.
Badre rió, e ignorando la advertencia siguió acercándose. Kenya le dió una patada en el rostro. Badre, escupió molesto su sangre y luego miró con odio a Kenya.
- ¡Hey qué te pasa!, Estás actuando ra... ¡Aaah!, Eso duele Nathan, ¡Hey! -dijo Kenya cuando Badra la tomó de sus largos cabellos castaños y la lanzó contra la pared fuertemente.
- Te levantas de ahí, te consideraré una enemiga y te asesinaré -dijo fríamente con una mirada psicópata a Kenya mientras me tomaba de las muñecas y me acercaba a su cuerpo.
- ¡No!, Badra, detente -dije empujándolo y yendo hacia Kenya- Le haces algo a ella y quién te matará seré yo -le dije aún con las mejillas sonrojadas levantando a Kenya del suelo.
Badra se rió. No tomo enserio mis palabras... Bueno, no es como si pudiera realmente hacer algo contra el, ya lo he visto luchar contra papá en algunas ocasiones, y si el sigue vivo, es porque papá no logro deshacerse de él aún... ¿O tal ves es por Nathan?, Como sea... Jamás sería capaz de enfrentarme a él y salir ilesa... Ya ví de lo que es capaz en ese estado.
Le di la espalda y empecé a alejarme con Kenya.
- ¡Hey!, Tú y yo aún no terminamos de hablar Camille -dijo sujetándome del brazo.
- ¡Se acabó!, ¡Y-yo no tengo n-na-nada de que hablar contigo! -le dije liberándome de su agarre.
- No te puedo tomar enserio nada cuando tienes tan linda y provocativa expresión Camille -dijo acercándose peligrosamente a mi rostro otra vez.
Esta vez Kenya me jaló hacia atrás de ella nuevamente. Badra la miró muy molesto.
- No sé qué pasa contigo Nathan... Pero estas loco de remate -dicho esto Kenya empezó a arrastrarme lejos de él.
Curiosamente esta vez Badra no nos siguió. Se quedó parado allá con una sonrisa victoriosa. Me guiñó el ojo al ver que me gire a mirarlo.
Entonces devolví mi mirada al frente y continué caminando al lado de Kenya.
¿Por qué?... ¿Por qué el miedo que tenía hace momentos se fue?, Y... ¿Por qué no me molesta el beso?... M-Mi primer beso... Y... Y... Es con...
- ¿Estás bien?, Estas roja Camille, ¿Tienes fiebre?, Claro estás en pijama y hace frio, de seguro pegaste un gripe -dijo preocupada Kenya.
- Beso... B-beso... -susurré para mí misma.
- ¿Eh?, ¿Beso?, ¿Qué sucede?, ¿¡La fiebre está tan alta que empiezas a delirar!? -dijo más preocupada.
No, no, no... N-no puedo hablar tranquila... Lo siento Kenya. ¡No sé porqué me pasa esto!. ¿No debería estar enojada con Badra?, ¿Con miedo como antes?, ¿Por... Por qué me siento tan tranquila entonces?, ¿¡Por qué!?...
A-Además eso fue c-como be-be-besar a Nathan, ¿No?. S-son la misma persona, l-los mismos la-la-labios...
Mi corazón sigue latiendo... Late veloz, m-muy-muy veloz... Me asusta, ¿Acaso explotará?... ¿Por qué repentinamente a-ahora?, ¿No debía estar así antes?, Espera... ¿Debía estar así antes?, ¿Por qué a-ahora que lo pienso?.
¿Es por qué antes estaba en shock?, ¿Me sentí paralizada?... Un momento, ¿Yo estaba shock?, ¿Lo estaba en primer lugar?.
¿Qué... Qué me anda sucediendo?, ¿Qué es esto?, ¡Aaaah!, Me... Me rindo. No entiendo... Qué pasa conmigo...
Simplemente... Todo esto... Sucedió.
A-Así es, e-era inevitable, ¿Cierto?, N-no es que podía escapar... Entonces solo sucedió... Solo.... Sucedió inevitablemente... S-sí así es...
- Nathan realmente es aquél que masacró a sus amigos -dijo Kenya frunciendo el ceño preocupada- Camille, ¡Casi te lastima!, ¿Qué hubiera pasado si no llegaba? -dijo con una mirada lamentable.